Egipto no fue la única: 10 civilizaciones africanas asombrosas
Cuando nos preguntamos por alguna gran civilización africana, solemos pensar en el antiguo Egipto. Y en efecto tiene que haber sido una de las más grandes civilizaciones del norte de África, lo que además es reforzado por el hecho que Keops, Kefrén y Miserino han sido por mucho tiempo una de las Siete Maravillas del Mundo.
Sin embargo, Egipto no fue la única civilización africana grandiosa, y prueba de ellos son las que les mostramos a continuación.
10. Reino de Axum
Mientras en Europa ocurría una revolución en el cristianismo, un poderoso reino estaba emergiendo en el continente africano. En lo que hoy en día es Etiopía, el Imperio Axum llegó a ser uno de los más grandes lugares de reunión de comerciantes de todo el noreste de África, particularmente por el nivel de transito de mercaderías que ahí había y la fuerza naval del Imperio. Como comerciantes abarcaban desde el mismo Imperio cruzando el río Nilo y hasta llegar a Alejandría, por lo que Axum dominaba la costa del Mar Rojo en el siglo séptimo.
Además, influenciaron a otras superpotencias de África, Europa y Asia, durante este imperio se creó Ge’ez, el único texto escrito original de África, lo que tiene millones de visitantes. Un escritor persa del tiempo afirmó que Axum era "una de las cuatro más grandes potencias del mundo".
Vivió su apogeo entre el siglo I a. e. C. y el VII d. e. C. en territorios de los actuales Etiopía, Sudán, Eritrea y parte del occidente de la península arábiga. Tuvo un intenso comercio internacional y ha sido incluida entre las 4 grandes potencias mundiales de su época. Sirvió de enlace entre el Imperio Romano e India. Abrazó el cristianismo y cayó en declive con la expansión del islam.
9. Reino de Benín
En un asentamiento en lo que hoy por hoy es Nigeria, el reino de Benín comenzó cuando la gente de Edo derribó árboles en el oeste de la selva africana. Cerca del 1400 el pequeño asentamiento se transformaría en un reino.
Los dirigentes de Benín, llamados Oba, tenían un inusual gusto de usar metal para sus impresionantes palacios. La gente de Benín también usaba metal en las artesanías, las estatuas y en las placas que describen escenas de batallas.
Como comerciantes, Benín funda un saludable comercio en su lugar, cerca del río Níger, donde se le permitía a los mercaderes comerciar con reinos africanos del norte. El imperio limitaba al sur con el Océano Atlántico, donde le permitían a barcos intercambiar cuentas de coral, pimienta y pieles de leopardo. El comercio con Europa comenzó en el siglo XIV.
El imperio de Benín llegó a su fin con la invasión británica que asaltó las fuentes de recursos de Benín e incendió el imperio hasta dejarlo en el suelo.
8. Reino de Ghana
La antigua Ghana, la cual estaba sobre una inmensa mina de oro, fue tan rica que incluso los perros usaban collares hechos con este precioso metal. Con una planificación estratégica, poderosos líderes y una inmensa cantidad de recursos naturales, Ghana llegó a ser otra gran influencia para África.
Teniendo un fuerte comercio con Europa y el norte de África, Ghana importaba libros, ropa y caballos por medio del intercambio de oro y marfil. También la sal era muy demandada en Ghana. Comerciantes árabes a menudo se esforzaban por meses para llegar al reino y sus mercados.
Ghana también tuvo un peculiar sistema judicial. Si alguien era acusado de romper la ley en Ghana, esa persona era forzada a beber una mezcla agria de madera y agua. Si vomitaba la mezcla, entonces era considerado inocente. En caso contrario, era considerado culpable y castigado por el rey.
Pese a haber sufrido muchas invasiones, Ghana no colapsó sino hasta 1240. Abandonados por los comerciantes y debilitados por sus rivales, el reino fue absorbido por el entonces creciente imperio Mali.
7. Imperio Mali
El imperio de Malí fue una de las civilizaciones más grandes de África que se desarrolló durante los siglos XIII y XIV. Fundado por Sundiata Keita (también llamado El Rey León), el impero se encontraba cerca de la actual África Occidental.
Cuando el Rey León era un impresionante gobernante, el imperio floreció con la ayuda de Mansa Musa, que mantiene hasta hoy el título del hombre más rico de la historia. Su fortuna llegó a la grotesca suma de USD$400 billones. Musa también ayudó en la construcción de Timbuktú, la capital de Malí, el centro principal para la educación y la cultura en África, permitiendo la llegada de estudiantes de todo el continente.
Como Benín, Malí fue un exitoso lugar para el comercio, dada su ubicación cercana al río Níger. Pese a todo, el imperio fue saqueado desde Marruecos en 1593. Esto lo debilitó fuertemente y Malí pronto dejó de ser la importante entidad política que fue.
6. Cultura Nok
Los primeros trazos de esta misteriosa civilización fueron descubiertos en 1928 por un de mineros del aluminio nigerianos. Las pericias arqueológicas que se hicieron esperaban encontrar pedacitos de cerámica, piedras pintadas y herramientas, pero con lo que quedaron impresionados fue con el nivel de desarrollo de esta cultura desconocida.
Durante su existencia, desde el 900 a.C. hasta el 200 d.C., la cultura Nok creó un complejo sistema judicial siglos antes que el sistema moderno fuera inventado. Usando varios tipos diferentes de cortes, ellos lidiaban con asuntos como robo, asesinato, adulterios y disputas familiares.
