Armas dividen a EUA, 30% tiene una y está dispuesto a usarla
El matrimonio entre los estadounidenses y las armas de fuego es tan fuerte que solo así se explica porqué un promedio diario de 93 personas mueren baleadas y aun así no se prohíbe la venta indiscriminada de armas en ese país.
El incidente del 14 de junio de 2017 en el que fue baleado el coordinador del bloque republicano en el Senado, Steve Scalise, de Louisiana, nuevamente reabrió el debate de la posesión de armas en Estados Unidos (EUA), pero solo para demostrar que el tema divide a los habitantes de ese país y cada vez se ve más lejana la posibilidad de un nuevo consenso.
La sociedad estadounidense no puede estar más dividida en este tema: un tercio de los habitantes tiene al menos un arma; otro tercio no descarta tenerla y el tercio restante no la tendría jamás.
Sin embargo, sí hay un perfil más claro de quiénes son los estadounidenses que tienen armas.
Los hombres mayores de 50 años, blancos, sin estudios universitarios y habitantes de la zona rural en el sur de Estados Unidos son quienes, en proporción, tienen más armas, según un estudio del Centro de Investigación Pew publicado el jueves 22 de junio de 2017.
Uno de los primeros datos alarmantes de la investigación es que 68% de los estadounidenses que reconocen que tienen armas, poseen más de una; y casi un tercio de este sector tiene cinco o más armas.
Uno de cada tres blancos en EUA afirma ser poseedor de un arma, a esta cantidad hay que agregarle un 13% que no tiene armas, pero que vive con alguien que sí las tiene; en contraste, 24% de los negros y 15% de los hispanos reconocen ser poseedores de una.
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También destaca que uno de cada tres mayores de 50 años poseen un arma, pero entre los menores de 49 años la porción de adultos armados baja a casi uno de cada cuatro.
“A nivel regional, los habitantes del noreste de EUA se destacan como los menos propensos a poseer armas: 16% de los adultos que viven en el noreste dicen poseer una, aproximadamente la mitad de los que dicen esto en el sur o 36%, el medio oeste con 32% y el oeste con 31%” añade el estudio.
En EUA hay tiendas de armas como si fueran tiendas de dulces.
La posesión de armas varía considerablemente entre quienes viven en zonas rurales y urbanas. En general, el 46% de los estadounidenses que viven en zonas rurales del país posee un arma, en comparación con el 28% de los que viven en los suburbios y el 19% de las zonas urbanas.
Y claro, también hay un gran contraste entre la preferencia política y la posesión de armas, pues 44% de los republicanos y los independientes republicanos tienen al menos un arma, en comparación con el 20% de los demócratas y los independientes demócratas.
Un derecho que ejercen
Por extraño que parezca, el derecho a poseer un arma en Estados Unidos forma parte de la ideología de un amplio sector de la población de ese país, por eso, cada vez que se retoma el debate de las restricciones se encienden las pasiones y el diálogo se complica.
Aproximadamente tres cuartas partes de los estadounidenses que poseen un arma de fuego o 73% dicen que no pueden verse ellos mismos si tener una, además 89% de los dueños de armas considera que tenerla es parte de su identidad general como estadounidense.
85% de los propietarios de armas dicen que el derecho a poseerlas es esencial para su sentido de libertad.
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Ese derecho forma parte de su seguridad, ya que la mayoría de los dueños de armas mencionan más de una razón para poseer una pistola, pero la protección es la más importante, para el 67% de los estadounidenses armados. Cerca de cuatro de cada diez o 38% dicen que la caza es otra de las razones para poseer una pistola.
Y si las tienen es para usarlas, pues 72% de todos los estadounidenses, tengan arma o no, han disparado alguna vez en su vida, por ello, 44% de los adultos estadounidenses dicen conocer personalmente a alguien que ha sido baleado, ya sea accidental o intencionalmente, y 23% sostiene que ellos o alguien de su familia ha sido amenazado o intimidado por alguien con una pistola.
En Estados Unidos las balaceras protagonizadas por civiles son cosa de todos los días.
Los dueños de armas en EUA y quienes no las tienen están profundamente divididos en varias propuestas de políticas de control de armas, pero hay acuerdo sobre algunas restricciones, como evitar que las personas con enfermedades mentales obtengan una, así como quienes forman parte de las listas de vigilancia del gobierno federal.
Las cifras del horror
33,880 muertes por año a causa de las armas de fuego se contabilizan en Estados Unidos, un país donde hay nueve armas vendidas legalmente por cada 10 habitantes.
Adicionalmente, 114,994 personas al año reciben un impacto de bala, de acuerdo con información de la página web de la Campaña Brady, apellido del exguardaespaldas de Ronald Reagan quien quedó confinado en una silla de ruedas cuando le salvó la vida al presidente de EUA en 1981.
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Como si estos datos no fueran lo suficientemente alarmantes, entonces dimensionemos a uno de los sectores más afectados por las balaceras: los niños.
Cada semana, 25 estadounidenses menores de 17 años mueren por heridas relacionadas con armas de fuego de acuerdo con cifras del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Además de las 1,300 muertes de menores al año por armas de fuego, el estudio reveló que hasta 5,800 niños al año sufren heridas graves por esta causa.
1,300 muertes de menores al año por armas de fuego ocurren en Estados Unidos.
“Las lesiones por arma de fuego son una de las mayores causas de muerte entre los niños estadounidenses de entre 1 y 17 años. Las armas contribuyen sustancialmente cada año a la muerte prematura, enfermedades y discapacidades en los niños”, dijo quien dirigió el estudio de CDC, Katherine Fowler.
Los niños varones representan 82% de todas las muertes por armas de fuego, mientras que los menores negros son 10 veces más propensos a morir por disparos.
Una comparación entre países de altos ingresos reveló que 90% de los niños menores de 14 años que son asesinados por arma de fuego en todo el mundo residen en Estados Unidos.
La situación en México
A diferencia de lo que sucede en Estados Unidos, en México se necesita un permiso de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para adquirir un arma.
Sin embargo, en octubre de 2016 el senador del PAN, Jorge Luis Preciado, propuso una reforma legal para que se permita la portación de armas en negocios y vehículos.
“Estamos proponiendo al Senado de la República que se modifique el artículo décimo (de la Constitución) y se permita que una persona pueda tener un arma ya no solamente en su casa sino donde tiene su negocio y que también pueda traer arma en su auto, como extensión de su domicilio, para su autoprotección y la de su familia”, explicó.
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La idea es que los delincuentes sepan que si entran a un domicilio o tratan de asaltar a un automovilista corren el riesgo de que la persona esté armada y pueda usarla en legítima defensa, justificó el senador.
La propuesta está en la congeladora legislativa.
Lo que sí sabemos es que la Sedena ha documentado la venta de 95,664 armas a particulares desde enero de 2000 a enero de 2016.
Además de estos civiles armados, hay más de 3,000 ciudadanos que tienen permiso para llevar armas consigo.
Lejos estamos de vivir una situación como la de Estados Unidos.
MÁS INFORMACIÓN: La compleja relación de Estados Unidos con armas, Centro de Investigación Pew, 22 de junio de 2017.
MÁS INFORMACIÓN: Estadísticas clave de violencia armada en Estados Unidos, Campaña Brady, fecha de consulta 23 de junio de 2017.
