SAT busca hacer obligatorio el RFC para detectar a todos los potenciales contribuyentes
Darse de alta ante el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) será obligatorio para todos los mexicanos mayores de 18 años. Eso ocurrirá si el Congreso aprueba la iniciativa del gobierno.
La miscelánea fiscal 2022 presentada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), propone reformar el artículo 27 del Código Fiscal de la Federación (CFF) para volver una obligación tramitar el alta en el RFC al cumplir los 18 años, de manera similar como ocurre con la credencial de elector.
La exposición de motivos de la iniciativa argumenta que hay trámites que requieren el RFC, por ejemplo para obtener el título y la cédula profesional que tramitan los estudiantes universitarios al terminar su carrera. Sin embargo, los especialistas coinciden en que la intención primordial de la autoridad fiscal es lograr un mayor control de los contribuyentes y ampliar el frente del combate a la informalidad.
Aproximadamente 1.2 millones de jóvenes entran al mercado laboral cada año, los cuales se tendrán identificados como nuevos contribuyentes por la autoridad si la reforma es aprobada y entra en vigor para el próximo año, aunque su alcance no estará limitado a los jóvenes.
“Lo estamos viendo de una manera muy fácil: todos los que cumplan 18 años. Pero yo lo veo de otra forma: si tienes más de 18 y no estás dado de alta, te tendrías que dar de alta. Eso es lo que pretende la autoridad”, dijo en entrevista Elio Zurita, vocero de la comisión técnica de investigación fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM).
A través de la nueva obligación, la autoridad tributaria contaría con una base de datos que incluya a los nuevos contribuyentes pero también a los que actualmente no están dados de alta, incluído el 66.6% de mexicanos que hoy día trabajan en situación de informalidad.
El registro permitirá rastrear las actividades de los contribuyentes y exigirles que cumplan con sus obligaciones fiscales, pues estarán obligados a aclarar de dónde proceden los depósitos superiores a 15 mil pesos que reciban en sus cuentas bancarias.
“De entrada ya eres muy detectable. Ya tengo una forma de identificarte y pedirte que me hagas una aclaración, preguntarte de que vives. Por sí mismo el RFC no le da gran cosa a la autoridad, sin embargo cuando se solicita la inscripción se tiene que dar un domicilio y esa persona ya es visible y puede ser llamada a cuentas”, explica Zurita.
El SAT también podrá enviar a los contribuyentes notificaciones a través del buzón tributario para recordarles el cumplimiento. Sin embargo, no significa que la totalidad de los contribuyentes tendrán necesariamente que contratar los servicios de un contador o capacitarse en materia contable para cumplir.
La propuesta es complementaria a la creación del nuevo Régimen Simplificado de Confianza, que también está propuesta en la miscelánea fiscal 2022 y contempla menores tasas de impuesto sobre la renta (ISR) para las personas físicas de bajos ingresos, como los informales, lo que hará más atractivo darse de alta.
En el caso de que aún así haya negativa para darse de alta por parte de los ciudadanos, la Ley no especifica sanciones, pero el vocero del Colegio señala que “tendríamos que hablar de sanciones genéricas. Si estás obligado a darte de alta y no lo hiciste, te puedo poner una multa. No una específica, pero sí una general por incumplimiento al RFC”.
Permitirá mayor control de programas sociales
No solo los trabajadores, formales e informales, estarán en el radar bajo este nuevo régimen, también las personas que reciben distintos tipos de apoyos.
Un caso que destacan los especialistas es el de aquellas personas que reciben apoyos sociales vía transferencias, que bajo el nuevo régimen serán monitoreadas y supervisadas por las autoridades.
“En el CIEP hemos hablado desde hace mucho tiempo que México necesita una especie de sistema fiscal integrado, es decir, contar con número (RFC) en donde se pueda ver qué impuestos estás pagando o qué ingresos recibes, pero que también sirva para el sistema de salud o para recibir programas sociales del gobierno. O, incluso, sirva para la pensión. Es decir, un monitoreo completo”, comentó Hector Villareal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), en entrevista con El Economista.
En el caso de los jóvenes, además de las becas que algunos pueden recibir por parte del gobierno, tendrán que declarar -si es que no perciben ingresos de un trabajo- sus cuentas en ceros. Sin embargo, en el caso del dinero que pueden recibir de sus padres, Zurita advierte algunas complicaciones que podrían presentarse.
“En ese caso están recibiendo un donativo. Ese donativo como tal está exento, es decir no paga impuestos, claro, siempre y cuando lo puedas demostrar. Si el padre da o deposita efectivo, cómo vas a conectar una cosa con la otra [...], si le revisan [al hijo] como va a demostrar que es el mismo dinero [que pasó del padre] al hijo”, ejemplificó el experto del CCPM.
Por ello destaca, que para que esta propuesta pueda penetrar entre la población, faltan disposiciones que permitan lograr el objetivo de manera paulatina y más ordenada.