En Latinoamérica, el 10% de los más ricos generan el 90% del ISR: BID

El 90% del Impuesto Sobre la Renta (ISR) en México y en la gran mayoría de países latinoamericanos es pagado por el 10% de las personas con mayores ingresos, de acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

En el libro Recaudar no basta. Los impuestos como instrumento de desarrollo, editado por Ana Corbacho, Vicente Fretes Cibilis y Eduardo Lora, publicado por el BID, se argumenta que por tal motivo la recaudación de este impuesto se vuelve un “cascarón vacío,” ya que es progresivo en la planeación pero en la realidad recauda poco y carece de capacidad redistributiva.

Mientras que en los países desarrollados la recaudación del impuesto a la renta, el gravamen que se impone a los ingresos de los trabajadores del sector formal, representa el 8.4% del PIB, en latinoamericanos sólo es 1.4%.

Los autores sostienen que son cuatro los principales motivos que hacen que Latinoamérica no aproveche el potencial recaudatorio del impuesto sobre la renta.

Primero, sólo a los ricos les gravan el impuesto, en promedio en los países latinoamericanos se excluyen de la obligación quienes ganan menos de 1.4 veces el ingreso per cápita y se aplica, por lo menos en algún porcentaje a quienes tienen salarios a partir de 6.5 veces el ingreso per cápita.

Segundo, el elevado número de deducciones que en promedio corresponden que ascienden a poco más del 50% del ingreso que en un principio se pensaba recaudar, entre otros casos, se ofrecen para gastos personales como los educativos o los médicos.

Tercero, las exenciones o regímenes espaciales existentes para este tipo de impuestos, y cuarto, la evasión fiscal, que resta aproximadamente la mitad de la recaudación potencial del impuesto.

Los autores de Recaudar no basta, argumentan que una salida para revertir esta tendencia en Latinoamérica es aplicar un sistema dual al gravar el impuesto sobre la renta, esto es, grabar el ingreso laboral con una tarifa progresiva y las rentas de capital de personas con tarifas planas, inferiores a la máxima aplicada a las rentas del trabajo.

A FONDO: Lea aquí el reporte Recaudar no Basta, del BID.