Primeros pasos hacia la legislación de IA en México
En un contexto donde la Inteligencia Artificial (IA) transforma industrias y sociedades a gran velocidad, establecer una regulación clara y efectiva se ha convertido en una necesidad urgente. Este esfuerzo busca proteger los derechos humanos, fomentar la innovación y garantizar un impacto positivo en la vida de las personas.
México comienza a dar pasos en esta dirección con la reciente creación de la Comisión de Análisis, Seguimiento y Evaluación sobre la Aplicación y Desarrollo de la Inteligencia Artificial, instalada el pasado 15 de octubre en el Senado de la República. Ayer, el senador Rolando Zapata Bello, presidente de la Comisión, presentó su plan de trabajo.
Esta Comisión es única en su tipo, ya que no existen antecedentes similares en el país. Su objetivo principal es construir un marco normativo que regule el uso ético, inclusivo y responsable de la IA, además de abordar los grandes retos que esta tecnología plantea. Entre ellos destacan la protección de datos personales, la mitigación de la discriminación algorítmica y la gobernanza tecnológica. El desafío no es menor: se trata de legislar en un terreno complejo, con impactos profundos en áreas como la equidad, la seguridad, la privacidad y el desarrollo económico.
La Unión Europea ha liderado los esfuerzos regulatorios en materia de IA. En abril de 2021, la Comisión Europea presentó el primer marco legal global para clasificar los sistemas de IA según su nivel de riesgo. Este proceso culminó el 9 de diciembre de 2023 con la aprobación de la Ley de Inteligencia Artificial (AI Act), un referente mundial en regulación. La normativa establece requisitos de transparencia y responsabilidad para las empresas, así como sanciones por incumplimientos.
Basada en principios éticos y de derechos humanos, esta legislación busca equilibrar los beneficios de la innovación con la protección de valores democráticos. Sin embargo, también ha sido criticada por su carácter restrictivo, que podría frenar la innovación tecnológica. El reto, entonces, es encontrar el equilibrio: ¿cómo fomentar el desarrollo de herramientas éticas y seguras sin limitar el potencial de innovación que ofrece la IA?
México enfrenta el desafío de construir un andamiaje jurídico adaptado a su realidad, mientras responde a los cambios de la Revolución 4.0. Sin marcos normativos mínimos, el país corre el riesgo de fomentar el uso indebido de la IA, incrementando desigualdades y vulnerando derechos fundamentales.
El plan de trabajo presentado por la Comisión del Senado busca cerrar esta brecha. Inspirándose en experiencias internacionales, la propuesta aboga por adaptar soluciones globales a las particularidades mexicanas. Para ello, la colaboración entre gobierno, industria, academia y sociedad civil es fundamental. Los principales temas que aborda el plan son:
- Protección de datos y privacidad.
- Responsabilidad civil y penal.
- Discriminación algorítmica y sesgos en los datos.
- Ética en el desarrollo y uso de IA.
- Impacto laboral y redistribución económica.
- Propiedad intelectual y derechos de autor.
- Colaboración internacional y armonización normativa.
- Seguridad cibernética y seguridad nacional.
- Hacia un Marco Normativo Integral
El plan propone un marco legal que defina conceptos clave para evitar interpretaciones ambiguas y diseñe leyes flexibles capaces de adaptarse a futuras innovaciones. Entre los ejes centrales destacan:
1. Regulación Ética y Supervisión Algorítmica
La Comisión busca implementar mecanismos de auditoría y supervisión de algoritmos, priorizando el bienestar social sobre los intereses económicos a corto plazo. Asimismo, se promoverán campañas de alfabetización digital para democratizar el acceso a la IA y reducir los riesgos de exclusión tecnológica.
2. Capacitación y Adaptación Laboral
Para enfrentar los retos de la automatización, se desarrollarán programas de upskilling y reskilling, dirigidos a trabajadores en riesgo de desplazamiento. Esto permitirá que más personas se integren a la economía digital y se beneficien del desarrollo tecnológico.
3. Protección de Datos y Derechos Digitales
Actualizar las leyes de protección de datos personales es prioritario, dado que las normativas actuales no abarcan los riesgos específicos de la IA. La gobernanza y supervisión de la IA incluirán la creación de estándares para monitorear el impacto social y económico de estas tecnologías, además de establecer un diálogo constante con expertos y sociedad civil.
4. Colaboración Internacional
Alinear las regulaciones mexicanas con estándares internacionales es esencial para garantizar una integración efectiva al entorno global. La Comisión participará en foros internacionales y buscará alianzas estratégicas para compartir mejores prácticas y aprendizajes.
En conclusión, la creación de esta Comisión es un paso importante, pero el éxito de la iniciativa dependerá de la colaboración de todos los sectores. Como mencioné en un artículo anterior titulado “México, rezagada la regulación en Inteligencia Artificial”:
“Para posicionarse como líder en América Latina y evolucionar de un mero consumidor a un creador de tecnología, México necesita responder proactivamente a las demandas de un entorno global en constante cambio e innovación. Es importante convocar a una colaboración inclusiva entre sectores, instituciones académicas y representantes de la sociedad civil. Vamos tarde…”
Hoy, aunque con retraso, México ha dado un paso clave. La regulación de la IA es un tema urgente que no puede esperar más. La pregunta ya no es si adoptaremos esta tecnología, sino si seremos líderes en su desarrollo ético y responsable o simples observadores de su impacto.
La inteligencia artificial ofrece oportunidades sin precedentes, pero también plantea riesgos significativos. La Comisión de IA en el Senado representa un esfuerzo pionero para garantizar que esta tecnología beneficie a todos los mexicanos, respetando los valores democráticos y protegiendo los derechos fundamentales.
La colaboración entre legisladores, académicos, empresas y sociedad civil será esencial para construir un marco regulatorio que equilibre la innovación con la protección de los ciudadanos. Más allá de regular, se trata de liderar el camino hacia un futuro donde la IA no solo transforme nuestras vidas, sino que lo haga de manera justa, segura e inclusiva.
¿Adoptaremos pasivamente esta poderosa tecnología o lideramos su evolución? La respuesta definirá nuestro papel en la era de la IA.
Referencias de interés:
Plan de Trabajo de la Comisión Ordinaria de Análisis, Seguimiento y Evaluación sobre la aplicación y desarrollo de la Inteligencia Artificial en México Correspondiente al Primer Año de Ejercicio de la LXVI Legislatura
Claudia Jiménez (2024) México rezagada la regulación en IA, Arena Pública. https://www.arenapublica.com/opinion/claudia-jimenez/mexico-rezagada-la-regulacion-en-inteligencia-artificial