El engaño en la moda: radical aumento de talla entre un aparador y otro
La diferencia de tallaje en la industria textil es común que entre un país y otro, pero… ¿cómo es posible que exista esta frontera entre una tienda y otra en la misma plaza comercial?
Es posible que al encontrarse en las tiendas de ropa de preferencia se experimente cierta ansiedad al tomar la prenda que llama la atención, buscar la talla que usualmente se utiliza y descubrir que es demasiado pequeña; hecho que resulta equivalente a sentir se ha subido de peso en un solo instante, y aunque diciembre haya dejado estragos, este no es el caso.
En general, la mayoría de las personas actualmente sufre inseguridades respecto a su físico, resultado de la “perfección” admirada en las pantallas, fotografías, redes sociales y demás medios de comunicación, pero el enfrentarse con esa supuesta realidad de frente puede pasar de ser un momento incómodo y frustrante, a un verdadero trauma.
Moda (foto:pixabay)
Las medidas en tallas se han modificado conforme al tiempo, es decir que lo que hace 50 años se consideraba talla S hoy es M, lo que resulta perfectamente común debido al cambio de circunstancia y contextos sociales al pasar los años, pero hay un descontrol definitivo al momento de llevarlas a los aparadores.
Blanco y negro revista ilustrada (foto: wikipedia)
Según la Norma Oficial Mexicana NOM-004-SCFI-2006, Sistema General de Unidades de Medida y sus especificaciones, no existe como tal una regulación en el tema, únicamente se hace mención en el punto 4.4 sobre requisitos básicos sobre la talla, la cual debe estar expresada en idioma español y las medidas conforme a los símbolos establecidos, pero nada sobre medidas precisas para medir las tallas de ropa, éstas se encuentran de acuerdo conforme cada fabricante las maneje.
Es importante resaltar que ante esta falta de regulación muchas tiendas no únicamente juegan con la perspectiva que se tiene sobre sí mismo en este sentido negativo, también existe un fenómeno llamado vanity sizing.
El Vnity Sizing significa “tallaje vanidoso” en español, el cual consiste en reducir la medida de las tallas en la etiqueta, es decir, si generalmente se utiliza una talla 9, al entrar ahí ese 9 se transformará en 7, satisfacción que se creará en el consumidor haciéndole comprar aún más en ese mismo lugar.
Por lo tanto, al menos en México y otros países como España, hoy en día es posible pasar descaradamente de ser XS a S o viceversa, hecho que no sólo enfrenta a la sociedad a cambiantes concepciones sobre sí mismos sino a jugar con la autoestima, seguridad y proyección de las personas.
De acuerdo a la página del gobierno federal el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) nueve de cada 10 personas atendidas por casos de trastornos alimenticios son mujeres entre 12 y 25 años; y respecto al marco del Día Internacional de la Lucha contra los Trastornos alimenticios llevado a cabo el 30 de noviembre de 2018 en México, se documentaron 20 mil nuevos casos anuales en los que incluyen la anorexia y la bulimia.
Aunque es un hecho que cada caso clínico es único, tiene un trasfondo personal y debe ser atendido de forma particular, la preocupación por la apariencia es una constante en la mayoría de personas y, al encontrarse frente a esa falsa realidad manifestada en las tiendas de ropa no resulta sorprendente el aumento en enfermedades relacionadas con la alimentación.
Así que, en las siguientes compras sería benéfico intentar no sentirse influenciado del todo por lo que se encuentre en las etiquetas de las prendas de vestir, ni dejar que ello gobierne la imagen proyectada en los espejos, ya que no es una realidad o verdad absoluta, finalmente la talla no deja de ser sólo un número o una letra.