El INEGI tiene ahora mucho más injerencia en la toma de decisiones
¿Cuáles son los objetivos institucionales que se planteó INEGI para 2015?
Qué bueno que mencionas esta parte de la institucionalidad que nos ha distinguido dentro de nuestra comunidad estadística internacional. Primero, es una institución constitucionalmente autónoma (y que) se ha convertido en la mejor práctica internacional porque todos los institutos de estadística en el mundo desean tener independencia técnica y profesional de las administraciones en turno para tener mayor credibilidad. Pero el único país que ha dado autonomía constitucional es México.
Y la otra cosa interesante es que tenemos estadística y geografía en la misma institución eso también nos da enormes ventajas.
Cada año es especial porque INEGI se mete a muchísimos temas. Hoy la problemática que atiende, las mediciones que hace el Instituto han crecido enormemente. Por ejemplo todo el tema de calidad de gobierno y de seguridad son temas totalmente nuevos y tenemos censos de gobierno que realizamos cada año, censos de gobiernos estatales. Levantamos un censo que estamos por presentar acerca de las comisiones estatales de derechos humanos, es la primera vez que vamos a tener un panorama de cómo están.
Este año también estamos levantando una encuesta muy interesante que se llama La Encuesta de Calidad de Impacto Gubernamental, que se hace cada 2 años y que trata de medir los servicios públicos. Una encuesta en la que toman los principales trámites y servicios estatales, municipales y federales y evaluamos los servicios y la experiencia de corrupción en esos trámites y servicios.
Este año fue muy especial porque también levantamos la Encuesta Intercensal de Población y Vivienda. Fue la encuesta más grande que jamás se haya levantado en el país, fueron 6.1 millones de viviendas. Esta información va a servir para actualizar la información de todas las variables demográficas, para actualizar la población y para que Conapo realice sus proyecciones de población hacia delante.
Este año vamos a presentar junto con la encuesta intercensal vamos a presentar una encuesta que se llama Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica y ahí profundizamos en nacimiento, defunciones, migración, pero también en asuntos relacionados con embarazos en adolescentes que ha preocupado mucho y con razón. Allí investigamos mucho más y que este año presentamos resultados.
2015 también es un año en que usted deja la presidencia de INEGI ¿Qué es lo que está dejando el doctor Sojo y cuáles son los retos que quedan pendientes?
Difícil pregunta. Creo que el INEGI hoy tiene mucho más injerencia en la toma de decisiones del sector público y eso es fundamental. De nada serviría todo lo que hacemos si esa información no se conoce o no se utiliza. Antes de este periodo no teníamos un sistema y hoy tenemos un sistema nacional de información estadística y geográfica y tenemos 30 comités técnicos especializados que son espacios donde se reúnen todos los generadores de información sobre distintas temáticas.
Tenemos un sistema que opera bajo normas y el desafío hacia adelante es que cada vez estas normas se apliquen más, porque no es tan sencillo que cambien sus sistema de operación para que todos tengan la misma clase de especificación de actividad económica; por ejemplo estamos trabajando muy de cerca con el SAT, el Seguro Social o la CFE para que la información que publiquen, la saquen de acuerdo a la misma clasificación que tenemos nosotros. Es muy importante.
Es algo de lo que podemos sentirnos satisfechos. INEGI en sí mismo se transformó para adquirir muchas nuevas responsabilidades como la responsabilidad de precios, medio ambiente, seguridad pública...
¿Hay algo que con el que se quede poco satisfecho?
El gran desafío que me hubiera gustado tenerlo ya operando es un mayor uso de los registros administrativos con fines estadísticos. Por ejemplo el consumo de energía eléctrica podría servir para tener un indicador oportuno de la actividad económica.
¿Y por qué no lo tenemos? Porque si vas a CFE te dan la información por alta tensión, media tensión, cosas que no hacen ningún sentido, porque su clasificación es otra, porque sus registros tienen otros propósitos, entonces estamos trabajando juntos para que tengan la misma clasificación. Te aseguro que va a ser el indicador más barato y oportuno que jamás hayamos construido. Pero quién sabe si lo alcance a ver.
Con el SAT estamos trabajando muy bien. El Congreso y el código fiscal permite que el SAT nos dé información con fines estadísticos como lo hacen en los países modernos. Toda esa información la estamos procesando y va ser muy útil para generar información; por ejemplo para la distribución del ingreso. Si bien tenemos una encuesta muy sólida que es la Encuesta Ingreso Gasto de los Hogares, este tipo de encuestas son criticadas porque no alcanzan a los de más altos ingresos, más aún en países tan desiguales como el nuestro. Entonces, ¿qué se requiere tener? Registros administrativos. Si combinas los registros administrativos del SAT se podrá estimar de mejor manera la desigualdad.
