Agencia muerta
Nadie podría conocer cómo se mueven las neuronas del Presidente y con ello comprender el significado que en su mente tiene una confrontación desatada, las dos palabras que utilizó hace casi dos semanas cuando pretextó su falta de dedicación para salvar a Notimex.
La destrucción de la Agencia de Noticias del Estado Mexicano es uno de los saldos malditos del gobierno saliente que, de forma cándida como indolente, reconoce en propia voz (la del Presidente) que sí, que efectivamente, “es importante tener una agencia del gobierno”.
Fue una institución que, pese a los vaivenes políticos (tuvo 18 directores en 55 años), difundió sucesos locales, regionales e internacionales, con sentido de urgencia –en tiempo real–, como corresponde a toda agencia de noticias. Fue también escuela de cientos de periodistas.
AMLO fue más lejos, pues señaló que la función de Notimex se suple con lo que hacen los medios públicos, “pero no es igual”. Se refería a los medios que ahora agrupa el ente llamado Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR), a saber, el Instituto Mexicano de la Radio, los canales de televisión abierta 11, 22 y 14, además de Televisión Educativa y Radio Educación.
Por supuesto que no es igual, pues basta decir que todos los medios que agrupa ese sistema eran y –si Notimex sobreviviera– serían, clientes de la producción de la agencia. Notimex sería acaso su principal proveedor. Ahora bien, ¿los medios del Estado son medios del gobierno? Ese es un debate que en México se revela con sólo mirar sus contenidos. Si los medios son estatales, el gobierno en turno no debería verlos como propios. Pero eso hacen.
¿Por qué es importante?
La explicación más sencilla del rol de una agencia estatal de noticias, como era concebida Notimex, es la de proveer del insumo fundamental que tomaban, en su caso, unos 450 medios en todo el país y más allá. Una lista que podría alcanzar a 650, si se cuentan los clientes eventuales, y hasta 1,500, si se considera que entre todos había conglomerados con más de un medio1.
Decenas de medios digitales e impresos locales y nacionales, en todo el país, se surtían de las piezas noticiosas de esa marca. No más ya.
Y si bien apreciaban su cobertura con perspectiva nacional, igualmente lo harían porque esa información tendría, eventualmente, precios más accesibles comparada con la oferta de otras agencias locales o globales como AP (Associated Press), Reuters, Servicio Universal de Noticias (SUN), Apro (Proceso), Agencia Reforma, EFE o Xinhua, por citar algunas.
Una explicación más de la importancia que tiene la prevalencia de una agencia estatal, como fue Notimex, está plasmada en la propia Ley del Sistema Público de Radiodifusión, publicada en junio de 2018. En ella se establece como principio rector de los medios estatales “el compromiso ético con la información objetiva, veraz y plural, que se deberá ajustar plenamente al criterio de independencia profesional y al pluralismo político, social y cultural del país”.
Eso dice la Ley, pluralismo, aunque funcionarios públicos como el actual encargado de despacho de la presidencia del SPR, Jenaro Villamil Rodríguez, o el caricaturista Rafael Barajas, utilicen espacios de televisión, entre ellos los canales 14 y 22, como medios de propaganda del gobierno y su partido.
La sentencia
Notimex cierra. Este es el lacónico título que aún se puede leer como noticia del portal de la agencia muerta entre un menú de contenidos ofrecidos en plena pandemia del COVID-19. Otros títulos son Beisbol y futbol pueden llevar su actividad en estadios vacíos o Inicia NY reapertura económica tras más de dos meses de cierre.
Sin pausa ortográfica de por medio, la entrada de esa nota del 8 de junio de 2020 a las 20:00:51 rezaba: La Agencia de Noticias del Estado Mexicano cerrará operaciones luego de que la junta de gobierno el máximo órgano de este instituto tomara dicho acuerdo.
Dos horas más tarde, como aviso a sus clientes y suscriptores, anunciaba que se ve en la necesidad de parar actividades a las 24 horas del 8 de junio de 2020, medida que atribuye a la huelga que estalló el sindicato de trabajadores de la propia empresa.
Formal y legalmente, Notimex dejó de existir a sus 55 años. El Diario Oficial de la Federación del 22 de diciembre de 2023 publicó el decreto por el que se extinguió la Agencia de Noticias del Estado Mexicano, personalidad jurídica que había ganado como organismo no sectorizado, dotado de patrimonio propio, así como de autonomía técnica y de gestión.
Desde agosto de 1968 hasta diciembre de 2023, Notimex tuvo 18 directores, desde el primero de ellos, Enrique Herrera Burquetas, hasta Sanjuana Martínez (de malograda gestión). Y, entre ellos, pasaron por ahí periodistas como Pedro Ferriz Santacruz, Miguel López Azuara, Raymundo Riva Palacio, Sergio Uzeta y Alejandro Ramos Esquivel. Un director cada tres años en promedio.
Y durante todo ese tiempo, se forjaron sólidas carreras de reporteros, redactores y corresponsales de agencia, muchos hoy vigentes en medios como Excélsior, Proceso, El Financiero o El País. Cito a José Carreño Figueras, José Buendía Hegewish, Jorge Carrasco Araizaga, Rossana Fuentes Berain, Silvia López Nova, José López Zamorano, Antonio Ortega Ávila, Gerardo Tena, Martha Trejo y Fabiola Trelles. La lista es mucho más larga.
Así que, de propiedad estatal, privada o mixtas, las agencias de noticias son vehículos a través de los cuales se refleja la realidad de una sociedad, dan perspectiva local a fenómenos globales y libran también los ataques de gobiernos autócratas. Sin duda contribuyen a un mayor conocimiento y a robustecer la credibilidad de los medios profesionales ante esos ataques.
Son como las aerolíneas bandera, referencia de cada país. Associated Press (AP), Reuters, France Presse (AFP), Xinhua, Agenzia Nationale Stampa Associata (ANSA), Agencia EFE, Deutsche Presse Agentur (DPA) o Itar-TASS, tienen antecedentes fundacionales en el siglo antepasado y han probado su vigencia en la era digital.
1/ Las Agencias de noticias en la era digital. Editado por el Gobierno de México y la Biblioteca Mexicana del Conocimiento. 2015. Otra lectura recomendada es Periodismo del siglo XXI. Notimex, ecosistema digital. Editado por Notimex y el CONEICC. 2017. Ambos textos fueron coordinados por Alejandro Ramos Esquivel.
René Sánchez Huitrón
Egresado de Comunicación por la Universidad Autónoma Metropolitana, la experiencia del autor suma varios años de investigación, edición y dirección editorial en las salas de redacción de organizaciones como Notimex, El Financiero, El Economista, El Norte y Reforma. Actualmente es asesor senior en carralsierra.com Sus opiniones son personales.
