Se acelera deterioro de la economía y el clima para los negocios en el país
Prácticamente, todos los indicadores y percepciones de empresas y analistas que se dieron a conocer este lunes por el Inegi, el Banco de México y el IMEF apuntan a una caída en la actividad económica y a un mayor pesimismo en indicadores como tipo de cambio, tasa de interés e inflación para el segundo semestre e inicios del próximo año. La combinación de una esperada desaceleración de la economía con una alta incertidumbre en la transición política, están exacerbando los malos pronósticos hacia adelante.
LOS DATOS DUROS
(Banxico: Encuesta sobre las expectativas de los especialistas del sector privado, realizada entre el 19-27 junio a 40 grupos de análisis y consultoría económica de México y el extranjero)
- El 73% de los especialistas encuestados por el Banco de México (Banxico) cree que la economía está peor que hace un año. Hace 3 meses (en marzo) el 77% dijo que la economía estaba mejor que hace un año.
- El 50% de los encuestados por Banxico cree que el clima de los negocios empeorará en los próximos 6 meses. El otro 50% cree que se mantendrá igual. En marzo, el 36% creía que el clima de los negocios empeoraría.
- El 44% dijo que la coyuntura actual es mal momento para invertir, mientras que el 46% dijo no estar seguro. En marzo, solo el 15% creía que era mal momento para invertir, mientras que 46% respondió que era buen momento para invertir.
- La expectativa de crecimiento del PIB para 2024 se redujo de 2.10 a 2.00%; el tipo de cambio peso/dólar pasó de 17.80 a 18.73 para fin de año; la tasa de interés de 10.00 a 10.25%, y la inflación general de 4.27 a 4.23%, según la encuesta.
- La "incertidumbre política interna", superó a los "problemas de la inseguridad pública", como el principal factor que podrían obstaculizar el crecimiento económico en México, según la encuesta.
- En otro dato de Banxico de este lunes, las remesas en mayo cayeron 1.6% a tasa mensual y 0.9% en comparación anual.
(Inegi: Indicador de Pedidos Manufactureros e Indicadores de Confianza Empresarial, a junio)
- El indicador de Pedidos Manufactureros en junio, con cifras desestacionalizadas, cayó (-)2.12 puntos a 49.4 puntos, el menor nivel desde noviembre, y se ubicó en zona de contracción, después de 5 meses de mantenerse en expansión. Prácticamente todos los rubros que conforman el indicador (pedidos, producción, personal ocupado e inventarios) sufrieron caídas, con excepción de la oportunidad de entrega. Destacan la caída mensual de (-)4.48 puntos en los pedidos manufactureros, así como la ya prolongada tendencia descendente de la producción en los últimos 12 meses.
- La confianza empresarial del sector manufacturero también cayó (-)0.7 puntos, a 53 puntos, se mantiene en zona de expansión.
(Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, IMEF)
- El Indicador IMEF manufacturero a junio subió 0.4 puntos a 49.5 puntos, aún en zona de contracción, "confirmando una lenta actividad manufacturera", dijo IMEF en su boletín.
- El Indicador IMEF no manufacturero a junio se incrementó 0.6 puntos a 51 puntos, en zona de expansión aunque perdiendo fuerza en los últimos meses. "El sector servicios y de comercio sigue liderando el dinamismo de la economía", dijo el IMEF.
- En suma, para el IMEF, "la economía recuperó cierto dinamismo en el mes (junio) pero se mantuvo el lento ritmo de expansión durante el 2T24... apuntan a un crecimiento moderado para el segundo trimestre del año. La economía se encuentra en una evidente pausa".
LA CUESTIÓN CENTRAL: Con las cifras disponibles, la economía al segundo trimestre se ha desacelerado más de lo que se esperaba inicialmente, después de un primer trimestre con un crecimiento que podría ser revisado hacia 0.2% trimestral. Ello agrava las bajas expectativas de crecimiento para el año.
Mientras que el segundo semestre viene con expectativas de un mayor deterioro, solo sustentadas por el consumo. La caída en las importaciones de bienes de capital de mayo y las malas expectativas sobre el clima de negocios e inversiones ya presagian descensos en la inversión privada para los próximos meses, principalmente por la gran incertidumbre en la transición política y la esperada volatilidad financiera. A lo anterior, se suma la desaceleración manufacturera en Estados Unidos y los mayores riesgos comerciales por un probable regreso de Trump a la presidencia.
