Respuesta positiva al nuevo régimen simplificado, aunque prevalecen dudas
El Régimen Simplificado de Confianza (Resico) logró una respuesta positiva al cierre de su primer trimestre de existencia, aunque persisten dificultades para su adopción.
Según datos del Servicio de Administración Tributaria (SAT), al cierre del primer trimestre del 2022, se habían integrado 2.3 millones de personas físicas al nuevo régimen, de los cuales 15 mil 403 se trata de nuevos contribuyentes, 0.66% de acuerdo con datos de su Informe de Gestión Tributaria.
“El Resico está funcionando mejor de lo que imaginábamos, la gente está pagando. La facilidad le gustó a muchas personas”, señaló en un rueda de prensa Raquel Buenrostro Sánchez, Jefa del SAT.
La autoridad fiscal destacó que a comparación del mismo periodo de 2021 y del viejo Régimen de Incorporación Fiscal (RIF), las personas físicas que tributan en el Resico contribuyeron con 2 mil 383 millones de pesos, un incremento de 124% anual.
En entrevista, Ariana Martínez Molina, integrante de la Comisión de Desarrollo Fiscal 2, del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), señaló que la cifra de nuevas incorporaciones “quizás no es apantallante, pero sí importante” pues confirma una respuesta positiva entre los nuevos contribuyentes a quienes se les “permite integrarse más fácil a una actividad formal de lo que probablemente hubieran podido antes”.
El Resico, nacido con la intención de reemplazar al RIF fue promocionado cuando fue presentado dentro del paquete fiscal 2022, como un régimen que se complementaría la obligatoriedad del RFC para promover la formalización de la economía mexicana.
El principal atractivo del nuevo régimen serían las atractivas tasas de Impuesto sobre la Renta que va de 1.0% a 2.5%, siempre que los ingresos anuales de las personas físicas no superen los 3.5 millones de pesos.
No obstante las nuevas incorporaciones, salta a la vista otro dato que opaca el pequeño pero importante de los tres primeros meses del Resico. Según el informe del SAT, 8 millones 656,760 de contribuyente decidieron no cambiar y seguir pagando sus impuestos conforme las reglas del RIF, una opción que debía notificarse a la autoridad antes del 31 de enero.
Esto quiere decir que el 79% de las 10 millones 962,946 personas físicas con actividad empresarial registradas al cierre de 2021, decidieron no cambiarse el Resico.
La novedad genera duda sobre su conveniencia
Para Martínez Molina el régimen aún es joven para haber integrado a más personas, pero también la duda sobre la conveniencia para los contribuyentes es otro de los motivos que causan el rechazo a la fecha.
“Sin duda hay una transición importante, donde hay todavía un tema de tiempo. Hay muchas personas físicas que hoy están bajo un régimen de actividad profesional o empresarial, que nos han buscado para asesoría en materia de ¿qué me conviene más?” comentó la contadora.
Según Martínez, el principal elemento a considerar para las personas físicas está en función de qué tipo y cuántos ingresos tenga, pues por un lado existe un límite de 3.5 millones anuales que, de rebasar en un solo peso, implicaría la expulsión automática del Régimen, y la obligación del contribuyente de pagar sus impuestos baja un régimen mucho más caro.
Además, el Impuesto Sobre el Valor Agregado sigue trabajándose conforme las reglas normales que establecen un valor de 16% sin posibilidad de deducción, otro elemento que puede hacer al Resico menos atractivo para algunos contribuyentes quienes tienen que adquirir insumos para su actividad económica.
Y si la conveniencia no fuera un problema, en el caso de algunos contribuyentes interesados en incorporarse al Resico, la pared con la que se toparon fue directamente no cumplir con algunos de los requisitos para poder entrar.
Uno de los más relevantes y criticados establece que los socios, accionistas o integrantes de una persona moral no pueden ser parte del Resico no haciendo distinción si se es miembro desde un club deportivo, de una organización como el propio Colegio de Contadores, o una empresa.
Otro de los condicionantes comunes y que implica rechazo al acceso al Resico, es que el contribuyente tenga ingresos de otros capítulos, entre los cuales se permiten sueldos y salarios o intereses, pero no ingresos asimilados a salarios.
“Es un régimen noble pero que tiene muchas restricciones y por ello muchas personas que estaban realizando su planeación fiscal se dieron cuenta que no necesariamente eran candidatas”, concluye la integrante del CCPM.