Solo tres aerolíneas dominarán el mercado mexicano post Covid
El mercado de aerolíneas en México será de solo tres jugadores que competirán por el control de las rutas nacionales.
De acuerdo con analistas solo Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris tienen el tamaño y la fortaleza financiera para liderar el mercado nacional. A medida que se fortalezca la economía nacional y se relajen las restricciones de viaje en otros países del mundo, el crecimiento de estos jugadores dependerá de la creación de nuevas rutas internas y la expansión a países geográficamente cercanos, principalmente en Sudamérica.
Y si bien hay todavía otros jugadores en el sector que tienen un tamaño considerable, sus problemas financieros y/o tamaño les impedirán convertirse en rivales serios para estos tres gigantes, particularmente luego que éstos aprovecharon la salida de Interjet, uno de los últimos grandes competidores del sector a nivel nacional, para fortalecer sus respectivas posiciones.
Lo anterior no significa que, con la llegada del 2022, no se vayan a presentar retos para el crecimiento de estas aerolíneas. Si bien el efecto de la COVID-19 en las actividades comerciales de las aerolíneas es evidentemente cada vez más reducido, se espera que futuras olas de infecciones o la llegada de variantes a México pudiera dificultar el crecimiento de estas compañías. A eso se deben sumar algunos potenciales retos en materia de costos, particularmente en lo que respecta a la volatilidad en el precio de los combustibles.
Pandemia y recuperación
Con la crisis de la COVID-19, al igual que en otras partes del mundo, los viajes aéreos se fueron prácticamente a ceros con el cierre de actividades al aire libre y las restricciones de viaje en muchos países. Con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los ingresos del transporte aéreo regular en líneas nacionales alcanzó su punto más bajo de los últimos tres años en abril del 2020. Frente al mes previo, la caída fue de 83.74%. Frente a abril de 2019, de 89.44%.
Las principales aerolíneas del país lidiaron con este golpe de forma distinta. De acuerdo con Jonathan Félix, director asociado de Verum Calificadora de Valores, “en el caso de Aeroméxico, dada la carga financiera que tenía en el corto plazo, tuvo que entrar en un proceso de reestructura financiera bajo el Capítulo 11 de la legislación de los Estados Unidos […] para proteger su liquidez […] y seguir operando. En el caso de Viva Aerobus, también se enfrentaron a problemas financieros, pero ellos no se fueron a bancarrota, pudieron solventar todos sus retos. Y Volaris fue la que mejor enfrentó la pandemia, porque no tenía obligaciones de corto plazo, fuera de los arrendamientos”.
Pero Interjet no tuvo la suerte de sus competidoras. La suspensión intermitente de vuelos inició a finales de noviembre del 2020, y desde diciembre pasado la aerolínea no ofrece viajes a los consumidores. La salida de este jugador ha sido crucial, apunta Jonathan Félix, para el crecimiento de al menos dos de las aerolíneas mexicanas líderes.
“Viva Aerobus y Volaris toman el mercado que Interjet dejó, y por eso lograron recuperarse más o menos rápido de la pandemia. Por eso ahora están totalmente recuperadas […]. Siguen creciendo, no van a dejar de crecer […]. Estimamos que van a permanecer con sus números de pasajeros transportados más estables, porque ahora el pastel se reparte entre menos”, señala.
En el caso de Aeroméxico, de acuerdo con Brian Rodríguez, analista bursátil del grupo financiero Monex, la salida de Interjet no fue tan positiva porque “está enfocado a un target distinto, un poco más elevado y centrado en viajes de negocio. Esto le da algunos beneficios, pero también lo deja afuera de este pastel que dejó Interjet”. Sin embargo, añade el analista, como Aeroméxico tiene casi control completo del mercado internacional, tiene una posición relativamente sólida incluso cuando los viajes hacia y desde otros países no se han recuperado por completo.
El que haya menos rivales no necesariamente significa que no existan todavía riesgos importantes. Según Brian Rodríguez, la pandemia se mantiene como el peligro más importante para el negocio de las aerolíneas; especialmente con la llegada de nuevas variantes al escenario global, incluso cuando las medidas sanitarias dentro de México no han sido tan restrictivas como en el resto del mundo.
El especialista de Monex señala también que “la volatilidad que ha mostrado el precio de los combustibles durante los últimos meses” es una amenaza importante. Recuerda que lo llegamos a ver “en 85 dólares, el máximo histórico de los últimos años. Este nivel representa importantes presiones a nivel de los márgenes de rentabilidad de las aerolíneas”.
Competencia entre aerolíneas hacia 2022
En este contexto, hay algunas predicciones que los expertos pueden hacer sobre el futuro de las aerolíneas mexicanas. Primero, parece que los tres jugadores que restan en México buscarán expandirse fuera de los mercados que ya tienen dominados.
“Vemos que las empresas de bajo precio empiezan a voltear a ver a algunas hacia Sudamérica, porque están tratando de extenderse a nivel internacional”, asegura Brian Rodríguez, mientras que para el caso específico de Aeroméxico “hay mayores restricciones, y no porque no pueda seguir creciendo, sino porque su alianza con Delta prácticamente ya abarca cualquier viaje a nivel mundial. Entonces su estrategia se está enfocando al tráfico local”.
Al respecto, en una declaración recibida vía correo electrónico, Aeroméxico confirmó que “continuará incrementando frecuencias y destinos”, haciendo especial énfasis en la apertura de cuatro rutas internacionales (Monterrey-Madrid, Guadalajara-Madrid, Cancún-Sao Paulo y Ciudad de México–Tegucigalpa) y la reactivación de dos nacionales (Guadalajara-Tijuana y Guadalajara-Cancún) solo entre diciembre y enero próximos
En medio de este crecimiento, no se espera que haya muchos jugadores que puedan hacerles frente a las tres empresas que dominarán el sector. Según Jonathan Félix, aunque Interjet planea retomar operaciones en 2022, “tiene muchos retos para salir por delante, de inicio arreglar los problemas financieros y operativos que tiene, sus problemas con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y con sus accionistas. Y una vez que haga todo eso, debe replantear su modelo de negocio para poder entrar en un mercado que ya no es el mismo que hace dos años […]. Son muchos pasos, que hace difícil tener una certeza de qué pasará con la empresa”.
También desestima que jugadores como Aeromar, o nuevas aerolíneas, puedan tener un efecto en el mercado nacional. Sobre Aeromar, a pesar de sus esfuerzos para convertirse en la “aerolínea del bienestar”, comenta que la empresa no pinta mucho en el mercado regional. Y que lleguen otras empresas, “es el escenario menos probable. Ni siquiera lo vemos como escenario. Es una industria muy cíclica, que requiere mucho capital y que no cualquiera puede entrar rápido”.