Utilizar todos estos registros con fines estadísticos es lo que no voy a alcanzar a ver, pero dejamos los cimientos para que se hagan. El futuro de la estadística en México y el mundo está en utilizar los registros administrativos con fines estadísticos. Ahí está el gran acervo de información.
¿Qué tanta colaboración ha encontrado de parte de los gobernadores?
En generación de información nos ha ido muy bien. Siempre hemos tenido muy buena colaboración, pero al mismo tiempo la información que tienen los gobiernos estatales, y mucho más los gobiernos municipales, no está bien organizada. El problema no es de voluntad de darnos información, el problema es que la información esté dentro de la contabilidad gubernamental.
Sí hemos encontrado respaldo, por supuesto también hemos encontrado críticas pero son gajes del oficio.
Lo veo tan entusiasmado con estos asuntos, que si el presidente Peña Nieto cambiara la ley para promoverlo por un tercer periodo al frente del INEGI ¿lo aceptaría?
No. No está en el escenario. Sí me entusiasma mucho esto, sí ha sido una etapa de mi vida que he disfrutado mucho, pero las instituciones... Más bien pienso que está bien que llegue sangre fresca con otras ideas y que ya la continuidad institucionalidad...
Este es un muy buen punto, esto de la sangre fresca. Le pregunto sobre el servicio civil de carrera en INEGI y su necesario balance entre el talento fresco y la experiencia interna.
Es un problema en general con los servicios profesionales de carrera. Hemos abierto los concursos al INEGI y fuera del INEGI. No tengo las cifras. ¿Cuántos han concursado y qué porcentaje de los concursos los ha ganado gente de afuera? Este sería un parámetro para responder, pero diría que sí le hemos dado oportunidades a los que vienen de fuera y hemos hecho otra cosa que es útil no solo para INEGI sino para otras instituciones.
Lo que hicimos en INEGI fue un programa de retiro voluntario para invitar por un incentivo a los que ya estaban en edad de jubilarse. El año pasado salieron como 350 y este año esperamos repetir para promover que la institución ‘se mueva’. Pero esto pasa mucho en las universidades, en otros lados.
Después de dos periodos al frente de INEGI ¿cuál cree que debe ser el perfil del nuevo presidente de INEGI entre capacidades técnicas y capacidades políticas?
Tu pregunta es muy importante. Se pensaría que lo más importante es la capacidad técnica, que por supuesto es importante. Un perfil ideal sería alguien que conociera cómo se genera la información estadística y geográfica, pero que al mismo tiempo tuviera la capacidad de interlocución con la administración pública federal, las administraciones públicas estatales, con el poder legislativo, con el poder judicial. La parte política es esencial…
…Y eso facilita el trabajo del presidente.
Eso fue lo que permitió construir el sistema. Lo digo con conocimiento de causa. Nunca ha trabajado tanto el INEGI para el gobierno federal como ahora que es autónomo, así ha sido porque trabajamos en un sistema y porque hay interlocución. Si no hay interlocución es muy difícil que esto funcione.
Entonces, más allá de principios técnicos sólidos, sí se requiere, especialmente, una capacidad política para conducir este Instituto.
Sí
¿Ha funcionado la autonomía como está definida en la ley?
La autonomía ha funcionado muy bien, pero hay que vivirla todos los días. Tienes que hacer que todo mundo entienda que tu única misión es generar información con oportunidad y con calidad y que no estás dispuesto a seguir ninguna presión; que vas a publicar la información el día y la hora en que te comprometiste en el calendario.
Y que esa información la vas a generar con calidad sin ningún sesgo y tampoco vas a admitir ninguna presión de fuera.
La autonomía ha funcionado y ha sido respetada sin ninguna duda por las dos administraciones con las que me ha tocado trabajar, la del ex presidente Calderón y la de Peña Nieto.
Si quisiéramos ir un poco más allá -que yo no lo he necesitado porque mi interlocución con la secretaría de Hacienda, en el pasado gobierno y éste, ha sido muy buena- alguien diría ¿por qué no se tiene autonomía presupuestal?
¿Qué significaría eso? Que, como el caso del INE, llevaras directamente tu presupuesto al Congreso. En nuestro caso la ley indica que tenemos que ajustarnos al techo del Ejecutivo, lo que al final significa que tenemos que presentar y negociar primero nuestro presupuesto con el gobierno, es decir con Hacienda, y posteriormente negociarlo en el Congreso. Tenemos estos 2 filtros. La secretaría de Hacienda de los diferentes gobiernos han sido muy respetuosas y hemos encontrado buenos interlocutores. Pero eso sería deseable, sería el paso adicional que sería difícil de lograr.
