70 mil millones más en impuestos para enfrentar la obesidad ¿Y los resultados?
La falta credibilidad en el manejo de los recursos públicos, sigue siendo un factor de desconfianza en México.
Un ejemplo de ello es que el gobierno federal, a través de la Secretaría de Salud, no ha informado sobre el destino de los recursos obtenidos por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicados a las bebidas azucaradas y a la llamada ‘comida chatarra’ en 2014 y 2015, un monto que prácticamente alcanza los 70 mil millones de pesos.
En la defensa de la aplicación del impuesto, producto de la ‘reforma fiscal’ del gobierno, se argumentó que éstos recursos servirían para combatir la obesidad en México, un grave problema de salud pública.
Los ingresos a las arcas del gobierno federal han sido cuantiosos. Los ingresos por el IEPS aplicado a los “alimentos no básicos con alta densidad calórica”, sumaron 29 mil 598 millones de pesos en ambos años; mientras que el nuevo impuesto por el consumo de las “bebidas saborizadas” -principalmente bebidas gaseosas o refrescos- fueron de 39 mil 674 millones de pesos.
Coca-Cola elevó sus volumen de ventas en 2015
¿Cuál ha sido el impacto positivo de esta millonaria recaudación en el combate a la prevalencia de obesidad entre los mexicanos?
No hay respuestas oficiales sobre el uso y resultados de estos recursos ‘etiquetados’ para combatir un mal que, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha convertido a México en el segudo país con mayor obesidad a nivel mundial, después de Estados Unidos.
Por el contrario, los reportes de ventas señalan que el IEPS sobre bebidas azucaradas y comida chatarra no ha servido para disminuir significativamente el consumo de estos productos; como parte de la Estrategia para la Prevención y Control de Sobrepeso, Obesidad y Diabetes de la Secretaria de Salud, principalmente en 2015.
Por el contrario, en México se han elevado las ventas de bebidas azucaradas de acuerdo a reportes de la industria refresquera. Coca Cola FEMSA –el mayor embotellador de refrescos del país- reportó a la 'Securities and Exchange Commission' (SEC) que su volumen de ventas en México, medidas en cajas unidad, se incrementó 6.2% en el cuarto trimestre de 2015, respecto del mismo periodo del año anterior; principalmente por el crecimiento de sus marcas Coca-Cola, Fanta y Mundet en México. En el año, el incremento -respecto a 2014- fue de 3.1%.
A nivel de la industria, un estudio reciente de la Universidad de Nuevo León concluyó que la aplicación del impuesto a las bebidas azucaradas redujo entre 3% y 4% sus ventas, lo que implica que los mexicanos dejaron de consumir apenas 15 mililitros al día.
¿Y la transparencia en la aplicación de los recursos?
Sin embargo, el gobierno federal no ha ofrecido datos ni conclusiones sobre el uso y efectos preliminares en la salud de la población de los 70 mil millones de pesos adicionales recaudados por los impuestos para combatir la obesidad.
El IEPS que se aplica desde 2014 a las bebidas azucaradas y a la ‘comida chatarra’, se inscribe en la Estrategia Nacional para la Prevención de la Obesidad y la Diabetes, que también incluye programas como la eliminación de la publicidad de productos con alto contenido calórico en horarios infantiles.
En su conferencia ‘La Obesidad, una Enfermedad Global’, del pasado 27 de febrero en el Hospital Juárez de México, José Ángel Córdova Villalobos, ex secretario de Salud, recordó que la obesidad repercute en el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes, que representan la primera causa de muerte en México.
En el país, hay casi 7.7 millones de personas con Diabetes Mellitus, enfermedad responsable de alrededor de 80 mil fallecimientos anuales.
MÁS INFORMACIÓN: Reporte F-20 de FEMSA a la Securities and Exchange Commission del 24 de febrero de 2016, sobre resultados 2015 de la empresa.
MÁS INFORMACIÓN: Informes sobre la Situación Económica, de las Finanzas Públicas y la Deuda Pública al Cuarto Trimestre 2015. SHCP