En riesgo competitividad de México ante probable cierre de la Terminal 2 del AICM
Ante las fallas estructurales que presenta la Terminal 2 (T2) del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) el gobierno federal se debate entre rehabilitar o reconstruirla, sin embargo, lo cierto es que su cierre total o parcial restaría competitividad al país.
“Una posibilidad es hacerla de nuevo porque es una falla estructural grave, hay hundimientos diferenciales, y lo otro es apuntalarlo”, dijo Andrés Manuel López Obrador en conferencia el pasado 27 de julio. Agregó que “a lo mejor no se cierra y lo que se hace es que se apuntala para proteger a la gente”.
Sin embargo, su cierre no solo afectaría a los usuarios “ante la imposibilidad de poder abordar muchos de sus vuelos nacionales o internacionales desde el Benito Juárez”, señala en entrevista Carlos Torres, analista en temas de aviación, por el hundimiento que presenta, también afectaría la competitividad del país.
“El hecho de que eventualmente tuviera algún cierre parcial o modificación, le va a restar competitividad al aeropuerto y por supuesto al país, como centro de conexión para poder despachar vuelos no solo al interior, sino de México a otras partes del mundo”, advierte Torres. El experto añade que “sí es algo que le resta visibilidad a México como destino no solo para los negocios, sino también, para el turismo y otras actividades económicas que se desarrollan alrededor de esta industria”.
Tan solo en los primeros seis meses del año, la Terminal 2 atendió al 43% de los pasajeros comerciales y recibió al mayor número de pasajeros en vuelos de llegada, con un millón 727 mil 322, frente a un millón 660 mil 468 pasajeros de la Terminal 1 (T1). Durante junio, tuvo mil 510 operaciones, sólo 70 operaciones por debajo de la T1.
Así mismo, se verían afectadas las operaciones de seis aerolíneas: Delta, Latam Airlines, Aeroméxico Connect, Aeroméxico, Copa Airlines, Aeromar y Wingo. “Al final si la Terminal 2 se cierra o se clausura en el extremo, toda esa demanda de vuelos nacionales tendrán que buscar otros destinos y de los internacionales buscar otros aeropuertos”, señala Torres. Los grandes Hubs con los cuales compite el AICM serían estas opciones: Houston, Dallas o Atlanta y hacia el sur, Panamá.
Con ello, “México dejaría de aparecer en el radar de los vuelos internacionales y eso sí sería una muy mala noticia, para la aviación y para la economía en México”, sentencia.
No es un problema nuevo
Sin embargo, el problema estructural no es algo nuevo. Desde que se realizó en 2005 la Manifestación de Impacto Ambiental se conoce que “las condiciones hidráulicas de la zona de estudio se ha caracterizado por tener el nivel freático somero”. Y respecto al hundimiento señala que “la zona sufre asentamientos del orden de los 25 cm/año, situación que ha sido considerada en el desarrollo conceptual del proyecto”.
Sin embargo, la diferencia acumulada entre el cuerpo terminal y las alas de abordaje a lo largo de 14 años ya es relevante: “se requiere un mantenimiento profundo”, afirma Torres.
El economista y especialista en temas de aviación indicó que el plan de mantenimiento es algo que todos los aeropuertos deben de tener, por lo cual llama la atención que “después de tres años y medio de la administración actual se tenga que realizar un estudio de fondo para saber cuáles son las condiciones particulares de la T2”.
No obstante, esta situación no es de sorprender, pues durante el sexenio actual, el AICM acumula un recorte presupuestal del 30% al pasar de 7 mil 297 millones de pesos (mdp) en 2018 a 5 mil 93 millones en 2021.
Para este año la inversión pública en Infraestructura Aeroportuaria a cargo de la SICT, asciende a 2 mil 529.6 mdp “que se destinará principalmente a la rehabilitación y mantenimiento del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y la reestructuración del espacio aéreo”, señala el Programa de Trabajo 2022. En específico, al AICM corresponden 680 mdp, además cuenta con recursos propios por 126 mdp.
De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, 46 millones 540 mil pesos son para obras para la reestructuración y reforzamiento de la cimentación y superestructura de los edificios terminales, y 45 millones 355 mil 154 pesos para estudios de preinversión para las obras de rehabilitación, mantenimientos mayores y adecuaciones de infraestructura.
En cuanto a la modernización y rehabilitación de las pistas del AICM, Victor Manuel Mojica Vilchis, titular de la Unidad de Político y Control Presupuestario de la SHCP, señaló que “inició con un presupuesto aprobado de 81 millones 500 mil pesos y fue ampliado en la primera mitad del ejercicio para situarlo en 191 millones 500 mil pesos”.
En este sentido, el analista apunta que “si por un lado no tienes recursos presupuestales que te manda la Federación para el mantenimiento del aeropuerto, y el aeropuerto, por otro lado, es incapaz de generar ingresos propios, ¿por qué esos ingresos están dedicados en buena medida a pagar la emisión de deuda de bonos, que en su momento iba a financiar el aeropuerto de Texcoco? Estás en medio de dos problemas financieros importantes”.
“El aeropuerto de la Ciudad de México, con todos sus errores, defectos y todas las críticas que le podemos hacer, sigue siendo el aeropuerto más importante de toda Latinoamérica por el volumen de pasajeros, por encima de Sao Paulo y de Cancún”, concluye Torres.
En lo que va del año, el AICM ha movilizado a 21 millones 183 mil 34 pasajeros, de estos 12 millones 85 mil 608 corresponden a la T1 y 9 millones 97 mil 426 a la T2.