Más demagogia sin compromisos concretos, posicionamiento de Peña en política exterior
El tiempo pasa y siguen sin conocerse las acciones concretas con las que el gobierno de la República negociará la relación bilateral entre México y Estados Unidos.
La llegada a la Casa Blanca de un empresario con posturas proteccionistas y nacionalistas cambiará las reglas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, un acuerdo comercial que se mantuvo sin modificaciones significativas desde su creación en 1994.
El nuevo Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dejado claro que re-negociará las condiciones del acuerdo comercial y prescindirá de este si es que no beneficia a los trabajadores estadounidenses.
Mientras que Trump y el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, han realizado una serie de acciones concretas de cara a afrontar la re-negociación del Tratado, el Presidente Enrique Peña Nieto en sus múltiples discursos públicos continúa sin dejar claro cuál es el plan para México.
“Ni confrontación, ni sumisión, la solución es el diálogo y la negociación,” dijo Enrique Peña al hacer público el posicionamiento en política exterior que tendrá México para negociar con Estados Unidos y Canadá el cual contempla 10 objetivos poco concretos.
“Los intercambios comerciales entre los tres países deben estar exentos de cualquier arancel o cuota, como ha ocurrido desde 2008,” fue el sexto de los objetivos anunciados por el Presidente mexicano.
Mientras Enrique Peña no aterriza como logrará ese objetivo, el mandatario estadounidense ha hecho acciones muy concretas en sentido contrario, como amenazar a las gigantes automotrices Ford Motor Company y General Motors con ponerles una tarifa de 35% a los bienes manufacturados en México que luego exportan hacia Estados Unidos.
Una amenaza concreta que ya hizo claudicar inversiones de ambas empresas en el país.
“No hay instrucciones específicas a los negociadores, seguimos fuera de la jugada y en falta de sintonía con el riesgo que encaramos estos días […] El mensaje es preocupante, regresa a las vaguedades, el formato es arcaico y del viejo priismo,” dijo Jesús Silva-Herzog Márquez, politólogo por la Universidad de Columbia, respecto del posicionamiento de Enrique Peña.
“Una oportunidad perdida el evento de hoy,” remata en entrevista para un programa de radio.
En Canadá el Primer Ministro Justin Trudeau reunió a su gabinete para deliberar las posiciones que tomará al negociar el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y México en una reunión que durará dos días.
Sin siquiera haber concluido la reunión el embajador de Canadá en Estados Unidos, David MacNaughton, ha dejado ver entre líneas que su país podría avanzar en las negociaciones del acuerdo comercial sin México.
“Cooperaremos en asuntos trilaterales cuando sea de nuestro interés y buscaremos hacer cosas que también sirvan a nuestros intereses de manera bilateral. Algunas de ellas estarán dentro del TLCAN, otras quizás no,” dijo el domingo en la noche.
“La prioridad es evitar que Canadá sufra daños colaterales en acciones comerciales dirigidas a China y México […] No creo que Canadá sea para nada el objetivo, pero creo que somos parte de eso”, dijo MacNaughton.
Mientras en Canadá se delibera un plan de acción para afrontar el cambio, el discurso de Enrique Peña en México apunta a que nada se fuera a modificar: “Norte América tiene el beneficio de poder ser la región comercial más poderosa del mundo,” dijo al concluir el decálogo de objetivos que tendrá la negociación con sus vecinos del norte.
El fin de semana de 21 y 22 de enero Enrique Peña hablo por teléfono con Trudeau y Trump, pero no los ha visto personalmente. Una fuente anónima -retomada por medios como Bloomberg- ha informado que el yerno de Trump, Jared Kushner, se reunirá con el Primer Ministro de Canadá en Calgary, provincia de Alberta, el mismo lugar donde se lleva a cabo la reunión del gabinete.
Enrique Peña se reunirá con Trump hasta el 31 de enero, si dentro de ocho días México sigue sin un plan concreto para enfrentar la negociación del tratado comercial más importante que tiene el país, México podría quedarse en desventaja frente a Estados Unidos y Canadá cuyos gobiernos se están organizando con celeridad para sacar el mayor provecho.
Los 10 objetivos que el gobierno mexicano buscará en la negociación del TLCAN:
1.- Que el gobierno de Estados Unidos se comprometa a garantizar el trato humano y respetar los derechos de los migrantes mexicanos.
2.- Que cualquier proceso de repatriación se ejecute de manera ordenada y coordinada. Que se mantengan y mejoren los protocolos firmados previamente.
3.- Compromiso conjunto para promover el desarrollo de países de Centroamérica.
4.- Evitar que se encarezca el envío de remesas.
5.- Que Estados Unidos se comprometa a trabajar con México para detener el tráfico de armas y dinero.
6.- Preservar el libre comercio entre Canadá, Estados Unidos y México para que que los tres esten exentos de cualquier arancel o cuota.
7.- Incluir en el acuerdo comercial a sectores como telecomunicaciones, energía y comercio electrónico.
8.- Cualquier acuerdo debe traducirse en mejores salarios para los trabajadores mexicanos.
9.- Proteger el flujo de inversiones a México. Buscaremos acuerdos que den certidumbre a la inversión y comercio entre los tres países. Se defenderán las inversiones nacionales y extranjeras que hayan confiado en México.
10.- Trabajaremos por una frontera que nos una, no que nos divida. El país no cree en los muros.
A FONDO: Posicionamiento en política exterior, presidencia de la República, 23 de enero de 2017.
A FONDO: 5 Principios que guiarán la negociación con el gobierno de los EUA, 23 de enero de 2017
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