Optimismo democrático
El domingo 14 de enero, Xóchitl Gálvez pronunció un buen y emotivo discurso en el marco del cierre de su precampaña por la Presidencia. Ante una repleta Arena Ciudad de México, con capacidad para poco más de 22 mil personas, la precandidata única de la Coalición “Fuerza y Corazón”, dio un discurso que conectó con las emociones de la gente. El evento generó optimismo en cuanto a que dejó en claro que si hay oposición. Eso son buenas noticias para la democracia y el desarrollo del país.
Su mensaje hizo ver la relevancia de las próximas elecciones: “Estamos frente a las elecciones más importantes de México en el que se juega la sobrevivencia de la democracia”. Llamó a luchar por la vida y la libertad que están en juego. Generó conciencia -para los que pudieran no tenerla aún- de “la elección injusta y dispareja que se enfrenta y en la que se lucha contra el poder y el dinero del Estado. En ese sentido llamó a unirse a todos los que apoyan la Constitución y a la Ley. Resaltó que para ella “la ley si es le ley”.
Coincido con Xóchitl: “la democracia está en juego.” En este sexenio ha avanzado la concentración de poder con el apoyo de los militares y gracias al control que ejerce Morena en el poder legislativo y el sector público. También por el debilitamiento de los contrapesos institucionales vía la asfixia presupuestal y la captura de sus órganos de gobierno. La lealtad ha prevalecido sobre la capacidad a la hora de designar funcionarios, con lo cual la burocracia misma ha dejado de poner límites al poder. La prensa, los organismos autónomos y gran parte de la sociedad civil organizada, así como las instituciones electorales han estado bajo asedio y, en muchos casos, han sucumbido.
En su discurso, la precandidata única de la Coalición “Fuerza y Corazón” se dirigió en gran medida a los segmentos poblacionales afectados por este gobierno: jóvenes, mujeres y clase media. Su discurso tuvo un enfoque de igualdad de oportunidades: “necesitamos un piso parejo para que todos lleguemos a donde queremos”. Este “aspiracionismo” es un componente fundamental de la movilidad social ascendente de las personas, ya que las impulsa a alcanzar su bienestar socioeconómico a partir de imaginar y luchar por un mejor futuro.
En ese sentido, presentó propuestas de gobierno claras para que las mujeres se incorporen al mercado laboral tales como crear un Sistema Nacional de Cuidados que les libere tiempo para trabajar. Esto -tal y como lo hemos venido señalando en el CEEY- (ver entre otros documentos https://rb.gy/mguxuq) al que le puedan delegar la atención de menores, enfermos, discapacitados y adultos mayores, que actualmente -en ausencia de dicho sistema- están bajo su encargo sin que tengan ellas tiempo para incorporarse al mercado laboral.
También demostró conciencia de la coyuntura internacional favorable que vive el país. Llamó a aprovechar el “nearshoring”, al que calificó como "la mejor oportunidad de desarrollo que se le ha presentado al país en décadas.” Para aprovecharla, hizo un llamado necesario a garantizar el cumplimiento de la ley, a garantizar energías limpias, a combatir la crisis del agua, a invertir en educación para tener capital humano que se incorpore al mercado laboral y a invertir en infraestructura. Aquí tocó el indispensable tema de contar con buenos aeropuertos y prometió que el país tendría el mejor aeropuerto de Latinoamérica. De llegar a la Presidencia ¿Retomará el proyecto del NAIM?
Asimismo, hizo un necesario llamado a dejar atrás las divisiones y el odio. Coincido, es necesaria la cohesión social de los mexicanos para que podamos avanzar hacia objetivos comunes. El resentimiento social y la división que se ha alentado desde el gobierno en este sexenio no ayuda a que todas y todos los mexicanos cooperemos y trabajemos unidos para impulsar un México de oportunidades.
Destacó fortalezas estructurales que ella tiene en relación con la candidata del gobierno. Comentó que como emprendedora que es -a diferencia de Claudia Sheinbaum- ella sabe generar empleos y el no llegar a la quincena. ¡Gran verdad! Los que provenimos de familia de emprendedores, sabemos lo importante que es tener gobernantes que hayan vivido y sufrido la realidad del empresario MIPYME para poder atender y resolver sus problemas. Son víctimas constantes de la regulación gubernamental excesiva, de la corrupción que esto propicia y de la extorsión por parte del crimen. La próxima Presidenta se tendrá que abocar en serio estos problemas que detienen, junto con el crimen, entre otros obstáculos- el desarrollo del país
En el contraste de propuestas, criticó a la candidata oficial que propone construir un segundo piso a las políticas actuales. Eso -destacó- equivale a “querer un país de pobres, de muertos y con problemas de falta de acceso a la salud.” A manera de proveer evidencia a su crítica a las propuestas de la precandidata de Morena y aliados, resaltó los más de un millón de muertos que -de acuerdo con ella- ha generado este gobierno. 800 mil por COVID, 150 mil por homicidios dolosos, y los más de 100 mil que han muerto por falta de medicamentos y de acceso a un sector salud de calidad. Al respecto, Xóchitl prometió mejorar la seguridad, la salud, la educación.
Cerró su discurso reconociendo a los 3 partidos de oposición y a la sociedad civil, quienes -dijo- serán los cuatro pilares operativos de su campaña. Al efecto, los requirió a luchar a partir de sus fortalezas. A los panistas les reconoció su mística democrática. A los priístas su experiencia y conocimiento. A los perredistas su ánimo de justicia social y su perseverancia. De la sociedad civil destacó su energía y valor.
También enfrentó con valentía al Presidente. Le dijo: “sabemos que es poderoso, sin escrúpulos y que está dispuesto a todo por mantener el poder”. Remató diciendo: “no le tengo miedo porque no hay Presidente, ni trampa, que doble a los mexicanos".
Cerró su discurso señalando algo muy cierto: “los mexicanos quieren paz, medicina y buena educación para abrirse espacios en la vida”. Eso es consistente con los resultados de las encuestas que ha levantado GAUS LEXIA en 2011, 2017 y 2022 y sobre los que Héctor Aguilar Camín ha escrito concluyendo que de acuerdo con éstas, el mexicano es un “liberal salvaje”.
Xóchitl concluyó diciendo que los mexicanos quieren esperanza y que esa ya cambió de manos y que por lo mismo va a ganar. Terminó bien y en forma ordenada su alocución concluyendo sobre lo expuesto: “Vamos a ganar porque esta lucha es “por la vida, por la verdad y por la libertad”.
En suma, que la oposición -en la figura de su candidata- demostró unidad e inyectó esperanza. Eso son buenas noticias para la democracia y desarrollo del país. ¡Enhorabuena!