Las mujeres no ganan menos que hombres, solo no tienen buenos trabajos

Las mujeres no son discriminadas sistemáticamente, sino que no llegan a puestos con grandes márgenes de ganancia.

Cuando se controlan todas las otras variables como puesto, horas trabajadas, rango salarial, etc; la brecha de género casi desaparece, encontró una investigación llevada a cabo por The Economist.

Por ejemplo, si se toman en cuenta todos los trabajos que tienen las mujeres y se comparan con todos los trabajos que tienen los hombres de qué área son los trabajos y de qué nivel, la brecha salarial en Gran Bretaña es de 28.6%, en Francia del 17% y en Alemania del 15.1%.

Existe un incremento en la participación del genero femenino en el mercado laboral, sin embargo, los hombres siguen liderando el serctor.

Pero cuando solo se comparan los empleos en la misma compañía, en la misma función y del mismo nivel, la brecha disminuye considerablemente es decir que se compara a los directores con directores, analistas con analistas y asistentes con asistentes sin importar que sean hombres o mujeres, la diferencia es casi nula. En el caso de Gran Bretaña la diferencia de salarios es del 1%, en Francia es del 2.7% y en Alemania llega a 3%.

La diferencia de estos salarios es como decir que un asistente hombre gana 2 mil euros (42 mil 106 pesos) y una mujer con el mismo puesto gana mil 940 euros (40 mil 843 pesos), si se toma a Alemania como referencia por contar con la brecha salarial más grande según el estudio. En el mismo caso pero en gran bretaña un hombre ganaría 2 mil libras (46 mil 473 pesos) y la mujer mil 984 (46 mil 102 pesos).

“Si bien en Gran Bretaña el salario de una mujer es 29% más bajo que el de un hombre en promedio, la parte más grande de esa brecha resulta de diferencias en el rango dentro de la compañía, los salarios que las compañías otorgan y la naturaleza de las tareas que requiere un trabajo”, señala The Economist.

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Estos números sugieren que el problema no está en la paga igualitaria por trabajo igualitario, sino en lo que sea que tiene a las mujeres laborando en trabajos de menor nivel y en organizaciones que ofrecen menor paga.

Sin embargo, en la investigación llevada a cabo por la consultoría Korn Ferry sí hay una excepción y esta se da en los puestos de mayor nivel. Mientras que en  las 16 profesiones analizadas  la brecha salarial entre géneros es casi inexistente en 15 de ellas, cuando se observan los puestos gerenciales la brecha es entre 15% y 20%.

Este dato rompe la idea de una brecha de género generalizada y al encontrarla solo en puestos directivos coincide con otro problema: el techo de cristal, la idea de que las mujeres no pueden llegar a trabajos de alto nivel.

En 1990, el porcentaje de mujeres que formaba parte de la Población Económicamente Activa  era de 34%, para el año 2000 aumentó a 39%, en el 2010 fue de 43.8% y en 2016 de 45.4%, según datos del Banco Mundial, por lo que lo que deben atacar las políticas son los motivos por los cuales no las mujeres no acceden a empleos con rangos de salario más altos, concluyen los investigadores.

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Las mujeres por lo general escogen las carreras peor pagadas

En México, como en la mayor parte de América Latina, las carreras que las mujeres estudian son las que estadísticamente tienen menores salarios.

Las mujeres suelen optar por carreras que a largo plazo son poco remuneradas.

Uno de los factores que aleja a las mujeres de carreras en tecnología, ingeniería y matemáticas, que cuentan con los salarios más altos tanto a nivel nacional como internacional es que creen no ser tan buenas en esas áreas del conocimiento, de acuerdo con dos estudios, uno del Ministerio de Economía y Competitividad de España y otro de la Universidad de Washington en Estados Unidos.

Aunque en América Latina y el Caribe aumentó la participación de mujeres en altos cargos, el porcentaje que son directoras ejecutivas es menor que en otras regiones del mundo, además que prácticamente la mitad de las juntas directivas de empresas del continente están integradas exclusivamente por hombres.

De manera consistente el porcentaje de mujeres en la Población Económicamente Activa (PEA) ha aumentado en nuestro país desde los años ochenta.

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De las 10 carreras con el mayor porcentaje de mujeres inscritas en México, la mayoría de áreas sociales, siete se encuentran entre las 20 peor pagadas como pedagogía, formación docente y trabajo social, de acuerdo con el comparador del Instituto Mexicano para la competitividad (IMCO).