Metrobús en Insurgentes: saturado en 12 años de operación
12 años de operación tiene la Línea 1 del Metrobús, que cruza la ciudad de norte a sur por avenida Insurgentes, y ya no da para más.
Actualmente, la Línea 1 del Metrobús transporta más pasajeros que ocho de las 12 Líneas del Metro, con la diferencia de que tiene una infraestructura de mucho menor tamaño para darle cabida a casi 400 mil usuarios diarios en promedio.
Únicamente las Líneas 1 (Pantitlán-Observatorio), 2 (Cuatro Caminos-Taxqueña), 3 (Indios Verdes-Universidad y B (Buenavista-Ciudad Azteca) del Metro, recibieron más usuarios que la Línea 1 del Metrobús (Indios Verdes-El Caminero).
Las Líneas 8 (Garibaldi-Constitución de 1917) y 9 (Pantitlán-Tacubaya) registraron un número similar a la cantidad de usuarios del Metrobús Insurgentes, que ya rebasó en pasajeros transportados al resto de las Líneas.
Por ejemplo, la Línea 1 del Metrobús transportó casi el triple de pasajeros que la Línea 6 del Metro (El Rosario-Martín Carrera) y casi cinco veces más que la Línea 4 (Martin Carrera-Santa Anita), según cifras oficiales del Sistema de Transporte Colectivo y el Metrobús.
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Si todo quedara en el número de pasajeros transportados, tal vez el problema no sería grave, pero lo relevante es que hay otros factores que indican que la saturación del Metrobús en Insurgentes tarde o temprano colapsará.
El tamaño sí importa
Los usuarios lo saben y lo padecen. Por más autobuses que se sumen a la Línea 1 del Metrobús, no hay forma de evitar que el abordarje sea un suplicio en hora pico.
Los 225 autobuses asignados a la Línea 1 del Metrobús resultaron insuficientes para los 393 mil pasajeros al día que se reportaron en 2016. En teoría, un autobús biarticulado (con cuatro puertas de acceso y por lo tanto el más largo) tiene capacidad para 240 pasajeros, mientras que los articulados tienen espacio para 160 personas.
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El resultado de esta capacidad tan limitada en los autobuses es lo que sufren diariamente los usuarios: camiones llenos a más no poder, que imposibilitan su abordaje una vez que llegan a las estaciones.
Por ello, es común que en las llamadas “horas pico” los autobuses que viajan por Insurgentes vayan saturados y que en los andenes los usuarios dejen pasar varias unidades antes de poder abordar una que los lleve a su destino.
Un tren del Metro, en cambio, tiene capacidad para transportar hasta mil 500 personas. A la Línea 2, que es la que mayor cantidad de usuarios tiene, están asignados 40 trenes.
Durante las horas pico, los andenes del Metrobús se saturan.
Esto no significa que la Línea 2 no esté saturada, pero el uso de vehículos de mayor capacidad genera que no sea tan complicado abordar el convoy en las horas de mayor afluencia, debido a que aumenta el número de pasajeros que descienden en cada estación.
Ahora bien, tampoco se trata del número de usuarios y de la cantidad de vehículos disponibles.
La señal que más debe alertar a las autoridades es la saturación de los andenes. Y es que las dimensiones de las estaciones del Metrobús son muy limitadas, así como la capacidad para alojar pasajeros.
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En promedio, las estaciones del Metrobús no tienen más de 50 metros de largo y, cuando mucho, cuatro de ancho; esto genera un área en los andenes de no más de 200 metros cuadrados donde se llegan a amontonar decenas de pasajeros.
En contraste, los andenes del Metro tienen 150 metros de largo, y cuatro metros de ancho, por cada sentido. Es decir hay mil 200 metros cuadrados disponibles para alojar a los usuarios que esperan un tren, eso sin contar con el resto de espacio que tienen las estaciones.
La infraestructura del Metrobús es más limitada que la del Metro.
Es decir, tanto dentro de los vehículos, como en los andenes, la concentración de usuarios es mucho mayor en el Metrobús que en el Metro, por lo cual, las incomodidades para los pasajeros son mayores.
Razones de peso
Casi al final de su gestión como regente del Distrito Federal, ahora Ciudad de México, Óscar Espinosa presentó el Plan Maestro del Metro y Trenes Ligeros que establecía lineamientos de cómo debería crecer la red de transporte público masivo en la Zona Metropolitana del Valle de México.
Y aunque desde 1996 a la fecha las cosas cambiaron mucho en la capital del país y el crecimiento de la ciudad no fue como se esperaba hace más de 20 años, el plan consideraba la construcción de una Línea del Metro, la 10, a lo largo de Insurgentes, al menos desde Eulalia Guzmán hasta Cuicuilco.
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La construcción del Metrobús en Insurgentes sepultó este proyecto, pero si algo se tenía claro hace más de 20 años era la necesidad de consolidar un proyecto de transporte masivo de gran capacidad para esta vialidad.
El Metrobús, aunque representa una solución a la movilidad de las personas tiene, por naturaleza, una capacidad mucho más limitada que la del Metro, pero en 2004 se determinó esta alternativa, principalmente por el costo.
Cada kilómetro del Metro tiene un costo estimado que supera los mil millones de pesos, mientras que el costo de un sistema como el Metrobús es de 100 millones.
Entonces, desce hace casi 15 años las autoridades locales optaron por la opción barata, en lugar de la de largo plazo.
MÁS INFORMACIÓN: Informe Anual 2016, Metrobús, enero de 2017.
MÁS INFORMACIÓN: Cifras de operación, Sistema de Transporte Colectivo Metro, fecha de consulta 11 de julio de 2017.
MÁS INFORMACIÓN: Plan maestro del Metro y Trenes Ligeros, Gobierno del Distrito Federal, fecha de consulta 11 de julio de 2017.
