Impone China restricciones a exportaciones de grafito: ¿impacto a movilidad eléctrica?
Una más de parte del gigante asiático. China, país líder en la producción de grafito a nivel mundial, ha anunciado restricciones a las exportaciones de este material vital para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos (VE).
Según informes del Ministerio de Comercio, a partir del 1 de diciembre se requerirá que los exportadores obtengan permisos especiales para enviar grafito al extranjero, con la justificación oficial de proteger la seguridad nacional.
El Ministerio de Comercio de China dijo que estas restricciones tienen como objetivo garantizar la seguridad y la estabilidad de la cadena de suministro a nivel global, sin estar dirigidas a ningún país específico. Entre los principales compradores de grafito de China se encuentran Japón, India, Corea del Sur y Estados Unidos, según datos de aduanas chinas.
“El Ministerio de Comercio de China, junto con la Administración General de Aduanas, ha anunciado el ajuste de las medidas temporales de control de exportaciones artículos de grafito, incluyendo oficialmente tres tipos de grafito altamente sensibles que anteriormente estaban controlados temporalmente, mientras que se ha levantado el control temporal sobre cinco artículos de grafito de baja sensibilidad”, dijo un portavoz mediante una rueda de prensa.
El grafito es un componente fundamental en la fabricación de ánodos de baterías de VE, que son esenciales para el almacenamiento de energía y la viabilidad de la movilidad eléctrica. China ha establecido su dominio sobre la producción y refinación de grafito, proporcionando más del 90% del grafito refinado a nivel global.
La noticia se da a conocer en un contexto en el que las tensiones comerciales entre China y varias naciones occidentales están en un punto álgido. La Unión Europea está considerando actualmente la imposición de aranceles a los vehículos eléctricos fabricados en China, debido a preocupaciones sobre subsidios injustos otorgados a las empresas chinas. Al mismo tiempo, el gobierno de Estados Unidos ha endurecido significativamente las restricciones al acceso de las empresas chinas a semiconductores de alta tecnología, incluyendo la suspensión de las ventas de chips de inteligencia artificial de última generación fabricados por empresas como Nvidia.
Pero estas restricciones no se limitan al grafito. China había implementado antes medidas similares a partir del 1 de agosto para dos metales críticos utilizados en la fabricación de chips: el galio y el germanio. Estas restricciones ya han tenido un impacto tangible en las exportaciones de estos metales y han generado un aumento de los precios en los mercados internacionales.
En respuesta a esta creciente dependencia de las exportaciones de China y las restricciones en el suministro, varios países, incluyendo Estados Unidos, Canadá y Australia, están impulsando la expansión de su producción de grafito para disminuir su vulnerabilidad. Sin embargo, el mercado global se podría enfrentar a un gran desafío para encontrar fuentes alternativas que puedan satisfacer la creciente demanda de la industria de vehículos eléctricos.
El impacto a corto plazo de estas restricciones aún no está claro. Según analistas de Reuters, anteriormente, restricciones temporales al grafito no tuvieron un impacto significativo en las industrias que dependen de este material. A pesar de la disminución de los precios del grafito en el mercado chino, los expertos sugieren que estas restricciones podrían generar un aumento de los precios a nivel internacional, lo que podría tener un impacto en la competitividad de la industria de vehículos eléctricos.
La industria de vehículos eléctricos, que se encuentra en pleno auge, depende en gran medida de los ánodos de grafito. De extenderse esta medida, los fabricantes de automóviles podrían enfrentarse al desafío de asegurar un suministro de grafito fuera de China, lo que podría aumentar los costos de producción y afectar a la competitividad de la industria.
La decisión podría, además, aumentar la tensión que actualmente se vive en torno al país asiático, especialmente con Estados Unidos y la Unión Europea.