Los problemas de logística en México de cara al Buen Fin
Debería haber capacidad logística suficiente en México para lidiar con el aumento de la demanda esperada por el Buen Fin.
De acuerdo con Patricia Pérez Salazar, Head of Sales Middle America de Maersk, los importadores y retailers líderes en el sector han puesto un mayor énfasis a la planeación de largo plazo durante 2021, con el objetivo de “aplanar los picos [de demanda para el Buen Fin o Navidad]. Con la enseñanza del 2020, desde principios del año, empezaron a traer más inventario”.
Reafirma que, entre sus clientes, se ha llegado a la conclusión que “a pesar que el costo de la transportación internacional ha subido por la sub-optimización del sistema de logística, es una fracción relativamente pequeña del costo del producto. Lo que cuesta más es que no llegue y no se venda. Una venta perdida es un golpe muchísimo más grande que el aumento que podría haber en la transportación”.
Esta acumulación de inventario sería clave para la supervivencia de los comercios de México de cara al Buen Fin. De acuerdo con Armando Solbes, cofundador y director de finanzas de Skydropx, “hay compañías que están acostumbradas a operar de una manera muy eficiente, lean, con poco inventario. Pero el consejo sería invertir más en inventarios para estar más preparados para hacer frente a la creciente demanda que se va a ver en los próximos meses”.
El experto reafirma además que será doblemente importante l acumulación de inventario porque, aunque el Buen Fin es un pico, las ventas no dejan de presionar a las retailers sino hasta inicios del próximo año, gracias a festejos como Navidad y Año Nuevo.
A pesar de este importante reto, asegura que “va a ser muy distinto a lo que vimos el año pasado. Entonces se saturó toda la logística porque tuvieron un crecimiento que no se esperaban. Pero a raíz de esto, en la experiencia que hemos tenido nosotros, hemos visto una fuerte inversión de todos los jugadores del sector en México. Creo que ya están preparados. Difícilmente les tomará por sorpresa [en este Buen Fin] como les tomó el incremento de la demanda al inicio de la pandemia”.
La experta de Maersk especifica que “no podría determinar si todas las empresas están listas y preparadas, pero sí puedo decir que muchos importadores y retailers han logrado adaptarse a los patrones de consumo de los clientes […]. Definitivamente aquí jugará la estrategia de cada compañía: cómo se prepararon, qué hicieron con antelación […] si adoptaron soluciones de entregas… Si lo planteo en términos generales, creo que las medidas se tomaron”.
Esta visión contrasta con los focos rojos que se han ido prendiendo entre otros especialistas de México conforme se acerca la temporada del Buen Fin. La firma Drip Capital México advertía, desde finales de septiembre, que los altos precios de fletes internacionales, la escasez de insumos para electrónicos y la reducción de actividad en puertos clave en todo el mundo podría provocar desabasto de productos y retrasos en entregas para el Buen Fin, así como Navidad y Día de Reyes.
Barreras (y oportunidades) locales en logística
Cabe destacar que hay otros temas donde ambos especialistas mantienen visiones positivas con respecto a otros elementos que han generado preocupación entre el ecosistema de logística.
Uno de los temas que ha generado focos rojos en el sector es el de la disponibilidad de contenedores. La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) advertía a finales de septiembre que el abasto de mercancías en México estaba presentando retrasos cruciales ligados al movimiento de contenedores. Incluso señaló que se estaba trabajando con las autoridades para evitar afectaciones al Buen Fin.
Pero Patricia Pérez Salazar apunta que la tendencia de importación de contenedores está ya al 96% con respecto a 2019, y se presenta un incremento del 29% con respecto al 2020. En este sentido, reafirma, lo más importante para la logística en México de cara al Buen Fin debe ser que “los importadores puedan tener la visibilidad, no a nivel de un contenedor sino de la cadena de producto. Ver exactamente […] cuándo va a llegar, cuando se va a reabastecer, cuándo se va a entregar el producto para poder cumplir con la promesa a los consumidores”.
Otro tema donde otros especialistas han expresado preocupación es la llegada del Ejército al ecosistema de aduanas. En su momento, el Consejo Empresarial Mexicano del Comercio Exterior (Comce) dijo que la integración de militares al proceso de aduanas debía hacerse de tal forma que no se comprometiera la facilidad de tránsito de mercancías.
En este sentido, Armando Solbes está de acuerdo que poner al ejército en control de las aduanas podría “impactar la operación de los puertos y aduanas”. Sin embargo, defiende que la iniciativa es positiva y que los retos que se podrían presentar serían los mismos de “una oficina nueva que va empezando. [El tema del contrabando] es algo que se debe de atender y no se le puede postergar más tiempo. El reto que se presentará ahorita es el mismo que habría en cualquier otro momento que se decidiera hacer esto”.
El optimismo va incluso un paso más allá de un Buen Fin bien ejecutado. Para Patricia Pérez Salazar, “a nivel genérico, la situación [de la logística en México] es similar en tendencia [a la situación global], pero a lo mejor no tan crítica como en otros mercados más grandes”.
Por esta razón, sugiere que el país se puede convertir en un importante punto de entrada para las empresas que no han podido entrar directamente a Estados Unidos con tanta facilidad, pues la capacidad logística de México aún está mejor parada que la de la Unión Americana.
“Somos el socio por excelencia para el nearshoring en algunas industrias. Yo te diría que México debe incluso capitalizar en la situación en donde está, porque le veo que nos podemos posicionar como una plataforma [de logística] excelente para atender el mercado americano”.