Seguirá el boom del turismo en México, aunque los recortes limitan sacarle más jugo
México está viviendo un boom turístico como no se había visto en años.
El año pasado los turistas dejaron ingresos por 19,570 millones de dólares, un monto no visto desde que se tiene registro y que además fue 10% mayor respecto de 2015 de acuerdo con los datos del Banco de México.
La fuerte depreciación de la moneda nacional frente al dólar ha sido el gran gancho. México es barato para los turistas extranjeros. En los dos últimos años ni las playas, ni las pirámides han sido tan atractivas como su costo.
Tan sólo durante 2016 el peso se depreció 20% frente al dólar, es decir, en diciembre de 2015 los dólares de los extranjeros se multiplicaron por 17 pesos y hacia diciembre del año pasado valían 20.5 pesos.
La pérdida de valor de la moneda nacional frente al llamado billete verde han abierto posibilidades de viaje hasta para los turistas de otras naciones que no habían visitado nuestro país.
A través de agencias online como Despegar.com, por ejemplo, se ofertan paquetes de viaje a Cancún para dos personas con hotel, vuelo y desayuno incluidos por 9,500 pesos o 475 dólares desde la Ciudad de México.
Accesibles para alguien que gane 10 dólares por hora o alrededor de 1,920 dólares al mes en Estados Unidos por una jornada laboral de ocho horas y seis días. De hecho, durante 2016 los vecinos del norte representaron el 60% del turismo foráneo que llegó al país, la mayor proporción del total.
Aunque el abaratamiento del destino México atrae a los turistas internacionales, la economía se ha visto limitada para aprovechar este repunte al máximo.
El boom turístico llega cuando el presupuesto de diversas secretarías y programas ha tenido que sufrir recortes porque las ventas de petróleo -una de las principales fuentes de ingreso del país- ha disminuido considerablemente al pasar de representar el 30% del presupuesto total hasta antes de 2013 a menos del 20% actualmente.
El presupuesto de la secretaría de Turismo que lidera Enrique de la Madrid cayó 24% tan sólo en un año, al pasar de 5,200 millones de pesos en 2016 a 3,950 millones en 2017.
El gobierno está presupuestalmente desarmado para sacarle jugo al turismo. El programa "planeación y conducción de la política de turismo" que abona al objetivo de “fortalecer esquemas de colaboración y corresponsabilidad para aprovechar el potencial turístico,” sufrió un recorte de 16% de 2014 a 2017.
Su presupuesto pasó de 305 millones de pesos en 2014, año que recién iniciaba la trayectoria descendente de la moneda nacional, a 255 millones para 2017 cuando los ingresos por la llegada de turismo están en su cenit.
Otro rubro al que la secretaría de Hacienda le metió tijera fue al de “Promoción de México como destino turístico,” el presupuesto del programa había incrementado paulatinamente de 2014 a 2016, pero en este año sufrió una caída importante. Disminuyó 34% anual al pasar de 867 millones de pesos el año pasado a 569 millones para el presupuesto del año en curso.
2017 se vislumbra como un año prometedor para el turismo, pues en el mercado de futuros de Chicago se estima que la moneda se mantendrá depreciada en 20 pesos por dólar a lo largo del año. Claro que un mayor presupuesto público para la promoción y fomento del turismo haría mucho más rentable y duradero este boom de la industria sin chimeneas.