Crecen riesgos por veto mexicano a importaciones de maíz amarillo desde EU
La disputa por el maíz amarrillo entre México y los Estados Unidos continúa e incluso amenaza con escalar a un verdadero conflicto comercial.
Luego de poco más de dos meses de tensiones, incertidumbre y reuniones entre actores gubernamentales de alto nivel, el choque entre agroproductores y representantes comerciales estadounidenses con la iniciativa presidencial de prohibir las importaciones de “maíz amarrillo transgénico” han vuelto a escalar en un rápido giro de las negociaciones.
Este lunes, el negociador agrícola en jefe de la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR), Doug McKalip, y el subsecretario de Comercio y Asuntos Agrícolas Extranjeros del Departamento de Agricultura, Alexis Taylor, expresaron su rechazo a la propuesta del gobierno mexicano de extender la entrada en vigencia de la prohibición hasta el 31 de diciembre del 2024.
“Estos cambios no son suficientes y el enfoque propuesto por México, que no se basa en la ciencia, aún amenaza con interrumpir miles de millones de dólares en el comercio agrícola bilateral”, señalaron las autoridades comerciales y agrícolas estadounidenses a partir de un comunicado de la USTR.
La respuesta la USTR derribó las especulaciones previas sobre un posible acuerdo, incluso cuando apenas a principios de año, el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos, informó que sus contrapartes estadounidenses habían “considerado satisfactoria esta respuesta” anticipando que durante la segunda mitad del mes la disputa sería cosa del pasado.
Pese a las declaraciones del funcionario mexicano, las ríspidas negociaciones previas que incluso incluyeron la visita del Secretario de Agricultura estadounidense, Tom Vilsack, quién se reunió con el Presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado 28 de noviembre, no dieron buenas señales de avance ante las posiciones “inamovibles” de ambos personajes.
El propio Vilsack advirtió poco después en la reunión anual de la American Farm Bureau Federation en Puerto Rico que no había “ninguna razón para comprometerse” con la propuesta mexicana, lo que no solo se confirmó este lunes sino que escaló ante la amenaza de las autoridades estadounidense de “sacar las garras” ante la irresoluble disputa.
"Dejamos en claro hoy que, si este problema no se resuelve, consideraremos todas las opciones, incluida la adopción de medidas formales para hacer cumplir nuestros derechos en virtud del Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá", dijo la oficina de la representante comercial de los EU, Katherine Tai, en un comunicado.
Descontrolado precio del maíz
Las tensiones sobre las importaciones de uno de los producto agrícolas más importantes para México se han convertido en un riesgo aún más fuerte conforme el precio del maíz crece de forma descontrolada.
Hasta enero de 2023, el maíz amarillo aumentó su precio a 262 dólares por tonelada en el mercado de granos de Chicago, uno de sus mayor niveles en la historia, y si bien dicho grano no suele utilizarse para consumo humano su importancia como alimento para ganado representa un riesgo indirecto para otros precios como los pecuarios.
México no es autosuficiente en la producción de este tipo de maíz por lo que para satisfacer la demanda tiene que importar anualmente alrededor de 17.5 millones de toneladas de grano amarillo. Pero por si fuera poco, también el precio del básico maíz blanco también está escalando.
El incontrolable precio del maíz blanco ha provocado que un producto esencial para las familias mexicanas como la tortilla se haya encarecido 16.6% solo en 2022, poco más de dos veces la inflación general de 7.8%, que de por sí ya es históricamente alta.
Ante este escenario, el pasado 16 de enero de 2023 la Secretaría de Economía publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un decreto por el cual establece un arancel de 50% a la exportación de maíz blanco, vigente hasta el 30 de junio del presente año, con finalidad de garantizar un abasto suficiente y mantener la producción nacional en el país, intentando frenar el precio del grano blanco.
Si bien México es autosuficiente en este tipo de maíz y el presidente López Obrador resaltó la transitoriedad de esta medida, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) advirtió que el nuevo arancel podría incrementar las tensiones comerciales de México con sus socios del TMEC, especialmente Estados Unidos.
"Sumado a la falta de beneficios para la estabilidad de precios, la medida entra en conflicto con las obligaciones que México tiene con sus socios comerciales, las cuales le impiden establecer restricciones a la comercialización de algún producto. Esto genera una percepción de falta de compromiso con los acuerdos comerciales y reduce la competitividad del país", señaló el IMCO en una reciente nota-
Y es que el vecino del norte no solo tiene una disputa con respecto al tema agrícola, sino que mantiene actualmente negociaciones por la disputa energética con México y recientemente perdió ante sus dos socios del TMEC el panel sobre la interpretación de las reglas de origen de la industria automotriz, por lo que se podría aumentar las tensiones políticas en los dos temas vigentes.