El triunfo arrollador de Sheinbaum abre interrogantes en los mercados
Prácticamente dos tercios de curules en el Congreso mexicano serán para Morena y sus aliados, lo que ha planteado un escenario de un gobierno muy poderoso para los próximos 6 años, encabezado por Claudia Sheinbaum quien arrasó en las presidenciales del domingo, y que le daría la potestad de modificar la Constitución. Este escenario, previsto originalmente sólo como un escenario menor por los inversionistas, ya ha depreciado los activos mexicanos en la sesión del lunes, encabezados por el peso, ante los temores de un gobierno nacionalista sin contrapesos.
LOS DATOS DUROS: De acuerdo con el Instituto Nacional Electoral (INE), Morena y sus aliados (Verde y PT) obtendrían entre 346 y 380 curules en la Cámara de Diputados (se requieren 334 para la mayoría calificada, es decir, dos terceras partes para realizar cambios constitucionales), mientras que en la Cámara de Senadores obtendrían entre 76 y 88 curules (se requieren 85 para la mayoría calificada). El bloque de Morena tiene asegurada la mayoría simple en Senadores, y podría alcanzar una mayoría calificada. A esta hora, la alianza Morena-Verde-PT aglutina 59.03% del total de votos con el 88.88% de las actas capturadas.
Los activos mexicanos se desplomaron este lunes. El peso se ha depreciado 4% y se cotiza a 17.66 unidades por dólar, mientras que el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores se derrumbó 6.11% y los precios de los bonos a 10 años cayeron, elevando su rendimiento a 9.88%, de acuerdo con Bloomberg.
CONSIDERACIONES:
- La cifra de curules que obtendrán Morena y sus aliados en el Senado es clave para los objetivos de aprobar las reformas constitucionales planteadas por el presidente López Obrador (AMLO) y subrayadas por Claudia Sheinbaum durante la campaña. De acuerdo a las tendencias recientes del voto, la alianza que encabeza Morena obtendría alrededor de 82 curules, a escasos 3 votos para alcanzar la mayoría calificada, dependiendo de la asistencia de los senadores en la sesión del Pleno.
- Con las cifras preliminares de la elección, Morena y sus aliados podrían alcanzar mayoría calificada en el Senado con la anexión o participación de muy pocos votos de legisladores de partidos opositores. Esta "transferencia de votos" de algunos senadores opositores hacia Morena se facilitaría con la aplastante derrota electoral que sufrió el PRI y que pone en riesgo su viabilidad futura. Una práctica mayoría calificada de Morena y aliados en ambas cámaras -que se instalarán el 1 de septiembre- abre la posibilidad a AMLO de concretar algunas de sus reformas en 'fast-track'- durante septiembre, antes de la toma de posesión de Sheinbaum. "Con el control total de la Cámara y, a efectos prácticos, probablemente también del Senado, la probabilidad de que se apruebe una parte significativa de esta amplia agenda aumentó significativamente”, dijo Alberto Ramos, economista en jefe para América Latina de Goldman Sachs, citado por el WSJ.
- Una victoria tan arrolladora como la que obtuvo Claudia Sheinbaum (con la influencia innegable de López Obrador como su principal pivote electoral), engrandece la herencia de AMLO, potencialmente hace crecer la deuda con su mentor, y podría dificultar en los primeros meses o años de su gobierno que imponga su propio sello, además con legisladores radicales que tienen fuertes deudas con AMLO.
- Este lunes, en un video de agradecimiento a mandatarios y cámaras empresariales, Sheinbaum, en un claro mensaje a los mercados, destacó: "quiero, en particular, agradecer al doctor Rogelio Ramírez de la O por aceptar continuar al frente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, es un hombre con gran reconocimiento nacional e internacional, ...que da certeza del buen manejo financiero y económico".
