Mientras continúe austeridad, no podrá recuperarse Categoría 1
Mientras el Gobierno de México mantenga la política de austeridad, será casi imposible que se recupere la Categoría 1 de seguridad aérea, de acuerdo a los expertos en la materia.
Hace unos días se cumplió un año desde que la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) redujo la categoría de seguridad aérea de México a Categoría 2, impidiendo a las aerolíneas del país abrir nuevas rutas o aumentar el número de aviones en los viajes ya aprobados hacia y desde la Unión Americano. La decisión le ha costado, según algunos estimados, más de 5 mil millones de pesos (MP) a compañías como Aeroméxico y Volaris.
De hecho, se esperaba que representantes de la FAA visitaran a sus pares de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) en México del 23 al 27 de mayo pasados para una evaluación con miras a restaurar la Categoría 1. El encuentro fue cancelado poco antes, sin que se pusiera una fecha clara para el examen. La autoridad aeronáutica mexicana aseguró poco después que ya se habían abordado todas las preocupaciones del gobierno de Estados Unidos y aseguró que se realizaría una nueva evaluación a mediados del próximo julio.
Sin embargo, especialistas del sector no creen que México esté cerca de recuperar la calificación de seguridad aérea. “Se ha evidenciado, desde hace ya algún tiempo, un debilitamiento paulatino (y recientemente muy acelerado) de la calidad de la gestión de la autoridad aeronáutica mexicana en seguridad operativa”, explica Juan Antonio José Pacheco, consultor aeronáutico independiente.
Aunque el Gobierno diga que le está dando la mayor de las importancias a recuperar la Categoría 1, señala el experto, “no está actuando con base a esos dichos. No se están realizando los cambios de fondo que requiere la aviación civil mexicana para ser considerada segura. Y si seguimos así, la calidad de la gestión se va a seguir deteriorando y el riesgo se va a incrementar con el consiguiente impacto en la actividad aérea en el país y sus consecuencias en el turismo, el comercio, etcétera”.
Ese debilitamiento parece estar directamente relacionado al limitado presupuesto que se le asigna a la AFAC. En 2021, fue la entidad con el menor presupuesto asignado entre los órganos públicos de la industria aeronáutica. Y aunque para 2022 pidió (y consiguió) un incremento en su presupuesto, para los especialistas es evidente que esa cifra no basta para hacer los cambios necesarios con miras a recuperar la Categoría 1.
“Una autoridad aeronáutica necesita recursos para poder funcionar. [Pero] tal parece que la prioridad [del gobierno federal] es no gastar dinero. Tienen otros aspectos importantes para ellos a donde se está yendo el presupuesto […]. Quieren que sea gratis, y no es posible ni en la aviación ni en ningún otro lado […]. Y también hay un problema de desesperación,” porque se quiere hacer en unos cuantos meses un proyecto que bien podría tomar años de trabajo, apunta María Larriva, controladora aérea e investigadora de incidentes en el sector aeronáutico.
Y es que los problemas de presupuesto para la aviación civil, como no son nuevos, se han ido acumulando. Desde 2018, año con año se ha ido recortando la cantidad de recursos que se destinan a la seguridad aérea. “Cuando recortas recursos presupuestales en temas de seguridad aérea, recortas personal, no inviertes en tecnología de punta y sigues acarreando lastres de carácter sindical y laboral […], pues llegas a un límite. Aquí no cabe la austeridad”, afirma Juan Carlos Machorro, socio del despacho legal Santamarina + Steta.
A eso se debe sumar que existe un precedente que podría hacer más difícil obtener de nuevo la Categoría 1. La primera vez que se perdió esta calificación, a mediados de 2010, se recuperó antes de terminar ese mismo año. Para María Larriva, lo anterior se logró porque el entonces “Gobierno de México tuvo muy claro qué era lo que tenía que hacer, hizo la inversión correcta y en unos meses se recuperó la Categoría 1. Ahora, dicen que van a hacer pero la realidad no corresponde a lo que declaran […]. Lo que están prometiendo que van a hacer no se va a lograr porque no están cumpliendo con los requisitos”. Este incidente es, en parte, muestra de la capacidad de la administración federal para corregir el rumbo si así lo quisiera.
Pero de acuerdo con Juan Antonio José Pacheco, el hecho que se haya perdido antes la Categoría 1 jugará en contra del actual gobierno para recuperar la calificación. “La primera degradación se recuperó con alfileres […]. Le vendieron muy bien a la FAA la maquillada de la información, los planes, y nos re-categorizaron rápido. Pero de fondo nada cambió […]. Ahora hay que mostrar qué tan comprometido estás con el cambio. Una cosa es corregir ahorita, [como hicimos entonces], y otra es consolidar. Tenemos que demostrar que el cambio es de largo plazo”, explica.
Y para conseguirlo, apunta Juan Machorro, no solo se necesita un “replanteamiento de la conformación de la plantilla de personal [de la AFAC], de su capacitación continua, de quiénes integran a la autoridad en la materia, una inyección de presupuesto”
También hay que “aprender a distinguir a la aviación civil de la aviación militar […]. Son muy distintas, no tienen nada que ver […]. Venimos pidiendo a gritos desde hace décadas una planeación holística del sector aviación, que involucre a la autoridad, al gremio de los pilotos, a los aeropuertos, los operadores de vuelo, las aerolíneas, los sindicatos […]. Y desafortunadamente hemos retrocedido en muchos temas que tienen que ver con la regulación”, concluye.