¿El NAIM a Texcoco o a Santa Lucía? Crónica de una consulta fallida

El primer día de la consulta ciudadana para decidir el destino del NAIM estuvo marcado por críticas y dudas, pero también por ciudadanos dispuestos a participar.
25 Octubre, 2018 Actualizado el 26 de Octubre, a las 15:49
La consulta ciudadana para decidir el destino del NAIM terminará el 28 de octubre (Foto: Abimelech Tovar)
La consulta ciudadana para decidir el destino del NAIM terminará el 28 de octubre (Foto: Abimelech Tovar)
Arena Pública

Un jueves común. La actividad comienza desde temprano como es habitual en la Ciudad de México. La conglomeración decae pasadas las diez de la mañana, pero en la estación del metro Portales la afluencia es constante.

La mesa de consulta se posicionó justo frente a la entrada de la estación. Los transeúntes pasaban, algunos se detenían a ver por qué había gente formada y las preguntas de curiosidad eran inevitables. Al escuchar las respuestas de que la fila respondía a la votación ciudadana para el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), pasaban de largo. Otros, solo miraban unos segundos para seguir su camino.

En esta mesa, la fila era corta a las 11:20 de la mañana. Apenas unas 12 personas esperaban su turno. Tres mujeres eran las encargadas de registrar la clave de elector en las credenciales de las personas a través de sus teléfonos celulares con ayuda de una aplicación que desarrolló la organización civil México Decide.

 

La consulta ciudadana durará hasta el domingo (Foto: Abimalech Tovar)

La consulta ciudadana durará hasta el domingo 28 (Foto: Abimelech Tovar)

 

Acto seguido, entregaban un crayón y la boleta, con las dos opciones a elegir: Reacondicionar el actual aeropuerto y el de Toluca y construir dos pistas en la base aérea de Santa Lucía; o, continuar con la construcción del NAIM en el Lago de Texcoco. Al reverso de la boleta se lee un listado de ventajas y desventajas para una u otra. Llamó la atención que este voto no es secreto. No hay una casilla que impida las vistas ajenas.

La participación fue rápida; el proceso entero tardó menos de 10 minutos.

Cerca de la urna estaban Pedro y Lizeth, de 24 y 21 años, respectivamente. Aunque no están del todo convencidos de la utilidad de la consulta, querían ser parte de la toma de decisión. Sus opiniones son opuestas: mientras Lizeth se declaró en contra de continuar con la construcción del NAIM por la falta de transparencia de los contratos, Pedro replicó que el actual aeropuerto es deficiente y hace falta uno nuevo y más grande.

 

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La actividad fue más tranquila al sur de la Ciudad de México, en Plaza Victoria, en Villa de Cortés; lo que la volvía un buen lugar para comprobar la logística de la votación. Allí también eran tres los voluntarios atendiendo la mesa de consulta, pero los ciudadanos participantes eran apenas siete. Evidentemente el proceso fue muy rápido para ejercer la votación.

A pesar de que este reportero había votado minutos antes en otra mesa, no hubo ningún cuestionamiento para recibir la credencial del INE y votar nuevamente.

 

La consulta ciudadana ha estado rodeada de dudas y controversia (Foto: Abimalech Tovar)

La consulta ciudadana ha estado rodeada de dudas y controversias (Foto: Abimelech Tovar)

 

En este lugar, Jorge, de 70 años, dijo que la consulta le parecía buena idea porque, por fin, tomarían en cuenta a los ciudadanos y puede servir de base para tomar una decisión. Considera que Santa Lucía es la mejor opción, pues hay que mejorar las condiciones del Lago de Texcoco.

Pero votar dos veces, tampoco impedía hacerlo por tercera vez. Esta vez ocurrió en la explanada de la Alcaldía de Coyoacán, donde había otra mesa de la consulta. Allí la participación fue mayor, cerca de 40 personas estaban formadas sin importar que los rayos del sol caían a plomo. Unos 25 minutos en la fila y la tercera votación en la consulta se consumó.

María Luisa -quien acudió a la mesa de la consulta- coincidió con Jorge. Más allá de si funciona o no la consulta, lo importante para María Luisa es que se está tomando en cuenta la opinión de la ciudadanía.

 

A pesar de las dudas, la asistencia a la consulta ha sido alta (Foto: Abimalech Tovar)

A pesar de las dudas, en algunas mesas la asistencia a la consulta fue alta el primer día (Foto: Abimelech Tovar)


Las opiniones en contra de Texcoco se multiplican en esta mesa. María Luisa argumentó que la actual construcción del NAIM en Texcoco solamente beneficiaría a los empresarios involucrados en el proyecto; mientras que Natalia, otra de las votantes, señaló que el pago que la gente había recibido por sus tierras fue injusto.

Pero votar una cuarta vez no tenía ningún impedimento en la consulta. Ahora es la explanada de la Alcaldía de Benito Juárez. Como en Coyoacán, aquí la participación también fue alta. Unos 30 minutos de fila para llegar a la mesa de votación era el tiempo estimado.

En aquella fila, un joven que pasaba en bicicleta se detuvo y preguntó en voz alta a los ciudadanos si recordaban de quiénes eran esas tierras. Inmediatamente una pareja de adultos le reprocharon sus gritos. Se hicieron de palabras y el ambiente se tensó por unos minutos. No pasó de allí.

 

La consulta también ha generado tensión entre los mismos ciudadanos (Foto: Abimalech Tovar)

La consulta también ha generado tensión entre los mismos ciudadanos (Foto: Abimelech Tovar)

 

A las 2:30 de la tarde los rayos del sol eran intensos. Nada impidió que se votara por cuarta vez con INE en mano. Mauricio, uno de los capitalinos formados en aquella fila, cree que la consulta carece de transparencia y que no funcionará; pero también considera importante participar. 

 

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Así transcurrió el primer día de la consulta ciudadana a la que convocó Andrés Manuel López Obrador, el presidente electo. Era notable que los adultos mayores -a quienes López Obrador les prometió ayudas durante su gobierno, fueron los más participativos, tanto en el ejercicio de su voto como en el voluntariado de las mesas. Los jóvenes eran minoría; por lo menos en esas cuatro mesas de votación de las pocas que se instalaron en la capital de la República.

Hacia las tres de la tarde, las urnas tenían un buen número de boletas dentro. Quizá porque algunos habían votado más de una vez.

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