Literatura emergente: un círculo en constante expansión para nuevos autores independientes
Ser un escritor novel puede ser una verdadera pesadilla. La autogestión y difusión de tu trabajo artístico no resulta nada fácil, menos en un país poco acostumbrado al apoyo de la cultura emergente.
Sin embargo, en los últimos años han salido varios medios que intentan formar colectivos de publicaciones independientes. La idea es apoyar y darles un espacio a los nuevos autores para dar a conocer sus obras.
Quizá suene demasiado bueno para ser verdad que alguien te ayude a comercializar tu trabajo sin esperar nada a cambio. Pues bien, el punto es que sí hay varios intereses detrás de esto.
La mayoría de organizadores de ferias de libro alterativas o propietarios de cafés literarios son también publicadores independientes. Ellos, al impulsar a jóvenes escritores, se dan a conocer de la misma forma y, así, se vuelve un sistema de beneficio bilateral.
¿Qué espacios existen en la Ciudad de México para la literatura emergente? Mientras todos los amantes de las letras paseaban fascinados por la Alameda Central en la Feria del Libro, en la calle de Don Celes se celebraba otra feria más discreta: La Feria del Libro Dark. Ahí se instalaron estantes de editoriales independientes como Sangre de las Musas, Afterlife Contracultura, entre otras. Aparte, hubo presentaciones de libros, lecturas de poemas, baile fusión y otros ejemplos de la subcultura gótica.
Asimismo, en diciembre del año pasado en Iztapalaba, La Nación Alien, comunidad virtual creada por el artista Augusto Quevedo, organizó el Segundo Encuentro de Publicaciones Independientes.
Espacio para los fanzines, cómics y artes plásticas, pero también para cualquier otro tipo de publicación autogestiva.
Estos son sólo dos ejemplos de actividades de arte alternativo entre los muchos que se llevaron a cabo en el 2018, y que prometen repetirse año con año durante largo tiempo, conforme los organizadores adquieran experiencia en la planeación y logística de un evento.
En mayo contaremos de nuevo con la Feria de Editoriales Independientes que se celebró el año pasado en la colonia Santa María de la Ribera.
Dejando a un lado los espacios itinerantes, existen también algunos cafés que combinan el placer de una bebida caliente con la lectura de un buen libro. Este concepto fue popularizado por la Cafebrería El Péndulo, clasificada por The Guardian como una de las librerías más hermosas del mundo.
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Vocablo Café, ubicado en la colonia Roma, no sólo es otra de las cafeterías que se fusionan con una librería. Aquí el dueño Mansell ofrece también un espacio para que los autores nuevos puedan presentar sus libros o hacer lecturas de poesía. El arreglo funciona como el de un bar que contrata bandas para musicalizar en vivo. El lugar se queda con el consumo y el artista con la cuota de entrada, llamada cover.
El Café Marabunta se encuentra muy cerca de Oasis Coyoacán, sobre la avenida Miguel Ángel de Quevedo.
Como su nombre lo indica, la literatura independiente está invadiendo la cultura como un gran grupo de hormigas guerreras que devoran todo a su paso. En su librería podrás encontrar desde los títulos de los grandes clásicos hasta la ópera prima de un escritor emergente.
La Literatura es una de las artes que más interés despierta en la gente. Los espacios y apoyos por parte de la Secretaría de Cultura y el gobierno en general son cada vez menos.
El año pasado, por ejemplo, se recortó a la mitad el programa de becas para la formación de jóvenes creadores de la Fundación para las Letras Mexicanas.
Esto obliga a los escritores emergentes a buscar una forma efectiva para autogestionarse y distribuir lo que escriben. Es un camino difícil, pero que también le otorga mayor libertad al creador para expresarse.
MÁS INFORMACIÓN: Marabunta Café: un microcosmos para la literatura en el sur de la ciudad.