Además de este asunto presupuestal ¿hay algún otro la autonomía que en la ley requiera ser mejorado?
A mí me parece que no, ese sería el único caso
¿Tiene suficiente independencia INEGI para cumplir sus objetivos?
La otra cosa que se podría discutir, pero no sólo para el INEGI sino en general, es como se nombran a los vicepresidentes o al presidente propiamente.
Son propuestas del presidente de la República, igual que en el Banco de México. Y ahora con las nuevas autonomías se han encontrado otros mecanismos, por ejemplo con la Comisión Federal de Competencia Económica o el IFT en los que hay una especie de convocatoria y los aspirantes son evaluados. En fin, hay muchos modelos ahora para cuidar los órganos de gobierno, pero creo que hasta ahora las cosas han funcionado muy bien; pero sí serían las otras dos cosas que tal vez alguien podría estudiar.
Quizá este funcionamiento tenga que ver, otra vez, con el perfil del actual presidente. Sin embargo esto podría no ser así con un presidente con otro perfil y ésa es una preocupación respecto de la autonomía que marca la ley.
Es claro lo que señalas. El INEGI es una institución que ya está muy hecha a la autonomía, el presidente tiene una Junta de Gobierno y toda una estructura. No nombra por ejemplo a los directores generales y a los adjuntos, los nombra la Junta de Gobierno, el contralor no lo nombra el presidente sino la Junta de Gobierno y todos los demás directores son de servicio profesional de carrera; entonces el INEGI ya está hecho a la autonomía.
Un presidente que no le dé tanta importancia a la autonomía tendría problemas con la propia institución. Son este tipo de debates que sí hay que tener...
Y que son necesarios para el propio Instituto...
Y que está en ustedes, en los medios de comunicación, los analistas, investigadores, empresarios que también ya se acostumbraron a un INEGI autónomo.
Hay preocupación respecto del funcionamiento de los comités técnicos que están en manos del gobierno y que genera preocupación en términos de la transparencia.
Es una combinación. Son los generadores de información pero en todos los casos el INEGI actúa como secretario técnico. Tenemos un filtro porque lo que surje de los comités técnicos pasa a otro órgano colegiado que es el Comité Ejecutivo; ahí es otro filtro donde si bien en su mayoría son del gobierno, lo que aprueba el Comité Ejecutivo pasa a la Junta de Gobierno en la que nada más somos nosotros.
Entonces creo que esa estructura institucional sí funciona. También hemos avanzado mucho en materia de transparencia porque la autonomía tiene que ir de lado de la responsabilidad y la rendición de cuentas, sino no funciona.
¿No hay preocupación alguna del Dr. Sojo en materia de transparencia en relación con el funcionamiento de los comités técnicos?
De la transparencia no porque está el filtro de la Junta de Gobierno al final que evita que algunas cosas puedan… digamos… podría haber intereses más allá de lo estadístico de parte de algunos servidores públicos. Pero al final la Junta de Gobierno tiene que juzgar y la Junta de Gobierno juzga por razones técnicas.
¿Cuál es el objetivo más preciado para el Dr. Sojo antes de terminar su mandato?
Vamos a hacer un ejercicio de rendición de cuentas. Un documento de rendición de cuentas que le pueda servir al próximo presidente para darse cuenta de lo que pasó y dónde está el Instituto.
Le he pedido a los directores generales que también me indiquen cuáles son sus principales desafíos hacia adelante, no para decirle al próximo presidente ésto es lo que yo creo, sino ésto es lo que el Comité Directivo del Instituto piensa de hacia dónde podemos caminar.
Tengo otros proyectos, el de CFE que ojalá vea la luz antes que me vaya y otro que tengo muchas ganas en materia del producto interno bruto. Cumplimos con todos los lineamientos del Fondo Monetario Internacional, pero sí hay alguien que nos gana en la oportunidad y es Estados Unidos.
En EU sacan lo que ellos llaman el flash y lo sacan 30 días después de terminado el trimestre. Creo que tener un flash sí pone la discusión en otro nivel. Pienso que INEGI a los 30 días ya podría sacar una buena estimación oportuna del producto interno bruto trimestral porque ya tenemos dos meses de IGAE y tenemos mucha información del tercer mes. Tendríamos que estimar lo que nos falta del tercer mes, para sacar una estimación oportuna. Lo estamos trabajando.
¿Se tendrá en este mismo año?
Yo espero que sí. Eso sería lo más preciado.