La crisis de semiconductores también subió los precios de los vehículos usados
La falta de autos nuevos en los inventarios de las agencias, debido a la crisis de semiconductores, ha acelerado la demanda de vehículos usados elevando sus precios; un fenómeno que se prevé se mantenga en este año.
La demanda de autos usados durante 2021 subió a niveles no esperados ante la escasez de vehículos nuevos provocada por la escasez mundial de semiconductores de uso automotriz y una rápida recuperación de las necesidades de movilidad -ya sea por ocio o trabajo- ante el aligeramiento de las restricciones sanitarias en el país.
El aumento en la demanda es consistente con lo reportado por la Encuesta Nacional de Confianza del Consumidor, que muestra que para el primer mes del año, la intención de compra de un vehículo nuevo o usado entre la población alcanzó un nivel de 13.1, muy bajo en la escala de 0 a 100, pero acorde con el comportamiento histórico de este índice e incluso muy cercano a su pico alcanzado en 2018.
Tan solo a mediados de 2021, cuando el indicador estaba apenas a la mitad de su último nivel reportado, el director nacional de ventas de KIA Motors en México, David García, señaló que la demanda de sus modelos seminuevos se había incrementado en 34%, incluso cuando la compañía fue de las menos afectadas por la crisis de semiconductores entre las marcas que se producen en el país.
El buen desempeño de los usados también se da de forma paralela al débil desempeño de las ventas de vehículos nuevos que en diciembre alcanzaron la 97 mil 365 unidades, (-) 7.8% menos respecto al mismo mes del 2020 y el peor nivel para un mes similar desde 2009.
Con todo, las ventas acumuladas durante los 12 meses de 2021 lograron un nivel 6.8% mayor al del año anterior, lo que la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) explica que sucedió debido a que la primera mitad del año tuvo un desempeño saludable mismo que se desplomó en junio cuando la crisis de semiconductores empeoró y con ello se elevó el número de paros de producción en el país.
Inflación también pega a usados
El aumento de la demanda de autos usados trajo consigo un efecto tanto inesperado como indeseado: un importante incremento en los precios de venta como sucede en los Estados Unidos.
En condiciones normales el precio de los autos usados está limitado por el de los vehículos nuevos, pues no resulta atractivo para ningún comprador adquirir un auto en peor condición que uno nuevo por un precio similar. Por ello, suelen devaluarse y no revaluarse, como ahora está sucediendo.
Según datos de Kavak, la mayor plataforma de venta de autos usados en línea de México, el precio de los carros ha incrementado alrededor de 9%, por encima de la inflación e incluso de los autos nuevos, que se encarecieron 8.7% durante el año anterior.
"Es la tormenta perfecta que se enfrenta a la sequía perfecta: hay una gran demanda y simplemente no hay suficientes coches. Eso explica por qué los precios de los autos usados están subiendo de la forma en que lo están haciendo", dijo Alejandro Guerra, director general de Kavak a Expansión.
Si bien, se trata de mercados diferentes la venta de autos nuevos y usados opera en conjunto pues las existencias en el mercado usado provienen de clientes que cambian sus autos viejos por otros nuevos. Pero ante la falta de opciones para compra de nuevos vehículos, los inventarios de usados no se están llenando al mismo ritmo que antes.
Así, la crisis de los semiconductores se convirtió en una ventaja para los vendedores, quienes aumentan sus ganancias con una mayor demanda y un mejor precio de reventa, pero una desventaja para los consumidores quienes ven la diferencia de precio entre comprar un vehículo nuevo y usado cada vez más reducido.
Así como en el mercado estadounidense, esto es especialmente grave debido a que el mercado de automóviles usados es, por mucho, más grande que el de nuevos. Mientras cada año se venden alrededor de 1 millón de autos nuevos, se venden entre seis y siete millones de usados, según Kavak.
Se espera que el proceso de “revaluación” continúe mientras no se resuelva la crisis de los semiconductores lo que podría suceder en el mejor de los casos a mediados de este año y en el peor hasta 2023.
Aunque la reciente entrada en vigor del polémico decreto de regularización de los 'auto chocolate’ en 10 estados podría presionar a una baja de hasta 20% en promedio a las unidades seminuevas legales en México, pues, estos vehículos cuestan entre 30% y 50% menos.