Macri llega a Argentina con el plan de liberar el peso y negociar con “fondos buitres”

El presidente electo de Argentina se enfrenta a una economía en recesión, con una devaluación inminente, inflación galopante y unas finanzas públicas con graves problemas
23 Noviembre, 2015 Actualizado el 24 de Noviembre, a las 07:59
Mauricio Macri llega a la presidencia de Argentina con el 51.4% de los votos, y con ello rompe con 12 años del 'kirchnerismo'.
Mauricio Macri llega a la presidencia de Argentina con el 51.4% de los votos, y con ello rompe con 12 años del 'kirchnerismo'.
Arena Pública

Con una ventaja de sólo 2.8 puntos porcentuales es como Mauricio Macri se ha hecho de la victoria presidencial en Argentina.

Con el 51.4% de votos en la segunda vuelta de elecciones presidenciales en la República de Argentina, el candidato de la alianza Cambiemos se ha llevado el triunfo -con el 99.17% de las casillas escrutadas al momento.

El actual jefe de Gobierno en Buenos Aires será quien asuma la presidencia del país sudamericano el próximo 10 de diciembre con un plan económico que prevé la ruptura con el ‘kirchnerismo’, después de 12 años en los que Néstor Kirchner (2003-2007) y su esposa, Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) gobernaron la Argentina.

El vencedor Macri no la tendrá fácil en lo económico. Con una economía que, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), apenas crecerá 0.4% en 2015 y con una caída esperada de 0.7% para 2016, el equipo económico de Mauricio Macri tendrá que afrontar una economía recesiva, con graves problemas de deuda, con una devaluación inminente de su moneda, una inflación galopante y un preocupante déficit público.

Fin al 'cepo cambiario'

Desde 2011 Bueno Aires ha mantenido una política cambiaria conocida como “cepo cambiario” que tiene como objetivo la restricción al máximo de la salida de divisas y procurar una disminución en la venta de dólares.

En 2013 se estableció que las compras realizadas en el exterior en dólares, y con tarjeta de débito y débito, tendrán un recargo del 35% sobre el monto total. Esta misma regla se extiende para el turismo que compra dólares en Argentina.

En respuesta a ello, se ha dado un fenómeno particular en el Estado sudamericano, en el cual ha surgido un mercado negro de dólares conocido como ‘dólar blue’.

Ante  ello, Macri -quien fuera también dirigente del equipo de fútbol Boca Juniors- , ha dicho que su primera política será eliminar este cepo cambiario, medida que prevé tomar al día siguiente de su posesión en el cargo.

En una entrevista radiofónica con La Red en Argentina declaró: “a partir del 11 de diciembre no hay más cepo”.

“Van a sobrar dólares en la Argentina a partir de diciembre. Yo dejo flotar el tipo de cambio. Pero lo vamos a tener que sostener porque van a venir tantos recursos que la moneda (el peso) va a tender a apreciarse”, agregó.

Incluso en otros discursos, Macri aseguró que buscarán un punto medio en la cotización entre el dólar oficial y el blue.

Bonos Buitres y el Mercosur

Otro de los temas pendientes en el país de la Patagonia ha sido los llamados “bonos buitres”, la deuda del gobierno argentino que tiene con los acreedores internacionales, quienes poseen bonos y títulos públicos.

Macri declaró sobre ello que se prevé ir a negociar “ para no caer en que digan... que sos un incumplidor".

Afirmó que la intención de su gobierno será no caer en default, específicamente “estar al día con las deudas, no deberle nada a nadie, no ser moroso”, aunque sin aceptar como tal, hacer caso al juez de Nueva York, Thomas Griesa, quien ordenó a Argentina pagar mil 600 millones de dólares en razón de dichos bonos.

Otra de las variantes que ha dado la vuelta, es que Argentina podría abrirse y pedir negociar al Mercado Común del Sur (Mercosur) un acuerdo comercial con la Unión Europea; tradicionalmente Buenos Aires se había negado a tal postura.

Además, en relación a este mismo acuerdo ha pedido que Venezuela salga del tratado y pidió citar la cláusula democrática del Mercosur que establece la posibilidad a un Estado miembro ante la ruptura del orden democrático en virtud del Protocolo de Ushuaia, suscrito en 1998, aunque dicha decisión sólo podrá tomarse en consenso.

Macri argumenta que el apresamiento de Leopoldo López, quien fuera el contendiente opositor presidencial del actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, es una muestra de ruptura con la democracia por lo que éste se ha pronunciado a favor de la puesta en libertad de López y su esposa, Liliana Tintori.

El presidente electo de Argentina también ha señalado que retomará relaciones con organismos internacionales de crédito, entre ellos el FMI, con quien rompió virtualmente el vínculo desde hace 7 años.

Lo cierto es que en lo económico, Macri y su gobierno tendrán mucho por rehacer y eso implica caminar al filo de la navaja en un contexto global con alta volatilidad.