Retraso de presentación de 'robotaxi' de Tesla augura un nuevo desaire
El plan de retrasar el evento de presentación del esperado "robotaxi" hasta octubre puede ser una decisión en la que se asome un nuevo desaire en la carrera de la autonomía automotriz. La compañía inicialmente había planeado revelar el diseño de este vehículo autónomo el 8 de agosto, pero necesita más tiempo para trabajar en los prototipos, según informó Bloomberg.
Esta decisión surge después de que Musk priorizara el desarrollo de un robotaxi autónomo, dejando de lado incluso su estrategia de vender autos eléctricos asequibles. Por ello, asegurar la construcción de los prototipos es crucial, tomando en cuenta el historial de sus lanzamientos.
La CyberTruck es un buen ejemplo: una camioneta completamente eléctrica que Musk presentó en 2019. Sin embargo, después de su lanzamiento, y de haber vendido alrededor de 4 mil unidades, fue retirado del mercado recientemente debido a un problema con el acelerador que se atascaba.
Algunos propietarios han recibido una alerta indicando que "el vehículo puede perder repentinamente potencia eléctrica, dirección y propulsión". Además, es recomendable tener cuidado con los dedos al usar el maletero delantero y las puertas, ya que no tienen sensores estándar de la industria que prevengan accidentes.
Tesla había retrasado el lanzamiento de la Cybertruck varias veces para corregir defectos de diseño y fabricación, según la compañía, por lo que el retraso del robotaxi probablemente no es una sorpresa, sin embargo, como ha ocurrido anteriormente puede que tenga problemas de diseño y de funcionamiento.
Aunado a ello, es posible que se enfrente a obstáculos propios de la automatización, como otros vehículos autónomos que ya se encuentran brindando el servicio de taxi. Uno de los principales desarrolladores es Waymo, una empresa de tecnología autónoma que desarrolla sistemas de conducción autónoma para vehículos subsidiaria de Alphabet, matriz de Google.
Una flota de taxis autónomos de Waymo ya opera en San Francisco y Phoenix, y recientemente ha empezado a transportar pasajeros en una zona limitada del condado de Los Ángeles.
Sin embargo, se ha enfrentado a obstáculos de seguridad y de regulación. En mayo de este año, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) inició una investigación sobre la flota de robotaxis tras una serie de informes que afirmaban que los vehículos violaban las leyes de seguridad vial y chocaban contra rejas, columnas y autos estacionados.
Una evaluación preliminar de los vehículos de Waymo sigue a 22 informes de incidentes que involucran a estos vehículos, incluyendo choques con objetos, vehículos estacionados y portones, así como otros casos en los que los autos autónomos violaron las leyes de tránsito, según la NHTSA.
De los 22 informes, 17 implicaban choques o incendios. Los reguladores señalaron que el sistema de conducción automatizada de Waymo "parecía desobedecer los dispositivos de control de seguridad del tráfico" y que los choques ocurrieron después de que los vehículos "mostraran un comportamiento inesperado" cerca de estos dispositivos.
Pero Waymo no es la única empresa con esta problemática. Su principal competidor, Cruise, empresa de taxis autónomos propiedad de General Motors, suspendió sus servicios en todo el país tras una serie de incidentes relacionados con sus vehículos, incluyendo un caso en el que un peatón fue atropellado y arrastrado debajo del vehículo el año pasado.
A Cruise le revocaron sus permisos en California apenas dos meses después de recibir la autorización para ampliar sus servicios a viajes sin conductor las 24 horas del día, los 7 días de la semana en San Francisco. Los reguladores de California declararon en ese momento que los robotaxis de Cruise representaban "un riesgo irrazonable para la seguridad pública".
En noviembre, Cruise retiró toda su flota y comenzó a despedir a sus empleados. Su director ejecutivo renunció poco después y, según informes, el nuevo jefe informó recientemente a su personal que la compañía había alcanzado un "punto bajo histórico".
El desastre en medio de la innovación no es tan sorprendente después de que Tesla también ha tenido incidentes de seguridad con sus coches autónomos, sin embargo, esta apuesta es su carta maestra.
El historial de Tesla se ha caracterizado por pérdidas en los últimos trimestres, y cuidar este lanzamiento es crucial. Tal como informa Bloomberg Line, debido a que su crecimiento y los márgenes en el negocio existente de fabricación de vehículos se ha tambaleado, la empresa necesita promesas para compensar la falta de crecimiento.
Pero esta postergación en realidad podría ser un síntoma de malestar, después de que el retraso también afectó negativamente a las acciones de Tesla, que cayeron más del 6% tras la divulgación de la noticia.
El desarrollo de sistemas de conducción autónoma y robotaxis sigue siendo un proceso con dificultades de las que es posible que Tesla no se salve.
