Marcas de autos de lujo ahora venden estilo de vida
En un inicio, el gran atractivo con el que se comercializaban los autos de lujo era la velocidad, luego pasó a ser el estatus asociado a ellos. Ahora, es el estilo de vida que ofrecen.
Por esta razón, las marcas de automóviles de lujo han diversificado sus mercados y ya no venden únicamente carros. En la actualidad también se han integrado a los territorios de la moda, los relojes, los perfumes e incluso los juguetes o los muebles para el hogar.
Extender la marca hacia otros campos se hace con el objetivo de mantener la lealtad de los clientes que adquieren autos de lujo y también para captar la atención de consumidores jóvenes a partir de la idea de exclusividad, generada por los productos alrededor de una firma de autos prestigiosa. Así, aquellos que no pueden pagar por un carro de estas característica, en el futuro buscarán hacerlo.
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Ferrari fue uno de los pioneros en la diversificación de su mercado y le ha funcionado muy bien. Alrededor del mundo, esta empresa tiene más de 30 tiendas oficiales (Ferrari Store) en las que se venden artículos como juguetes Lego, playeras y tenis Puma o lentes de sol, todos bajo el logotipo del Cavallino Rampante.
Bentley es otro de los ejemplos en el rubro de expansión comercial, ya que se asoció con Luxury Living Group, una empresa dedicada al diseño de muebles y con la que ha desarrollado sofás y dormitorios de piel y madera. En pocas palabras, buscan transportar el diseño de los interiores de sus autos a las recámaras de sus clientes.
Bentley ha incursionado en el diseño de muebles. Dormirtorio Canterbury (Foto: Bentley Home).
Además, esta misma marca británica hace unos días anunció que ha abierto la convocatoria para un concurso de diseñadores de muebles, con el fin de crear una pieza de lujo, misma que se expondría en el stand de Bentley durante el Salon del Mobile Milano, en abril de 2019.
Por su parte, Aston Martin ha buscado incursionar en el mercado de barcos y en el inmobiliario. En entrevista para Financial Times, Andy Palmer, director ejecutivo de la empresa mencionó que “aquellos afortunados individuos de gran poder adquisitivo que pueden costear nuestros automóviles también quieren barcos, submarinos e incluso apartamentos de Aston Martin”.
El crecimiento de la venta de autos de lujo es una realidad en el país, solo falta ver cómo aumentan los mercados alternos que las firmas tienen por ofrecer a sus clientes. Palmer resume esta expansión hacia el estilo de vida en una frase contundente: “No vendo un auto, estoy vendiendo un sueño”.
MÁS INFORMACIÓN: Entrevista a Andy Palmer, Financial Times, septiembre 2018.
