México debe ir más allá de exportar vehículos: Banxico
México ha ganado terreno recientemente frente a China en los productos que compran los estadounidenses, sin embargo sus ventajas derivadas de las restricciones en la producción global de bienes podrían no ser suficientes para mantener su supremacía en las importaciones del gigante del norte.
La participación de México en las importaciones de Estados Unidos pasaron de 13.4% en 2017 a 15.5% en el primer semestre de 2023, mientras que la participación de China cayó fuertemente, de 21.6% a 13.3%, en ese mismo periodo derivado de la "guerra comercial" y el alza de tarifas arancelarias aplicadas por Estados Unidos a las importaciones chinas que pasaron de 2.7% en junio de 2017, con cifras promedio ponderadas, a 12.5% en el primer semestre de este año, según cálculos del Banco de México (Banxico).
México fue el país con mayor ganancia de participación en las compras estadounidenses durante ese periodo con 2.2 puntos porcentuales (pp), a raíz de la pérdida de los 8.8 pp de China; pero también ganaron participación Vietnam, con 1.5 pp, Canadá, con 1.1 pp, Taiwán (+0.9) y la India (+0.7). El consumo de bienes en Estados Unidos fue impulsado por la recomposición de la demanda durante la pandemia y también por las medidas de expansión fiscal que implementó el gobierno del presidente Biden, y que condujo a mayores importaciones: Mientras que en 2019 el gasto en bienes representó en promedio el 36% del gasto total real de consumo, entre enero y junio de este año se elevó al 39%.
Las cifras muestran que entre 2017 y 2023 la mayor participación de México en las importaciones estadounidenses se han derivado de una combinación "del efecto positivo de proveeduría del sector automotriz observado desde 2019, así como de un efecto proveeduría entre los bienes no automotrices sin petróleo crudo que cobró mayor peso en 2022 y 2023", puntualiza el banco central en un reporte especial incluido en el Informe Trimestral que presentó la semana pasada.
El incremento en la proveeduría de bienes de México a Estados Unidos se ha focalizado en un pequeño grupo de sectores. "Los productos específicos en los que México ha tenido un mayor dinamismo en el mercado de los Estados Unidos han sido los accesorios para computadoras (la participación se incrementó de 4.4% en 2017 a 6.8% en enero-junio de 2023); el equipo médico (de 18.9 a 23.4%, en la misma comparación); los muebles y enseres domésticos (de 5.8 a 10.5%); los teléfonos y celulares (de 4.5 a 6.2%); los juguetes y artículos deportivos (de 3.0 a 3.6%)", explica Banxico.
El mismo reporte explica que "las mayores exportaciones de estos tipos de bienes hacia Estados Unidos podrían estar vinculadas, en parte, con el proceso de reconfiguración regional de las cadenas de producción y con los estímulos fiscales de Estados Unidos para fortalecer su proveeduría doméstica".
Sin embargo, el banco central también advierte que las mayores importaciones estadounidenses no automotrices y no petroleras, "podría estar determinada más por una oferta global aún restringida de ciertos bienes, que por un cambio en las preferencias de consumo de Estados Unidos", lo que apunta a que estas mayores importaciones no necesariamente llegaron para quedarse y podrían revertirse en un horizonte no muy lejano.
La gobernadora del banco central, Victoria Rodríguez, dijo en conferencia de prensa durante la presentación del Informe que las exportaciones mexicanas a Estados Unidos han sido factor de "resiliencia" de la economía mexicana, junto a otros factores como el crecimiento del consumo.
En julio las exportaciones totales crecieron 2.9% a tasa anual, pero las exportaciones no petroleras a Estados Unidos crecieron 6.9% anual, y en los primeros siete meses del año el crecimiento fue de 7.2%, mostrando la demanda sostenida de las compras desde Estados Unidos. Pero, particularmente, las exportaciones del sector automotriz a Estados Unidos siguieron mostrando una fortaleza inusitada con un crecimiento de 37.5% en julio, y de 17.7% para el acumulado enero-julio, en comparación anual.
Sin embargo, como el propio banco central lo reconoce, México tendrá que profundizar su integración con Estados Unidos y Canadá más allá del sector automotriz, "en nuevos sectores" e "incursionando en etapas de mayor valor agregado", concluye el Informe.