Cabify recibió 70 mdd del BID para fomentar cuentas de pensiones entre conductores
La precarización del trabajo no es precisamente una de las metas por las que luche el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aún así otorgó un préstamo por 70 millones de dólares a Cabify para “atraer nuevos clientes y conductores”.
Ante el aumento de los trabajadores independientes a través de los llamados empleos colaborativos en América Latina, el BID decidió apostar a que Cabify podría ser un aliado para implementar las políticas de seguridad social necesarias para la población pero sin obligatoriedad en muchos países como tener una cuenta de ahorro para la futura pensión.
Dentro del Plan de Acción Ambiental y Social que se integra en la descripción del proyecto de Cabify en el BID Invest, se especifica que tres meses después del primer desembolso de fondos la empresa debe desarrollar y promover “mecanismos que alienten a los conductores independientes a adoptar voluntariamente alguna cobertura de seguridad social”.
Es decir que, para el caso mexicano, se buscará que sean los conductores los que se asocien al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y según su edad entreguen sus aportaciones que van desde los 3,850 pesos anuales hasta los 9,100 pesos, esto con el fin de que cuenten con asistencia médica, quirúrgica, farmacéutica, hospitalaria y de maternidad.
Pero no solo eso, sino que también tendría que promover la apertura de una cuenta individual de Afore, así como la constante aportación voluntaria, un programa que ya llevan a cabo desde 2018 en alianza con el mismo BID en Perú.
Dentro de este país la plataforma de Cabify envía mensaje a sus conductores para que decidan si desean destinar parte de sus ingresos que acaban de recibir a su cuenta de ahorro para la pensión, de ser así el proceso no debe llevar más de tres clicks para finalizar la operación.
Esto proyecto es parte del programa Laboratorio de Pensiones del BID y debido a su reciente integración aún no hay un estudio de impacto y resultados, sin embargo, aseguran que “si los mensajes resultan ser eficientes para aumentar el ahorro y modificar comportamientos [de ahorro para la pensión], existe un tremendo potencial a explotar”.
No obstante, ni el seguro social o la cuenta de ahorro recibirán aportaciones por parte de Cabify como si fuera un patrón, un reclamo que se la ha hecho a esta y todas las empresas de empleo colaborativo en todo el mundo, como Uber o Rappi desde sus inicios y con este préstamo millonario el BID da por hecho que en el corto plazo no tendrá una solución por lo que tendrán que ser los trabajadores los únicos que van por su futuro.
De acuerdo con el planteamiento del programa Laboratorio de Pensiones “en un futuro, los sistemas de pensiones tendrán que adecuarse a una nueva realidad donde habrán muchos más trabajadores independientes que no dependen de un ingreso fijo mensual” en gran parte por el desarrollo de la tecnología dentro del empleo.
Solo en México, en el tercer trimestre de 2018 se dio con un 5.09% el mayor incremento anual de trabajadores independientes desde el 12.78% observado en el cuarto trimestre de 2018, al mismo tiempo que estos trabajadores alcanzaban una proporción del 27.33% en relación a la población total ocupada después de cinco años de mantener un promedio de 26.77%.
El préstamo también se incluyeron otras condiciones como el fomento en la igualdad de género entre los conductores, lo que implica la localización de barreras de entrada para mujeres conductoras y el diseño de mecanismos que las reduzcas.
Así como la promoción en el uso de vehículos híbridos o eléctricos y la creación de una norma sobre emisiones permitidas en cada país, para que se aplique a los vehículos que usen la plataforma hasta alcanzar un una meta de reducción emisiones realizables en cada mercado.
MÁS INFORMACIÓN: Proyecto Cabify, BID.
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