México incumple su compromiso de dar buenas condiciones a trabajadores domésticos
1 millón 843 mil trabajadores domésticos la tienen difícil en México.
A pesar de que la Organización Internacional del Trabajo y sus miembros, México incluido, desde 2011 firmaron un convenio sobre el trabajo decente para empleados del hogar, esas condiciones aún no se consiguen.
En México hay millones de trabajadores domésticos y no gozan de condiciones favorables.
El Convenio, que debía haber entrado en vigor en 2013, implica en su artículo 14 que “en conformidad con la legislación nacional (todos los países) deberán adoptar medidas apropiadas a fin de que los trabajadores domésticos disfruten de condiciones no menos favorables que las condiciones aplicables a los trabajadores en general, inclusive en lo relativo a la maternidad”.
Y a mayo de 2017, solo el 0.14% de los trabajadores domésticos, que en un 90% son mujeres, están afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social, de acuerdo con datos de esa institución.
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Es decir, aunque deberían gozar de los mismos beneficios que cualquier otro trabajador, su tasa de inclusión a la seguridad social es mucho más baja que el promedio.
También son víctimas de discriminación, e incluso en la legislación mexicana, salvo en Colima, ningún otro estado incluye explícitamente los derechos laborales de este grupo.
El 96% de las personas que ocupan estos puestos laborales tienen un contrato “solo de palabra” de acuerdo con el Conapred, lo cual explicaría en parte el por qué los patrones no están registrando a sus empleados en el IMSS; a pesar de que esto se ha incluido de forma voluntaria.
Los requisitos para ingresar a un trabajador doméstico al IMSS son dos: contar con una FIEL y el RFC del patrón, pero si 96% de los empleados no tienen un contrato, entonces solo el 4% está en condiciones de elegir que se le incluya en el padrón del IMSS.
De igual forma, la mayor parte de los empleadores son mujeres. La encuesta del Conapred revela que las jefas de familia son las que hacen los tratos de palabra con los empleados domésticos, en casi todos los casos, y que al menos el 80% de ellas no ven ningún problema con sus condiciones laborales.
No es de sorprender
En México la mayor parte de los trabajadores tienen condiciones menos que ideales en sus trabajos, de acuerdo con el Inegi.
7.3 millones de personas trabajan en condiciones precarias, es decir en horarios mayores a lo dictaminado por la ley y con salarios menores a los 80 pesos diarios que señala la normatividad del trabajo.
Esos 7.3 millones son el 14% del total de los ocupados del país, pero hay 23.7 millones de personas en la informalidad que por tanto tampoco tienen acceso a seguridad social.
¿Quiénes son los trabajadores del hogar?
Lo anterior cobra relevancia cuando se analiza el perfil demográfico de las personas que se desempeñan como trabajadores del hogar. Del total, el 33% inició su actividad antes de los 18 años y el 21% era, en 2014 -cuando el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación realizó el estudio más comprensivo en la materia- menor de edad.
La informalidad somete a los trabajadores domésticos a la mala paga y a malos tratos.
El 55% de ellos no concluyeron su educación básica y el 30% tiene como grado máximo de educación secundaria. De igual forma, el ser empleado doméstico da baja movilidad social, pues la mayor parte de ellos han tenido ese trabajo por más de 10 años.
Las personas que se dedican a esta tarea reportan, en un 46%, que trabajan más de ocho horas y el 16% trabaja más de 12 horas.
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Lo anterior por un sueldo semanal de mil 128 pesos si son “de planta” o mil 75 pesos si son de la modalidad “entrada por salida” fuente?. Este sueldo varía de acuerdo con la ciudad donde se encuentren, con Guadalajara como la ciudad en la que ganan mejor y Tuxtla como en la que ganan menos, según el Conapred.
Al mes, los 4 mil 500 pesos que consiguen por sus jornadas de más de ocho horas, sin seguridad social y sin contratos en la mayoría de los casos, colocan a los trabajadores del hogar en el segundo decil, es decir el segundo grupo con menos recursos, de la distribución de ingreso nacional, de acuerdo con la Encuesta nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares de 2016.
MÁS INFORMACIÓN: Condiciones laborales de las trabajadoras domésticas, Conapred 2015.
