Contarlo no es suficiente

Que todos los días sean asesinadas más de 90 personas en México, no debería ser un reporte de prensa rutinario, como se reporta el clima.
8 Julio, 2024
Contarlo no es suficiente.
Contarlo no es suficiente.
EL FIN DE LOS MEDIOS

Detener el tiempo y hacer un balance sobre cómo reflejaron los medios los datos y los eventos más negativos del gobierno que entregará el poder el 1 de octubre es una tarea por hacer. Y con ello, contar las veces que la prensa exhibió las mentiras del presidente, las veces que atacó a los medios en la cara de los propios periodistas presentes en la ‘mañanera’...

Contar las veces que habló con desdén de la sociedad civil y las oenegés; o las veces que mostró, ilegalmente, datos privados de periodistas y empresas, y las veces que dictó –con falsa experiencia editorial– qué sí debería ser noticia y qué no debería serlo.

Y más aún, como parte de esa tarea, explicar cómo los medios han sido difusores de una conferencia matutina donde, a fuerza de enaltecer su poder, el mandatario pudo distraer la atención con sus relatos personales para no hablar de las masacres y muertes que ocurren en el país.

Esto último, es el indicador más doloroso de los últimos sexenios, pues del 1° de diciembre de 2018 al 31 de mayo de 2024, fueron registradas oficialmente 187,564 muertes dolosas, un promedio de 93.5 asesinatos diarios

¿Por qué es importante?

Es cierto, la misión de los medios es registrar la realidad por cruda que esta sea. Sin ir muy lejos, apenas en mayo, la realidad de una pistola empuñada y apuntando a la cabeza para asesinar a una persona que quiso ser alcalde de Coyuca de Benítez, Guerrero. O, más lejos, la masacre de una familia de nueve personas, ocurrida en noviembre de 2019 en la sierra de Sonora. ¿Es suficiente con contarlo?

Sí, porque ha quedado registro mes con mes. Pero no, porque también cuenta la forma, y para el caso, que todos los días sean asesinadas más de 90 personas en México no debería ser un reporte de prensa rutinario, como se reporta el clima, sino una cobertura tan desplegada como analítica, machacona, como machacón es el discurso presidencial.

Contar los muertos y exhibir la impunidad debería ser tan sobresaliente como la cobertura que merece un huracán, sólo que esa rendición de cuentas es de todos los días, aunque parezca irreal. Como irreal puede ser esa idea de que todas las mañanas el gabinete de seguridad revisa qué pasó ayer y traza su estrategia para que hoy no sea peor.

Es mucho pedir, pero se vale, pues fue gracias a la prensa que, remando contra la opacidad durante el gobierno de Calderón, se inauguró en 2007 el ‘ejecutómetro’, esa palabreja que ha sido el marcador de la muerte desde la guerra contra los cárteles del narco. 

Y como lo recordara Sergio Aguayo en su artículo del 3 de enero de este año en Reforma, fue ese diario, cuando lo dirigían Lázaro Ríos y René Delgado, donde desde 2007 se realiza un esfuerzo de contar los muertos reportados en la prensa. E hizo escuela.

Guanajuato, el epicentro

AM de León, probablemente el diario más influyente del Bajío, tiene vigente desde 2018 ese contador en la entidad del país con más asesinatos dolosos. El Ejecutómetro AM es el recuento diario de la violencia en Guanajuato. Y cada mes, la redacción del periódico que preside Enrique Gómez Orozco, hace un recuento de los homicidios, contrastando los datos de la Fiscalía del Estado con los publicados por sus reporteros de lo que resulta un reporte pormenorizado de gráficas y datos estadísticos donde refleja tendencias de la violencia en ese estado. No sólo los cuenta, mira hacia atrás y da perspectiva

En su explicación, el diario aclara que, como medida de seguridad, sus reporteros y corresponsales no investigan incidentes relacionados al crimen organizado. Sus fuentes principales son la Guardia Nacional, Fiscalía del Estado, policías municipales y las secretarías de Seguridad y de Gobierno de Guanajuato.

¿Cómo pudo ser diferente a nivel nacional en este periodo? Sencillo, pero dada la experiencia, imposible. Habría sido necesario convocar a la sociedad, reunir a expertos locales e internacionales, analizar cómo se hizo en otras partes del mundo y acercarse a los medios para convencer que sí se quiso combatir la impunidad.

Vista en conjunto, la prensa mexicana ha ganado esta batalla, porque, pese al estilo de un presidente que intenta esconder debajo de la alfombra los datos más negativos de su estrategia de seguridad, no tuvo modo de zafarse de la responsabilidad de por lo menos reportar. Toca a la prensa poner luz a ese reporte, meter más análisis a los datos y hacer así camino contra la impunidad.

René Sánchez Huitrón René Sánchez Huitrón Egresado de Comunicación por la Universidad Autónoma Metropolitana, la experiencia del autor suma varios años de investigación, edición y dirección editorial en las salas de redacción de organizaciones como Notimex, El Financiero, El Economista, El Norte y Reforma. Actualmente es asesor senior en carralsierra.com Sus opiniones son personales.