LA CUESTIÓN CENTRAL INMEDIATA: Si bien este lunes AMLO insistió en su retiro después del 30 de septiembre, cuando dejará el poder, también dejó en claro que pugnará por la reforma del poder judicial. "Sí creo que se debe introducir el tema de la reforma judicial -dijo López Obrador- porque no es posible tener un poder judicial que no esté al servicio del pueblo". AMLO dijo que -aunque no quería imponer nada- conversará con Claudia Sheinbaum respecto de los cambios constitucionales que propuso y en los que incluyen incrementos obligatorios del salario mínimo por encima de la inflación, la desaparición de algunos órganos reguladores e incremento en las pensiones, entre otros.
Pero uno de los cambios más preocupantes para los inversionistas tiene que ver con la independencia del Poder Judicial que garantiza equilibrios con un Ejecutivo y Legislativo que serán aplastantes. "Tenemos que estar en sintonía para discutir estas iniciativas con Claudia, así como otras cosas en las que debemos trabajar juntos", dijo AMLO este lunes dejando abierta la puerta a un septiembre, último mes de su gobierno, con grandes cambios.
DOS PREGUNTAS:
- Sheinbaum ha rechazado proponer una reforma fiscal a pesar de un gasto creciente y limitaciones en el ingreso fiscal . ¿Viene un endurecimiento de las políticas de recaudación tributaria? Se ha mencionado, por ejemplo, nuevas medidas de tributación para el sector financiero, principalmente bancos; mayores controles impositivos sobre gremios de profesionistas independientes; o mayores impuestos a las inversiones financieras; entre otros. En su Plan "100 pasos para la Transformación 2024-2030", se lee: "Se mejorará la recaudación con estrategias de inteligencia fiscal, para fomentar el pago oportuno, el incremento de la base tributaria sin aumentar tasas ni crear nuevos impuestos; mejorar la presencia fiscal y el uso de inteligencia para identificar mejor a los contribuyentes. Se trabajará en conjunto con los diferentes niveles de gobierno para mejorar la eficiencia recaudatoria, el combate a la elusión y evasión fiscal, y diseñar programas de regulación fiscal, entre otros". Por cierto, planea que la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) se fusione en la SHCP.
- ¿Cómo abordará la crisis de Pemex, de cara a la necesaria austeridad de la que ha hablado, y que ha sido una fuente importante de gasto público en el gobierno de López Obrador, sin resultados evidentes.
LO QUE HAY QUE VER: Por lo menos hay tres factores a considerar:
Un primer factor es su capacidad y voluntad de cambio. Sheinbaum ha mostrado a lo largo de los años una fuerte lealtad a López Obrador, que se dejó ver en su discurso del domingo por la noche en el Zócalo capitalino, pero también en el segundo debate cuando reaccionó a las declaraciones poco positivas de AMLO sobre su participación en el primer debate. Es probable que busque impregnar un sello particular a su gobierno, comenzando por la selección de su gabinete en las próximas semanas. Sin embargo, muy probablemente no habrá elementos claros diferenciadores con su antecesor hasta muy entrado su gobierno, más allá del primer año. La pregunta clave es ¿en qué medida Sheinbaum, será cambio y en qué medida continuidad? Y si prevalece lo primero ¿tendrá el poder para realizar esos cambios?
Un segundo factor que genera nerviosismo financiero -particularmente en el tipo de cambio- es el escenario de un triunfo de Donald Trump en las elecciones de noviembre que provocaría tensiones en las inversiones y el comercio con México. Evento que podría depreciar aún más al peso, por mayores riesgos.
El tercer factor es institucional. Tan pronto como llegue a la presidencia, Sheinbaum deberá llenar las vacantes de un ministro en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y un subgobernador en el Banco de México. El ministro Luis María Aguilar concluye su periodo como integrante del Pleno el 30 de noviembre; mientras que la subgobernadora Irma Espinosa lo hace el 31 de diciembre. En ambos organismos se modifican los equilibrios con integrantes nombrados por un gobierno de la llamada IV Transformación. El control que tendrá el Ejecutivo sobre el Senado, en el nuevo gobierno, hará que el perfil de ambos nominados muestre el estilo de Sheinbaum. Los inversionistas han mostrado preocupación, tanto por una pérdida de autonomía de Banxico, como en las decisiones de la SCJN.
