Crear un sistema de salud único ayudaría a disminuir la pobreza
Tener el IMSS, ISSSTE y demás servicios de salud divididos, en vez de un único sistema de salud, no ayuda a combatir la pobreza.
Siete de cada 10 personas que nacen pobres permanecerán en esa condición toda su vida a menos que se reduzcan sus desigualdades sociales, de acuerdo con “El México del 2018”, documento presentado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesas (CEEY) el 8 de mayo.
Parte de esas desigualdades se generan por la fragmentación de la seguridad social y el acceso a la educación de acuerdo con el CEEY, por lo que propone unificar los cientos de sistemas de salud que operan en el país.
Te puede interesar: Sin crédito para viviendas, en el sur de México se construyen casas vulnerables, 11 de abril del 2018
La reforma estaría enfocada en desvincular la provisión de seguridad social del estatus laboral de las personas ocupadas, así mismo, la idea incluye otorgar el mismo paquete de servicios a todos los trabajadores. Paquete que se financiaría a través de impuestos generales en lugar de contribuciones del trabajador.
La propuesta nace a raíz de los dos principales problemas identificados en la provisión de seguridad social en México: Un sistema fragmentado y de una baja cobertura del esquema contributivo.
Desde 2012, se han tomado algunas medidas para reforzar la seguridad social. Sin embargo, estas se han enfocado en el ámbito no contributivo y no han cumplido con el objetivo de establecer la universalidad de la protección formal
-CEEY
Aunque son los más conocidos, en el país no solo operan el Instituto Mexicano de la Seguridad Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE); el CEEY estima que existen cerca de 100 instituciones en el país encargadas de proveer seguridad social a sus trabajadores, las cuales solo cubren al 37% de la población ocupada.
De acuerdo con el último informe del Coneval (2016), 19 millones de mexicanos -15% de la población- no tienen acceso a un servicio de salud. Peor aún, 69 millones -56%- no cuentan con ningún tipo de seguridad social.
69 millones de mexicanos, el 56% de la población, no cuentan con ningún tipo de seguridad social
A marzo del 2018 el IMSS tenía aseguradas a 19 millones 786 mil 997 personas de acuerdo con su cubo de información. El anuario estadístico 2017 del ISSSTE tiene registradas 13 millones 256 mil 582 personas y a febrero del 2018 el IMSS-Prospera tiene registrados a 12 millones 417 mil 631 personas.
El CEEY es consiente que una reforma de tal calibre llevaría tiempo y necesitaría mayores recursos fiscales. Por lo que, mientras se lleva a cabo una gran reforma, el centro de estudios recomienda realizar las siguientes acciones:
- Individualización del financiamiento. Modificar la regulación del IMSS e ISSSTE cuyo financiamiento es por grupo familiar.
- Portabilidad del aseguramiento. La cuota social cubriría un paquete de atención primara disponible en cualquier institución pública
- Fondo Nacional de Intervenciones de Alto Costo. El cual pagaría de forma prospectiva a las unidades médicas por caso atendido.
- Financiamiento de los servicios IMSS-Prospera a través del Seguro Popular. Reconocer al IMSS-Prospera como un prestador de servicios y sujetarse a las mismas reglas que otros prestadores.
- Cero reducción al presupuesto en salud. Revertir los recortes acumulados y proponer criterios del incremento y asignación del presupuesto en función de niveles y distribución de necesidades de atención.
- Fondo único para el financiamiento de las instituciones. Centrarse en el individuo con un financiamiento social, solidario e integrado.
- Incremento a la cuota social que se asigna al IMSS, ISSSTE y Seguro Popular. Compensar esta medida con ajustes a otros impuestos como IVA, ISR e impuestos especiales.
- Contribución general al Sistema de Salud. Los no asalariados pueden contribuir con sus impuestos al ingreso mediante límites a la deducibilidad de sus gastos.
MÁS INFORMACIÓN: ´El México del 2018´ Movilidad Social para el Bienestar, Centro de Estudios Espinosa Yglesias, 2018