El pueblo Nok fue también un precursor en hacer estatuas de terracota de tamaño natural. Estas estatuas representaban a gente extraña con largas cabezas, ojos almendrados y labios partidos. Los Nok fueron también unos avanzados trabajadores de la metalurgia, forjando pequeños cuchillos, puntas de flechas y brazaletes.
En el 200 d.C., el pueblo Nok desapareció rápidamente sin razón conocida. Hambruna, sobre dependencia de los recursos y cambios climáticos son algunas de las conjeturas sobre su fin.
5. Reino de Kush
Relativamente desconocido fuera de África, el reino de Kush se ubicaba en lo que hoy es Sudan. Esta civilización era impresionantemente parecida a Egipto y en algún momento fue gobernada por algo muy similar a los faraones egipcios. La gente Kush también momificaba a sus muertos y construía pirámides como sepelios y adoraban a dioses muy peculiares. Sin embargo, existen muchas diferencias entre ambas culturas.
El acero llegó a ser uno de los principales recursos de los Kush, mientras que los egipcios estaban recién descubriendo las maravillas del metal. Las mujeres jugaban un gran rol en la sociedad Kush y a menudo las reinas eran las sucesoras de los reyes. De hecho, una de las más grandes pirámides en Kush fue construida en honor a una mujer gobernante.
Los Kush también fueron famosos por sus arqueros, quienes usualmente era representados en la artesanía. Sin embargo, la cultura Kush murió luego de que fueron invadidos por Ezana de Axum, los que quedaron en manos de una nueva sociedad llamada el Grupo-X (también conocida como la cultura Ballana).
4. Imperio Songai
El imperio Songai abarcó miles de millas a lo largo de gran parte de África oriental. Durando cerca de 800 años, el reino fue considerado uno de los más grandes imperios del mundo desde el siglo XV al XVI.
Como sucedió con otras civilizaciones africanas, Songhai también llegó a tener un muy saludable comercio y a tener un cuerpo de seguridad armado de 200.000 personas a lo largo de sus provincias. Muchos miles de culturas estuvieron bajo su control, las que eran mantenidas juntas por medio de un gobierno burocrático centralizado. Por esto se vieron forzados a tener que desarrollar un sistema de moneda, el cual les permitiera mantener a las diversas culturas juntas y unidas.
Sin embargo, el tamaño del imperio fue su perdición, con el enorme territorio que abarcaba se hacía muy difícil mantener el control. Songhai sufrió en una guerra civil y llegó por ésta a su fin en el siglo XVI. Así el gran imperio quedó reducido a un grupo de pequeños reinos.
3. Punt
Ubicada en lo que actualmente es Somalia, Punt fue considerada la Atlántida de África. Como muchas otras civilizaciones africanas, el pueblo de esta "tierra de los dioses" era descrita como gente con el cutis de un color rojo oscuro, pelo pargo y los ciudadanos vivían en chozas de junco suspendida desde un soporte sobre el agua.
Los intercambios comerciales entre Egipto y Punt eran comunes, incluyendo el primer intercambio documentado de flores cuando la reina Hatshepsut transportaba árboles en su famosa exposición. Toda clase de ofrendas eran intercambiadas con Punt, desde incienso hasta enanos humanos y pigmeos.
Pese a que la exacta ubicación de Punt sigue estando en duda, ésta es descrita como abundante y verde. Los marineros comúnmente llegaban a través del Mar Rojo o dejándose llevar río Nilo abajo en pequeños botes. Mucha gente cree que Punt tuvo una gran influencia en la cultura egipcia, desde su literatura hasta su religión. A pesar de ello, algunos historiadores se cuestionan incluso el hecho de si alguna vez existió Punt.
2. Imperio Zulu
El surgimiento del imperio Zulu no podría haber sucedido sin el matrimonio. El comienzo del reno fue estimulado por Shaka Zulu, el hijo ilegítimo del jefe Senzanganoka. Después de haber evitado muchos asesinatos y sangrientas disputas familiares, Shaka se convirtió en el jefe de los Zulus. Usando sus pioneras tácticas militares, Shaka ayudó al imperio hasta llegar a su cumbre.
La rama más exitosa del imperio Zulu desde su origen fue ser una de las más temidas civilizaciones africanas durante el periodo colonial. Mediante introducir la expansión Ikla y creando la formación del toro, Shaka entrenó a sus guerreros tan bien que llegaron a poder derrotar la invasión británica.
El Zulu creció como un poderoso pero violento imperio. Pese a ello, cerca de 1900, éste fue absorbido por la Colonia Cape. Hoy partes de forman el moderno estado de Sudáfrica.
1. Antigua Cártago
Un temprano asentamiento fenicio fue lo que se convirtió finalmente en la antigua ciudad-estado de Cártago, actualmente ubicada en Tunisia y cubriendo gran parte del Mediterráneo. Su estratégico emplazamiento, por lo favorable que fue para el comercio, le permitía a Cártago crecer sanamente.
La gente de Cártago era extremadamente habilidosa en la factura de muebles, cojinería, colchones y camas, las que eran un lujo muy caro. Por otro lado, sus rivales romanos nunca fueron exitosos en intentar copiar sus diseños.
En Cártago también un intrincado sistema de gobierno de pruebas y balances, escribieron una constitución y tenían una muy extensa biblioteca. Desafortunadamente la mayor parte de esos libros fueron destruidos o dados como regalo a los reyes Numidios. Sólo un libro de preservó: un manual de técnica agrícola que fue traducido al griego.
Cártago fue quemado y derrumbado por la expansión del imperio romano. Sin embargo, la ciudad-estado de Cártago dejó una marca imborrable como el imperio comerciante más rico y una potencia económica.