Crece guerra energética entre Rusia y Occidente y petróleo se perfila a superar los 130 dólares
La guerra en Ucrania se intensifica y alrededor de ella, sus efectos sobre el mercado internacional de petróleo también aumentan.
Los Estados Unidos tomaron un nuevo paso en su estrategia por vencer a Rusia a través de una guerra “sin armas” al prohibir las importaciones de crudo ruso en el país, anunció este miércoles la Casa Blanca, en línea con los bloqueos realizados por algunas de las compañías más importantes en el mundo, como Shell y Exxon Mobile, y a los que también se sumó el Reino Unido.
Previo al anuncio oficial de la decisión, el viceprimer ministro de la Federación Rusa Alexander Novak. advirtió en un pronunciamiento a través de un canal de televisión estatal que “está absolutamente claro que el rechazo del petróleo ruso tendrá efectos catastróficos sobre el mercado internacional”.
Novak señaló que un bloqueo en Europa forzará a los europeos a pagar precios significativamente más altos durante más de un año, que sería el tiempo en que el continente podría reemplazar el volumen de crudo que recibe de Rusia. El incremento de precios sería impredecible, podría llegar hasta 300 dólares por barril (dpb) si no es más” dijo el viceprimer ministro.
La decisión de los Estados Unidos y las declaraciones de Novak se dan en medio de un mercado petrolero alcista que lleva creciendo desde hace más de un año y amenaza con desbocar aún más la inflación en el mundo.
Luego de rozar los 130 dpb el día de ayer, a la apertura de este miércoles 9 el barril del futuro del Brent para mayo cotizaba a 121 dpb mientras que el WTI para abril alcanzó los 118 dólares por barril, precios no vistos desde 2011.
Rusia es el segundo productor mundial y desde el inicio de las tensiones previas a la invasión se ha encontrado bajo presiones de riesgos que redujeron sus calificaciones crediticias y aumentaron la incertidumbre respecto a si el mercado seguiría dando entrada al crudo ruso o comenzaría el rechazo, como ahora sucede.
“Al momento del inicio de la invasión los riesgos se vuelven realidad. Las restricciones de los países comienzan a aislar a Rusia y por ende el petróleo estadounidense y de otros productores preponderantes y emergentes comienzan a valorizarse más porque se deja de tener mercado sobre la producción rusa”, explica Santiago Arroyo, director de la consultora energética Ursus Energy.
Para Gonzalo Monroy, director general de la consultora GMEC, el efecto del bloqueo estadounidense a las importaciones de petróleo ruso son mínimas, pues éstas solo representan 1.3% del total. El experto publicó en su cuenta de Twitter que las verdaderas presiones se verían solo si EU logra sumar a más países a su decisión.
Pero Europa ha tomado una posición más timorata derivado de una mucho mayor dependencia del crudo y del gas natural ruso. Luego de reunirse con sus homólogos británico y canadiense, Mark Rutte, primer ministro de Países Bajos -el país europeo con la mayor dependencia de importaciones de crudo ruso (13%)- rechazó sumarse a la decisión pues consideró que tendría “consecuencias catastróficas”, una valoración similar a la de la advertencia del viceprimer ministro ruso.
No obstante, en opinión de Arroyo “el escenario no es real. Considerando que es el agresor, puede pensarse que estos comentarios son un intento por moderar las sanciones a partir de amenazas , desde un punto de vista meramente político… Las proyecciones de mercado no tienen hasta el momento un pronóstico de 300 dpb, aunque sí se tienen de hasta 150 dpb”
Los analistas de Goldman Sachs y Barclays han elevado sus pronósticos afirmando que la crisis en Europa del Este podría provocar uno de los “shocks energéticos más importantes nunca antes vistos” ante el bloqueo de las compras de productos rusos.
Según Goldman Sachs, éstos podrían representar una reducción de 3 millones de barriles por día, la quinta mayor disrupción en un mes desde la segunda guerra mundial. El banco estadounidense elevó su pronóstico a 135 dpb, mientras Barclays advierte que “en el peor de los casos”, podría superar los 200 dólares por barril, un precio brutalmente alto pero todavía lejano al amagado por Novak.
El especialista de Ursus advierte que, pese a que el barril está lejos de alcanzar los 300 dpb, otro de los riesgos “es que la OTAN además de entrar en un conflicto comercial, podría entrar en un conflicto armado, lo que requiere grandes cantidades de insumos derivados del petróleo lo que genera aún más presiones sobre los precios”.
Hasta ahora la participación de la alianza militar internacional mantiene un alto grado de incertidumbre, pues varios de sus miembros han expresado la preocupación de que una intervención termine empeorando las cosas al escalar el conflicto.
¿Y México aumentará exportaciones de crudo?
Lo que para los mercados europeos está representando incluso una amenaza para la seguridad nacional, para los países exportadores de petróleo trae importantes oportunidades de negocio.
Derivado de las nuevas sanciones, EU ha comenzado a buscar a algunos “enemigos” menores como Irán y Venezuela para retomar negociaciones que les permitan aumentar la circulación de crudo en el mercado luego en lugar del petróleo ruso, aunque sin que a la fecha haya avances contundentes.
En este contexto, México tampoco quiere quedarse atrás en el aprovechamiento de esta brecha de oportunidad en el mercado petrolero. En entrevista con Bloomberg Línea, la Secretaria de Energía Rocío Nahle, declaró que ante los atractivos precios de venta, se está analizando la conveniencia de seguir exportando petróleo crudo, esto luego de que el presidente López Obrador anunciara a finales del 2021 que el plan energético contemplaba la reducción de las exportaciones en 2022 para posteriormente eliminarlas en 2023.
“En esta coyuntura estamos haciendo nuestras corridas de evaluación para ver qué es lo que nos conviene económicamente [...] el Presidente nos pidió junto a la Secretaría de Hacienda que hiciéramos las corridas” explicó la funcionaria.