Programas Sociales y Pobreza (2019-2024)

Reducir la pobreza estadística a través de transferencias monetarias será transitorio.
29 Marzo, 2019

El Presidente López Obrador está poniendo en marcha todo un cúmulo de programas sociales con el objetivo de reducir la pobreza en el país, o al menos intentar mejorar un poco la inequitativa distribución del ingreso.

Más allá de las dudas y críticas que ello pueda ocasionar, una cosa si se puede asegurar: la probreza se reducirá desde el primer año de gobierno y posiblemente a lo largo del sexenio. Sin embargo, existe un “pero…

Efectivamente, no existe duda de que los programas sociales en marcha, y los que vienen en camino, reducirán de alguna manera el número de pobres en el país desde el 2019. Esto es algo que ya se alcanza a vislumbrar y empezará a confirmarse cuando las primeras estadísticas oficiales den cuenta del balance sobre pobreza en el primer año del gobierno lopezobradorista.

De hecho, no sería una sorpresa si el primer reporte anual anuncia que el número de pobres en el país se redujo en algunos cientos de miles en el primer año de gobierno, y las estadísticas oficiales allí estarán a la mano para quien quiera verificarlas.

Para el 2021 con estadísticas acumuladas para los primeros tres años de gobierno, la reducción del número de pobres será significativa y posiblemente de algunos cuantos millones. Esto atraerá la atención de organimos internacionales quienes no escatimarán en declarar a los programas sociales lopezobradoristas como extraordinariamente exitosos, como así lo hicieron con “bolsa familia” en la época lulista en Brasil. Para antes de que termine el sexenio, y en ausencia de algún tropiezo económico, el número de pobres se habrá reducido en algunos millones.

 

Para el 2021, con estadísticas acumuladas para los primeros tres años de gobierno, la reducción del número de pobres será significativa y posiblemente de algunos cuantos millones. Esto atraerá la atención de organimos internacionales

 

Las cifras no mentirán ni la metodología estará manipulada, incluso estarán certificadas con los estándares internacionales. Sin embargo, la mayor parte de esa reducción de la pobreza lograda con los programas sociales será solo en las estadísticas, porque es muy fácil reducir el número de pobres si el gobieno otorga transferencias monetarias a la población en cantidades suficientes para colocar su ingreso ligeramente por encima de la línea de pobreza o ingreso mínimo.

Así, mientras esas transferencias se mantengan a lo largo del sexenio, todas esas familias anteriormente pobres clasificarán por encima de la línea de pobreza. Sin embargo, existe la posibilidad de que en el futuro –cuando López Obrador se vaya o llegue un nuevo gobierno con un enfoque diferente– esas transferencias puedan reducirse o incluso eliminarse, y con ello gran parte de esas familias que vivieron de la asistencia gubernamental volverán a caer en la pobreza, porque su ingreso no será suficiente para situarse por encima de la línea de pobreza.

Un problema general de los programas asistenciales gubernamentales es que las transferencias monetarias no solo no generan empleo sino que incluso producen un incentivo perverso en quienes las reciben para no buscar empleo.

Incluso quienes reciben una ayuda económica para aprender un oficio podrían verse al final en una situación en que el oficio que aprendieron podría no ser tan rentable y empujarlos a incorporarse al sector informal donde el ingreso neto puede superar en mucho al salario en el sector formal.

Así, una cosa es segura: los programas sociales lopezobradoristas serán efectivos en reducir la pobreza en las estadísticas, pero no es seguro de que vayan a reducir la probreza estructural, lo cual solo se logra con una economía que crece de manera sostenida, a tasas mas altas, y con una generación de empleos permanentes y mejor remunerados.

En esta última característica juega un papel muy importante las políticas públicas que mejoren la distribución del ingreso de manera permanente y no con políticas expansivas de naturaleza transitoria.

 

Twitter:  @AlfredoCoutino

Web:  www.AlfredoCoutino.com

Director para América Latina en Moody’s Analytics. Las ideas expresadas son de la exclusiva responsabilidad del autor y de ninguna manera deben ser atribuidas a la institución para la cual trabaja.

 

Alfredo Coutiño Alfredo Coutiño Economista por la UNAM, maestro en Economía por el ITAM y doctor en Economía Aplicada por la Universidad Autónoma de Madrid. Es director para América Latina de Moody's Analytics, subsidiaria de la calificadora Moody's Corporation, desde 2005 en donde lidera el análisis, modelos y pronósticos para América Latina. Fue director de Ciemex-Wharton Econometrics.