Frena Musk planta de Tesla en México ¿Un adelanto de lo que viene con EU?

El futuro de la gigafábrica de Tesla en Nuevo León está sujeta a las elecciones en Estados Unidos, dijo Elon Musk. "No tiene sentido invertir mucho en México" si Trump aplica aranceles a los vehículos producidos en el país, razonó el multimillonario.
23 Julio, 2024 Actualizado el 23 de Julio, a las 19:24
Musk apoya a Donald Trump, quien ha encarado a México por permitir la inversión china en el sector automotriz afectando a EEUU.
Musk apoya a Donald Trump, quien ha encarado a México por permitir la inversión china en el sector automotriz afectando a EEUU.
Arena Pública

Finalmente, Elon Musk reveló la poderosa razón del freno puesto a la anunciada gigafactory de Tesla en México: El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y sus agresivas políticas comerciales y de inversión en perjuicio de México. Una explicación que había crecido en México en las últimas semanas, a la par del avance electoral del republicano frente al presidente Biden.

En la tarde del martes, durante la llamada con los inversionistas después de presentar el reporte trimestral de la compañía, Elon Reeve Musk, el fundador y CEO de Tesla, dio a conocer que la inversión se encuentra detenida hasta que se lleven a cabo las elecciones en Estados Unidos.  

“Creo que tenemos que ver lo que pasa con la elección. Trump ha dicho que pondrá aranceles a los vehículos producidos en México. Así que no tiene sentido invertir mucho en México si eso va pasar", declaró el director ejecutivo de la empresa en la llamada con los inversionistas.

El proyecto promovido como “la inversión del año” en México desde marzo del 2023, se enfrentó a múltiples rumores sobre su real avance. Pese a que Samuel García Sepúlveda, gobernador de Nuevo León, afirmó que en marzo de este año comenzaría a desarrollarse la construcción, Musk dijo que las altas tasas de interés eran un factor a tomar en cuenta en el retraso del desarrollo de la gigafactory. Ahora, el empresario que enfrenta una fuerte competencia en el mercado de vehículos eléctricos, dijo que evaluará el desarrollo de la elección en Estados Unidos para continuar con la inversión.

Musk ha mostrado públicamente su apoyo a Donald Trump, el candidato presidencial republicano que repetidamente ha dicho en su campaña que México está permitiendo la entrada de inversión china en el sector automotriz, por lo que podrían verse afectados los empleos estadounidenses.

“Algo realmente malo está pasando allá en México. China está construyendo enormes plantas de automóviles. Van a dejar sin trabajo al UAW (sindicato de trabajadores del sector automotriz). Las están construyendo en México para fabricar autos para venderlos en Estados Unidos, ¿qué ganamos con esto?”, dijo Trump en  entrevista concedida a la revista BusinessWeek, publicada la semana pasada.

Además, dijo que buscará que las empresas continúen construyendo en Estados Unidos. “Quiero que construyan aquí. Ésa es la otra cosa que hacen los aranceles. Si impones aranceles a las empresas, ellas construirán aquí, porque no querrán pagar el arancel”.

A inicios de este mes la Casa Blanca anunció que se cobrarán aranceles de 25% y 10% al metal proveniente de México si no comprueba que es de origen completamente mexicano, como una consecuencia de la guerra comercial con China.

Sin embargo, esta no es la única razón por la que una planta en México se encuentra por debajo de las prioridades de Tesla.

En el segundo trimestre, Tesla se enfrentó a una caída del 45% en su beneficio neto como consecuencia de recortes en precios derivados del aumento en la competencia en el sector de autos eléctricos, su principal fuente de ingresos.

La compañía reportó 1,480 millones de dólares en beneficio neto, una cifra menor a la esperada y en comparación con el mismo trimestre del año pasado, cuando reportó 2,700 millones de dólares.

Las cifras que no terminan de convencer a inversionistas ni cumplir con expectativas, surgen en un contexto duro para Tesla. En enero de este año, su competidor BYD superó a Tesla como principal fabricante de autos eléctricos en el mundo.

Por ahora la compañía está enfocada en mantener y rescatar esta línea tras la desaceleración en las ventas, además de impulsar el robotaxi, que dijo que se se presentará el próximo mes de octubre. 

¿Un adelanto de lo que viene para México?

La decisión de Musk de frenar -por ahora temporalmente- su inversión en México, estaría revelando un duro escollo al que se enfrentarían los proyectos de inversión en México alrededor de la poderosa industria automotriz, entre otras, en el escenario de que Trump regrese a la Casa Blanca. Hoy por hoy, la industria automotriz es la mayor fuente de exportaciones del país.

"La decisión de Musk pone de relieve el riesgo político que enfrenta México, que espera beneficiarse de las políticas de nearshoring del presidente estadounidense Joe Biden", escribió Dana Hull en Bloomberg, posterior a la noticia.

Los próximos pasos que dé el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum en su relación comercial con China -país con el que México tiene un déficit comercial histórico y creciente- serán cruciales frente a las intenciones de una política industrial estadounidense más proteccionista, no sólo con Donald Trump, sino incluso con Kamala Harris y los demócratas en el Congreso estadounidense.

Es en ese sentido que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, advirtió el fin de semana pasado en San Luis Potosí, sobre la necesidad de revisar la relación comercial con China, porque “nos vende y no nos compra, y eso no es comercio justo”, dijo Ramírez de la O.