Lanza AMD chips en medio de interrogantes de la inversión en IA
Las apuestas por la Inteligencia Artificial (IA) continúan llegando, aunque no se ha asegurado su éxito. La tecnológica estadounidense Advanced Micro Devices (AMD) presentó sus últimos procesadores de IA durante la feria de tecnología Computex en Taipei.
AI will revolutionize the way we interact with our PC, enabling more intelligent, personalized experiences. AMD is helping enable this future with more performant AI hardware powered by AMD Ryzen AI. pic.twitter.com/idc3eD7xsO
— AMD (@AMD) June 3, 2024
La directora ejecutiva de AMD, Lisa Su, presentó el acelerador MI325X, que estará disponible en el cuarto trimestre de 2024, y detalló los planes de la compañía para desarrollar chips de IA en los próximos dos años.
"La IA es nuestra prioridad número uno y estamos en el comienzo de una época increíblemente emocionante para la industria, ya que la IA transforma prácticamente todos los negocios, mejora nuestra calidad de vida y remodela cada parte del mercado informático", afirmó durante su discurso de apertura.
Sin embargo, esta transformación de la que habla la directora ejecutiva puede estar en tela de juicio. Tal como informa The Wall Street Journal, el ritmo de mejora de las IA se está desacelerando y parece haber menos aplicaciones prácticas de las que se imaginaban originalmente, incluso para los modelos más avanzados.
Aunado esto, la competencia va en incremento. Antes del anuncio de AMD, Nvidia anunció su plataforma de chips de IA de próxima generación Rubin que será lanzada en 2026, según declaró su director ejecutivo, Jensen Huang, el domingo durante el mismo evento.
La familia de chips Rubin incluirá nuevos gráficos (GPU), procesadores centrales (CPU) y chips de red. La nueva CPU se llamará Versa, y los nuevos chips gráficos, diseñados para potenciar aplicaciones de IA, incorporarán memoria de gran ancho de banda de próxima generación, producida por empresas como SK Hynix (000660.KS), Micron (MU.O) y Samsung (005930.KS).
Huang también informó que Nvidia ahora planea lanzar una nueva familia de chips de IA cada año, acelerando su ciclo de lanzamiento anterior que era de aproximadamente cada dos años.
Esto no es una sorpresa. Nvidia, que domina aproximadamente el 80% del mercado de chips de IA, se posiciona así como el principal facilitador y beneficiario del desarrollo creciente en el ámbito de la inteligencia artificial.
Pero este contexto plantea interrogantes sobre si la IA podría convertirse en una mera mercancía, su potencial para generar ingresos y especialmente ganancias, y si realmente está naciendo una nueva economía. El gasto en IA podría estar adelantándose, tal como lo apunta el periódico estadounidense.
Además, el informe reciente de Goldman Sachs “La transición a la IA un año después: en camino, pero el impacto macro aún falta a varios años”, señala que las tasas actuales de adopción de IA Generativa son relativamente bajas, con menos del 5% de las empresas utilizando estas tecnologías. Las barreras para una adopción más amplia incluyen la falta de conocimiento, preocupaciones sobre privacidad y seguridad, y tecnología inmadura.
El gran aumento en la inversión relacionada con la IA y las ganancias de productividad entre los primeros usuarios refuerzan la confianza en que la IA generativa eventualmente impulsará el crecimiento económico. Sin embargo, las tasas de adopción aún son limitadas un año y medio después de que la IA generativa se convirtiera en un tema importante dentro del mercado.
Esta idea respalda que cualquier aumento en la productividad no superará los 0.1 puntos porcentuales hasta 2027 en Estados Unidos y hasta 2028 en otros mercados desarrollados, con la mayor parte del impacto en el PIB mundial después de 2030.
A esta prolongación se le suma la costosa ejecución de modelos de IA y el gasto en chips que supera los ingresos, generando incertidumbre sobre su rentabilidad a largo plazo. Según los informes de ganancias más recientes, empresas como Google, Microsoft y otras han experimentado un aumento en los ingresos por servicios en la nube, atribuido en parte al impulso generado por estas plataformas para el desarrollo de IA en otras empresas.
Sin embargo, la sostenibilidad de estos ingresos depende de que otras compañías y nuevas empresas logren extraer suficiente valor de la IA para justificar las inversiones continuas en la formación y ejecución de estos sistemas.
Además, a pesar de las altas expectativas, la adopción de la IA en el entorno laboral ha sido más lenta de lo anticipado. Aunque muchos trabajadores utilizan la IA en diversas capacidades, solo un pequeño subgrupo depende de ella y está dispuesto a pagar por sus servicios, tal como lo apunta The Wall Street Journal.
Aún así, la competencia en IA se incrementa, y las gigantes tecnológicas no quedan fuera. Alphabet, matriz de Google, Nvidia, Meta y Microsoft se encuentran invirtiendo en IA, mientras que los rumores en torno a una nueva actualización de IA por parte de Apple también se incrementan.