Dilma debe irse: The Economist

Los mediocres resultados en materia económica respaldan al candidato opositor, Aecio Neves, como un cambio favorable, según el diario británico.
17 Octubre, 2014 Actualizado el 17 de Octubre, a las 09:22
En la más reciente portada de la revista de The Economist se observa a la fallecida Carmen Miranda, cantante brasileña, con un tocado de frutas podridas.
En la más reciente portada de la revista de The Economist se observa a la fallecida Carmen Miranda, cantante brasileña, con un tocado de frutas podridas.
Arena Pública

Bajo el mandato de Dilma Rousseff la economía brasileña se encuentra estancada y el progreso social ralentizado; con la segunda vuelta presidencial en ciernes, Brasil necesita de un cambio, aseguró el prestigiado diario inglés, The Economist.

En un artículo de portada de su más reciente revista titulado ¿Por qué Brasil necesita un cambio?, el diario ve en Aecio Neves, candidato opositor, la esperanza de dar la vuelta a una página de cuatro años de mediocre crecimiento económico.     

De acuerdo con datos del banco mundial, durante el mandato de ocho años (2003-2010) de Lula da Silva Brasil registró un promedio de crecimiento anual de su Producto Interno Bruto del 4.1%. En ese tiempo, la economía brasileña llego a crecer hasta 8% durante 2010, tras la severa crisis mundial.

En lo que va del mandato de Dilma Rousseff (2011-2014), sólo se ha crecido en un promedio de 2%, sin considerar los resultados para 2014.

Según The Economist, por mucho, este es el peor desempeño para un país miembro de los BRICS, mientras que el gobierno brasileño pasa por una crisis de descrédito por corrupción y pobres servicios sociales cuya materialización más notoria fueron las protestas y trifulcas durante el Mundial.

En la primera vuelta, Rousseff aseguró el 41.6% de lo votos. Esto se debe, según el diario, a que la mayoría de los brasileños aún no resiente la desaceleración económica, “aunque pronto lo harán”.

Por su parte, Aecio Neves, candidato del centroderechista Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), ha batallado por ganar apoyo en las partes más pobres de Brasil para su plan de reformas en materia de seguridad social, fiscal y macroeconomía, las cuales -dice el diario- el país necesita.

Si Brasil quiere evitar otros cuatro años de andar a la deriva, es vital que él tenga éxito en hacerlo, dice, mientras que asegura que las políticas de Neves beneficiarán tanto ricos como a pobres.

The Economist se lanza al ataque al asegurar que las constantes intromisiones de Rousseff en las políticas macroeconómicas e intentos de microrregular al sector privado han hecho a la inversión caer.

En tanto, ha dañado financieramente a la paraestatal Petrobras al forzar bajas en los costos del petróleo con el fin de mitigar los impactos inflacionarios en su “liviana” política fiscal.

Además, ha hecho poco esfuerzo por atacar los problemas estructurales de Brasil: su pobre infraestructura, los altos costos, su sistema de impuestos punitivos y “un rígido sistema laboral copiado de Mussolini (el dictador fascista Italiano)”.

Por último, la publicación le da un espaldarazo a la oposición: “Neves merece ganar. Ha peleado una campaña de persecución y probado que él puede hacer funcionar sus políticas económicas. Brasil necesita crecimiento y un mejor gobierno. Es más probable que Neves lo logre que Rousseff”,  

La actual presidenta, y candidata por el Partido de los Trabajadores (PT), aseguró que las declaraciones de The Economist son “una manifestación del sistema financiero internacional”, haciendo alusión a la línea editorial del diario, cercana a los grandes intereses monetarios.

La segunda vuelta presidencial brasileña se realizará este 26 de octubre y al momento se percibe un empate técnico entre ambos candidatos. De acuerdo con las encuestas de intención de voto Neves cuenta con un 51 % y Dilma un 49 %, con margen de error de dos puntos porcentuales del sondeo.

 

MÁS INFORMACIÓN: Brasil: Rousseff va ganando; los mercados perdiendo. Blog de José Miguel Moreno para Arena Pública de 2 de octubre de 2014.

Fútbol y problemas de Argentina llevan a Brasil a la recesión. Nota de Arena Pública de 29 de agosto de 2014.