Por cuarta vez Baja California Sur es uno de los epicentros de la pandemia
Los estados turísticos del país vuelven a ser los protagonistas de la nueva ola de contagios de COVID 19 ante una variante aún más contagiosa que Delta.
El país se encuentra en su cuarta ola de contagios, un escenario esperado desde meses antelación, pues las autoridades de salud ya anticiparon que el invierno y la temporada de reuniones navideñas volviera a causar un nuevo repunte en los casos. Pero con lo que no contaban era con Ómicron.
Esta semana, a través de su informe semanal, la Organización Mundial de la Salud dio a conocer que de las 357 mil 206 secuencias registradas por la organización de investigación GISAID, 208 mil 870 (58.5), correspondían a Ómicron, es decir, la inusitada rapidez del virus logró en alrededor de mes y medio de estar en las sombras a ser la principal responsable del grueso de los nuevos contagios
México no es la excepción. Según el Consejo Mexicano de Vigilancia Genómica, Omicrón ya domina los contagios en el país, en todas las zonas.
Los estados turísticos, incluída la capital del país, vuelven a ser -por cuarta vez- los epicentros nacionales de la pandemia, aunque con la aparición de algunos nuevos estados -como San Luis Potosí- en la lista de repuntes.
Entre los municipios más afectados del país se encuentra La Paz, capital de Baja California Sur, y los Cabos, el mayor centro de turismo de la entidad y uno de los destinos más populares entre los turistas extranjeros, los cuales tienen el 1er y 6to lugar entre los municipios con mayor incidencia (contagios por cada 100 habitantes) del país.
Según la Secretaría de Salud de la entidad, al último corte existen 7 mil 781 casos activos de COVID 19, de los cuales 5 mil 170 se encuentran en la ciudad capital y mil 198 en el destino turístico. Aunque en términos absolutos la Ciudad de México acumula la mayor cantidad de casos activos con más de 50 mil.
La repentina aparición de Omicrón tan solo unos días previos al inicio de la temporada de vacaciones navideñas, puso en jaque a las autoridades, empresarios turísticos e incluso aerolíneas, quienes comenzaron a tomar medidas precautorias, pero descartando nuevos cierres ante el peligro de arruinar la necesaria recuperación del sector y una mayor confianza ante el alto porcentaje de vacunados entre los nacionales y los extranjeros.
Según la Encuesta de Viajeros Internacionales (EVI) hasta noviembre de 2021, llegaron 28.1 millones de turistas internacionales al país, por arriba del 2020 pero aún debajo de los 40.3 millones que recibió durante el 2019, quedando todavía un largo trecho para salir de las garras de la crisis pandémica.
Pero a pesar de la resiliencia de la industria turística no se contaba con que, además del ritmo de propagación de la variante, ésta tiene la capacidad de infectar con mayor facilidad a quienes previamente habían enfermado o se habían vacunado causando que más de 3 mil vuelos fueran cancelados en plena temporada vacacional ante los contagios de personal aéreo.
Según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), ante el embate de Ómicron y sus efectos sobre la movilidad turística, la recuperación del turismo en 2022 rondará los 8 billones de dólares (bdd), 32% más que en comparación con 2021, aunque todavía por debajo de los 9.2 bdd reportados en 2019 por lo que la organización pidió no dificultar aún más la cosas con restricciones más severas.
“Nuestro mensaje a los gobiernos es no sobrereaccionar sobre cerrar fronteras porque hay nuevas variantes. Es fácil tomar estas decisiones, pero es muy difícil para las empresas restablecer estas operaciones; tienen que tener el balance entre proteger la salud, pero tenemos que pensar en el impacto económico” advirtió Virginia Messina, vicepresidenta del WTTC .
En Quintana Roo aún no domina Ómicron
A pesar que la cuarta ola volvió a afectar a dos de los tres principales epicentros de la pandemia, destaca que Quintana Roo es el menos afectado entre los protagonistas de esta historia.
En olas anteriores, junto a BCS, el estado del Caribe tuvo un alto número de contagios ante la llegada de turistas extranjeros que al no haber restricciones al turismo, llegaron a vacacionar al país aún sin estar vacunados. Ello, junto a la aún baja tasa de vacunación causaron un repunte masivo en especial en la tercera ola, que llegó prematuramente a ambos estados en comparación al resto del país y con especial agresividad a la mayor joya turística de México, Cancún.
En esta ocasión Benito Juárez municipio del que es cabecera Cancún, registra 3 mil 875 casos activos a la fecha de los 5 mil 682 de todo el estado. Esto no significa que el estado no esté sufriendo la cuarta ola ante ello, las autoridades estatales informaron la semana pasada que la entidad volvería a semáforo amarillo ante el repunte de contagios registrados y se reduciría el aforo a 60% para hoteles, restaurante y otros centros turísticos.
Contrario a la tendencia mundial, la Secretaría de Salud de la entidad informó que pese vivir la nueva ola en Quintana Roo, la variante Ómicron apenas representa el 12% de los contagios, mientras que la variante Gamma es responsable del 47%, pese a ser un destino con gran contacto con población extranjera.
La titular de la dependencia, Alejandra Aguirre Crespo, también advirtió que pese a las acciones de planeación del gobierno estatal, se avecina escasez de pruebas de antígeno ante la creciente demanda, un fenómeno del que no es ajeno el resto del país.